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En torno al epistolario Jaspers-Heidegger - cristobal holzapfel

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“La fiesta del pensamiento”<br />

Re<strong>al</strong>ización: Cristób<strong>al</strong> Holzapfel<br />

Programa No. 277 para la Radio de la Universidad de Chile<br />

Ciclo: “<strong>En</strong> <strong>torno</strong> <strong>al</strong> <strong>epistolario</strong> <strong>Jaspers</strong>-<strong>Heidegger</strong>”<br />

Audición: martes 6 de junio del 2001 a las 8,15 hrs. AM<br />

Nos deteníamos a pensar en la última ocasión acerca de la fuerza de la amistad, y<br />

particularmente de una amistad como aquella entre <strong>Jaspers</strong> y <strong>Heidegger</strong>, y que los pone en una<br />

situación de no poder terminar con ella, a pesar de muchos quiebres a lo largo de toda una vida.<br />

Ello se revela claramente en el hecho de que aún habiéndole escrito <strong>Jaspers</strong> una carta<br />

muy dura el 52 a su par, igu<strong>al</strong>mente recibe de este último una carta llena de elogios,<br />

reconocimiento y admiración el 53 para su cumpleaños 70.<br />

Éste, por su parte, le contesta de manera muy acogedora, y le reconoce que lo suele ver<br />

así como si estuviera todavía delante de él, como en los años 20. Seguramente preocupado por lo<br />

<strong>al</strong>cances de la dura carta del año anterior, le aclara que lo que había en ella eran sólo preguntas.<br />

Y siempre, como ha sido por lo demás característico en todo este <strong>epistolario</strong>, se dirige a<br />

<strong>Heidegger</strong> con cierto tono profesor<strong>al</strong> y patern<strong>al</strong>, lamentando que t<strong>al</strong> vez podría haber hecho por<br />

su parte mucho más de lo que hizo en los años 30, y así se habrían evitado muchas cosas (en lo<br />

que se refiere a la fat<strong>al</strong> adhesión de <strong>Heidegger</strong> <strong>al</strong> nacion<strong>al</strong>-soci<strong>al</strong>ismo). Reconoce no haber<br />

tenido la suficiente fuerza para ello. Nótese que en ello hay la <strong>al</strong>usión a que podría haber estado<br />

en sus manos el que <strong>Heidegger</strong> no hubiera seguido la senda que siguió.<br />

P 1<br />

Luego, en esta carta del 3 de abril de 1953 hay referencias a la situación en que ha<br />

quedado Alemania, y en particular los <strong>al</strong>emanes, que, debido a la trágica experiencia de los<br />

últimos años (que puso a unos de un lado y a los otros del otro), en muchos casos no saben como<br />

encontrarse. Más aún, él lleva este pensamiento tan lejos que muestra como resulta oscura la<br />

recuperación de lo que sería genuinamente <strong>al</strong>emán, a partir de lo ocurrido.<br />

Éste es un tema que ya lo ha ocupado demasiado, cu<strong>al</strong> es el de Alemania y su destino, y<br />

de él resultará su libro "¿Hacia dónde se dirige la República Feder<strong>al</strong>" de 1966. Por el momento<br />

él cuenta que ha dejado a un lado todos sus escritos que se ocupan del tema, y agrega <strong>al</strong>go muy<br />

interesante y que es propio de la cautela que debe tener el filósofo en relación a emitir juicios<br />

respecto de su tiempo: que hay que esperar hasta que su voz se vuelva más extemporánea<br />

(unzeitgemässer). Podemos advertir en esto un vínculo con las "Consideraciones<br />

extemporáneas" ("Unzeitgemässe Betrachtungen") de Nietzsche, aquellos escritos entre 1873 y<br />

1876, en los que se perfila un Nietzsche con el fuerte ímpetu de poner las cosas en su lugar.<br />

Si pensamos un momento sobre el <strong>al</strong>cance de un término, por sobre todo nietzscheano<br />

como éste, y que usa <strong>Jaspers</strong>, podemos reconocer como nítidamente tiene que ver hasta con el<br />

mismo sentido de la filosofía y su relación con el tiempo. <strong>En</strong> efecto, ésta no puede sino ser una<br />

relación extemporánea, es decir, fuera del apego y del estar aferrado a las urgencias del<br />

momento. Esto quiere decir que la filosofía sólo logra tener un vínculo apropiado con su tiempo,<br />

pero habría que decir también, con la sociedad y el mundo precisamente de ese tiempo, si acaso<br />

está en cierto modo desfasada de él.<br />

De otro modo, sucede que ella fácilmente se desvirtúa y queda apresada en las demandas<br />

urgentes de la cotidianidad, confundiéndose con la política contingente.<br />

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