Miguel Zugaza - Centro de Estudios Garrigues

NO TE LO PUEDES PERDER
Un lugar en que es necesario pasar
varios días para disfrutar bien de todo lo
que nos puede ofrecer.
La visita la iniciaremos, junto al magnifico
edificio del Ayuntamiento de la
ciudad, en la Plaza de los Aliados. Esta
plaza, rodeada de grandiosos edificios,
es como el corazón de la ciudad.
Iremos en dirección a la Iglesia de
los Clérigos y su famosa torre, monumento
barroco, y obra maestra del
arquitecto italiano Nicolau Nasoni. Si tienes
coraje para subir las 250 escaleras,
disfrutarás de una vista increíble sobre
la ciudad y, en particular, sobre el casco
medieval.
Descenderemos por las empinadísimas
calles en dirección a los muelles
del barrio de Ribeira, uno de los barrios
más característicos de la ciudad y centro
de una animada vida nocturna.
Junto al río Douro cruzaremos el
Puente D. Luis I, proyectado por el francés
Eiffel, en dirección a las Caves de
Vino de Oporto en Vila Nova de Gaia.
Existen más de 59 casas de vino de
Oporto, de las cuales se pueden visitar
cerca de una veintena. Aquí tienes la
oportunidad de catar diferentes variedades
de vino de Oporto mirando hacia
el paisaje austero pero también acogedor
del casco antiguo de Oporto.
Empieza tu introducción al mundo de
los vinos de Oporto, vintage, tawny,
ruby, Lbv…
Volviendo a la orilla derecha del río
pasaremos junto al Palacio da Bolsa,
antigua sede de la Bolsa de Oporto con
su maravilloso Salón de las Naciones y
Salón Árabe, visitaremos el Convento
de São Francisco, cuya leyenda dice
que su iglesia fue cerrada al culto por
orden del Obispo de Oporto, por los
abusos que el clero cometió allí con la
profusión de dorados.
Seguiremos en dirección al tradicional
Bairro da Sé y visitaremos la catedral
Nossa Senhora dos Remedios
de Oporto, su claustro con azulejos
notables y el Palacio Episcopal.
De las muchas atracciones de la ciudad,
no puedes perder el Museo de Arte
Contemporáneo de Serralves, obra del
consagrado arquitecto Alvaro Siza Vieira,
la Casa da Musica, sorprendente
obra del arquitecto holandés Rem Koolhaas,
la Librería Lello que es considerada
una de las más bonitas del mundo,
tomar un café en el Majestic, contemplar
los monumentales azulejos de la estación
de ferrocarriles de São Bento que
cuentan la historia de Portugal y probar
la gastronomía local.
Cabe hablar de las Francesinhas y
para los mas corajosos las Tripas à
moda do Porto (estómago de ternera
con embutidos y judías blancas), plato
que le da el nombre a los habitantes de
Oporto – Tripeiros (aquellos que comen
tripas).
Del 23 al 24 de junio, Oporto recibe
su mayor fiesta popular, conocida como
“A noite de São João” – La noche de San
Juan –. Toda la ciudad sale a la calle. La
tradición obliga a que lleves un puerro
en la mano y con él des en la cabeza de
la gente que pase por ti… Además hay
muchos bailes por los barrios tradicionales
y un monumental fuego artificial
sobre el río.
Seguiremos en barco, en uno de los
muchos cruceros posibles, hasta el
valle del Douro, región vinícola y también
patrimonio de la humanidad,
donde se produce el famoso vino de
Oporto.
Esta región fue la primera con denominación
de origen del mundo, creada
en 1756 por orden del Primer Ministro
del Rey Don José, el Marqués de Pombal.
La extraordinaria calidad de sus
vinos se debe a factores como el microclima
marcado por el río, y por los viñedos
que están situados desde las márgenes
del río hasta 700 metros de altura.
Las castas principales para la producción
del vino son la Touriga Nacional,
Tinta Barroca, Tinta Cão y Tinta
Roriz.
“Terrazas” vinicolas
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