el-movimiento-obrero-venezolano-libro

el-movimiento-obrero-venezolano-libro el-movimiento-obrero-venezolano-libro

07.01.2015 Views

20 Las luchas de los explotados por reducir la jornada diaria, son inclusive, anteriores a la aparición del capitalismo. Y hasta hubo un monarca británico del siglo séptimo que hablaba de la conveniencia de repartir las 24 horas del día en tres porciones iguales: una para trabajar, otra para la recreación y la tercera para dormir. Durante los siglos diecisiete y dieciocho en Inglaterra, dieciocho en Francia y comienzo del diecinueve en Estados Unidos, se conformó el régimen capitalista de producción en cada uno de esos países. A comienzos del siglo pasado, tanto en Europa como en Norteamérica, aumentaron los combates por la rebaja de la jornada diaria, especialmente de los niños y las mujeres. El Manifiesto Comunista, cuya redacción fue encomendada a Carlos Marx y a Federico Engels, publicado en febrero de 1848, planteó la necesidad de luchar por limitar la jornada diaria y la resolución del Congreso de la Primera Internacional (Asociación Internacional de Trabajadores), celebrado en 1864, concibió su duración conveniente en ocho horas. En Estados Unidos, país donde habrán de transcurrir los históricos sucesos que dieron origen a la fecha que nos ocupa, la lucha por reducir el número de horas laborables cada día, conquistaba éxitos a medida que avanzaba el siglo diecinueve. Para ello la huelga había resultado un instrumento efectivo.

21 Por el año de 1868 una Ley Federal estadounidense estableció la jornada de ocho horas aplicable “a los jornaleros u obreros y artesanos que el Gobierno de los Estados Unidos ocupare en adelante”. Pero en los trabajos privados continuó laborándose once y doce horas diarias. En 1884 (veinte años después del Congreso constituyente de la Primera Internacional, de la A.I.T), se realizó la IV. Convención de la Federación de Oficios Organizados y Sindicatos de los Estados Unidos y el Canadá (que formarán a partir de entonces la American Federation of Labor, A.F .L.). Esa Convención tomó la resolución de que “ocho horas constituyen un día legal de trabajo desde el lº de mayo de 1886”. Recomendó a las organizaciones obreras “hacer promulgar leyes conforme a esta resolución, efectivas a partir de la fecha indicada”. Los dos años que transcurrieron desde el momento en que se tomó tal acuerdo, hasta la fecha fijada para su aplicación, constituyeron el lapso preparatorio de las luchas por hacer efectiva la medida que debía imponerse a los patronos. Ese tiempo fue aprovechado para hacer intensa propaganda y agitación y se advirtió a los obreros que no aceptaran la reducción de la jornada si ésta venía aparejada a una disminución del salario.

20<br />

Las luchas de los explotados por reducir la jornada<br />

diaria, son inclusive, anteriores a la aparición<br />

d<strong>el</strong> capitalismo. Y hasta hubo un monarca británico<br />

d<strong>el</strong> siglo séptimo que hablaba de la conveniencia de<br />

repartir las 24 horas d<strong>el</strong> día en tres porciones iguales:<br />

una para trabajar, otra para la recreación y la tercera<br />

para dormir.<br />

Durante los siglos diecisiete y dieciocho en Inglaterra,<br />

dieciocho en Francia y comienzo d<strong>el</strong> diecinueve<br />

en Estados Unidos, se conformó <strong>el</strong> régimen capitalista<br />

de producción en cada uno de esos países.<br />

A comienzos d<strong>el</strong> siglo pasado, tanto en Europa<br />

como en Norteamérica, aumentaron los combates<br />

por la rebaja de la jornada diaria, especialmente de<br />

los niños y las mujeres.<br />

El Manifiesto Comunista, cuya redacción fue encomendada<br />

a Carlos Marx y a Federico Eng<strong>el</strong>s, publicado<br />

en febrero de 1848, planteó la necesidad de luchar por<br />

limitar la jornada diaria y la resolución d<strong>el</strong> Congreso de<br />

la Primera Internacional (Asociación Internacional de<br />

Trabajadores), c<strong>el</strong>ebrado en 1864, concibió su duración<br />

conveniente en ocho horas.<br />

En Estados Unidos, país donde habrán de transcurrir<br />

los históricos sucesos que dieron origen a la fecha que nos<br />

ocupa, la lucha por reducir <strong>el</strong> número de horas laborables<br />

cada día, conquistaba éxitos a medida que avanzaba <strong>el</strong><br />

siglo diecinueve. Para <strong>el</strong>lo la hu<strong>el</strong>ga había resultado un<br />

instrumento efectivo.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!