INGENIERÍA DE CAMINOS RURALES - Zietlow

INGENIERÍA DE CAMINOS RURALES - Zietlow INGENIERÍA DE CAMINOS RURALES - Zietlow

06.01.2015 Views

para proteger a la calzada contra daños y disminuir la frecuencia de mantenimiento necesario. • Evite la alteración del suelo y de la vegetación a menos que sea necesario. Deje la mayor cantidad de vegetación (pastos) en las cunetas, en las zonas del acotamiento del camino, y en los taludes de cortes y rellenos (sobre todo pastos y maleza de crecimiento lento) siempre que sea posible. Sin embargo, asegúrese de que los sistemas de drenaje sigan funcionando correctamente. • Retire materiales desprendidos de la calzada o del interior de las cunetas donde el material pueda obstruir el drenaje normal de la superficie de la calzada (Foto 4.11). • Evite ensanchar el camino o el exceso de inclinación de los taludes de relleno formados al empujar con cuchilla el material superficial fuera del camino. • Cierre el camino durante condiciones de mucha lluvia o en periodos de inactividad. • Inspeccione el camino a intervalos regulares, sobre todo después de periodos de lluvias fuertes. Cierre de caminos Un camino se puede cerrar porque ya no es necesario, como puede suceder al agotarse un recurso o si se ha desplazado una comunidad, cuando no se vaya a usar durante un cierto intervalo de tiempo, o si el camino está representando un alto costo inaceptable de mantenimiento o de afectación al medio ambiente. El cierre de un camino con frecuencia implica la participación del público y de otros usuarios del camino que resulten afectados. Entre las opciones básicas para el cierre de caminos se encuentran las siguientes: Cierre temporal o bloqueo con barreras, barricadas o bermas; Cierre permanente donde la superficie del camino sea estabilizada y las estructuras de drenaje sean eliminadas, pero dejando en su lugar la plantillas del camino; o Cancelación del camino donde se retire en su totalidad la calzada y las obras de drenaje y la zona sea reconfigurada para devolverle su condición natural previa a la construcción del camino. En la Figure 4.6 se

muestra la gama de opciones que generalmente se consideran como antecedente al cierre de caminos. Si ya se terminó el uso provisional del camino, como en el caso de explotaciones forestales o mineras, los caminos se deberán cerrar temporalmente o ponerlos fuera de servicio con el fin de protegerlos contra erosión durante el periodo en que no se vayan a usar. Los caminos cerrados temporalmente deberán bloquearse con una barrera, barricada o berma para evitar el acceso de vehículos, pero deberán conservarse las estructuras transversales de drenaje. La superficie del camino se deberá volver a configurar para que tenga un buen drenaje y se estabilizará con caballones desviadores y posiblemente se escarificará, se sembrará y se le colocará una cubierta vegetal. Las estructuras permanentes de drenaje tales como alcantarillas y cunetas necesitarán una limpieza periódica. El empleo de técnicas de cierre de caminos y de mantenimiento de rutina una vez concluidas las operaciones permitirá proteger la inversión en el camino hasta que se vuelva a necesitar en el futuro. Cierre permanente de caminos implica el bloqueo del camino, la remoción de todas las estructuras transversales de drenaje y del material de relleno, y la estabilización de la superficie del camino. Estos generalmente se logra al desgarrar la superficie de rodamiento (escarificación), para luego sembrar y colocar una cubierta vegetal, de tal manera que el camino se reforeste naturalmente con el tiempo (Foto 4.12). El costo de este trabajo es relativamente bajo, se elimina la mayor parte del daño ambiental producido por el camino, y se mantiene en pie la geometría básica de la base del camino para el caso en que el camino eventualmente se vaya a reconstruir en el futuro. El cierre del camino con destrucción total, se logra en aquellos casos en que la base del camino se elimine totalmente y el terreno se restaure a su configuración original. Todos los materiales de drenajes transversales se retiran, el terreno se vuelve a configurar, y se restauran los patrones naturales de drenaje, incluyendo idealmente los patrones de flujo del agua subterránea, para terminar con la reforestación de la zona. Resulta particularmente importante retirar todo el material de relleno que se hay colocado en los drenajes, como es el caso de los materiales de respaldo de las alcantarillas. Estas medidas relativamente costosas se aplican idealmente en zonas sensibles tales como parques o reservas, cerca de áreas recreativas, o cerca de arroyos y lagos. Estas medidas resultan muy efectivas para eliminar toda traza de un camino y eventualmente restaurar la zona a su condición natural previa a la construcción del camino. Sin embargo, debido a su alto costo, la simple puesta fuera de servicio de un camino resulta la más redituable para el cierre de un

muestra la gama de opciones que generalmente se consideran como<br />

antecedente al cierre de caminos.<br />

Si ya se terminó el uso provisional del camino, como en el caso de<br />

explotaciones forestales o mineras, los caminos se deberán cerrar<br />

temporalmente o ponerlos fuera de servicio con el fin de protegerlos contra<br />

erosión durante el periodo en que no se vayan a usar. Los caminos cerrados<br />

temporalmente deberán bloquearse con una barrera, barricada o berma para<br />

evitar el acceso de vehículos, pero deberán conservarse las estructuras<br />

transversales de drenaje. La superficie del camino se deberá volver a<br />

configurar para que tenga un buen drenaje y se estabilizará con caballones<br />

desviadores y posiblemente se escarificará, se sembrará y se le colocará una<br />

cubierta vegetal. Las estructuras permanentes de drenaje tales como<br />

alcantarillas y cunetas necesitarán una limpieza periódica. El empleo de<br />

técnicas de cierre de caminos y de mantenimiento de rutina una vez concluidas<br />

las operaciones permitirá proteger la inversión en el camino hasta que se<br />

vuelva a necesitar en el futuro.<br />

Cierre permanente de caminos implica el bloqueo del camino, la<br />

remoción de todas las estructuras transversales de drenaje y del material de<br />

relleno, y la estabilización de la superficie del camino. Estos generalmente se<br />

logra al desgarrar la superficie de rodamiento (escarificación), para luego<br />

sembrar y colocar una cubierta vegetal, de tal manera que el camino se<br />

reforeste naturalmente con el tiempo (Foto 4.12). El costo de este trabajo es<br />

relativamente bajo, se elimina la mayor parte del daño ambiental producido<br />

por el camino, y se mantiene en pie la geometría básica de la base del camino<br />

para el caso en que el camino eventualmente se vaya a reconstruir en el futuro.<br />

El cierre del camino con destrucción total, se logra en aquellos casos en<br />

que la base del camino se elimine totalmente y el terreno se restaure a su<br />

configuración original. Todos los materiales de drenajes transversales se<br />

retiran, el terreno se vuelve a configurar, y se restauran los patrones naturales<br />

de drenaje, incluyendo idealmente los patrones de flujo del agua subterránea,<br />

para terminar con la reforestación de la zona. Resulta particularmente<br />

importante retirar todo el material de relleno que se hay colocado en los<br />

drenajes, como es el caso de los materiales de respaldo de las alcantarillas.<br />

Estas medidas relativamente costosas se aplican idealmente en zonas sensibles<br />

tales como parques o reservas, cerca de áreas recreativas, o cerca de arroyos y<br />

lagos. Estas medidas resultan muy efectivas para eliminar toda traza de un<br />

camino y eventualmente restaurar la zona a su condición natural previa a la<br />

construcción del camino. Sin embargo, debido a su alto costo, la simple puesta<br />

fuera de servicio de un camino resulta la más redituable para el cierre de un

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!