Memoria de actividades 2005-2006 - Real Academia de la Historia

MEMORIA DE ACTIVIDADES 2005-2006
98
El académico
don José
Alcalá-Zamora,
coordinador
del ciclo de
conferencias
conmemorativas
del IV centenario
del nacimiento de
Felipe IV.
ciclo tuvo por título La Monarquía Hispánica: 1605.
A esta le siguieron Cervantes y los Antiguos dictada
por don Francisco Rodríguez Adrados, «Mercadería
vendible. La frustración teatral cervantina y el
negocio teatral» por doña Carmen Sanz; Del Tirante
el Blanco y El Lazarillo, al Quijote por doña Rosa
Navarro, El teatro breve cervantino por doña Evangelina
Rodríguez, El Madrid de Juan de la Cuesta
por don Alfredo Alvar y por último la conferencia
Don Quijote y Sancho, Hidalguía y escudería en la
España de 1600 que pronunció don Gonzalo Anes.
8-25 de abril
CICLO DE CONFERENCIAS
IV CENTENARIO DEL NACIMIENTO DE FELIPE IV
Del 8 al 25 de abril tuvo lugar en la Real Academia
de la Historia el ciclo de conferencias conmemorativo
del IV Centenario del nacimiento de Felipe IV Durante
el ciclo, coordinado por el académico don José Alcalá-Zamora
y Queipo de Llano, se revisó la personalidad
y obra de Felipe IV frente al trabajo de «algunos
historiadores que rebajan su persona y reinado bajo
el estúpido epígrafe de Austrías menores, un burdo e
inadecuado eco de otras rúbricas dinásticas», señaló
don José Alcalá-Zamora en la presentación. En el curso
de las conferencias se recordó que, pese a los errores
y fracasos de la política de su reinado, éste fue uno
de los más decisivos y, tal vez, el momento mayor de
nuestra historia cultural. Por ello la figura de Felipe IV
merece interés y respeto: la España de su tiempo era
una nación grandiosa, presente en todos los rincones
del mundo entonces conocido. Bajo el reinado de este
monarca España mantuvo una lucha exterior titánica
para defender su cultura frente a las agresiones de los
países del norte de Europa. Los ejércitos y escuadras
del rey obtuvieron más victorias de las que lograran
antes o después las armas españolas, y alguna de ellas
resultó decisiva para el futuro del continente. Al final,
el rey perdió la guerra contra la Europa septentrional,
pero pudo defender, con heroica resistencia y voluntad,
la mayoría de sus dominios europeos, de España y de
las Indias, salvando así la presencia de nuestro país
en el mundo de hoy. El ciclo fue inaugurado con la
conferencia de don Carlos Seco Serrano titulada El Rey
Católico. En ella aludió a la esmerada educación que
recibió Felipe IV, «quien tradujo en su juventud, con
el propósito de adiestrarse en las artes del gobierno,
la Historia de Italia, de Guicciardini, uno de los textos
clásicos de la historiografía». Durante el ciclo se pusieron
de manifiesto las indudables dotes del rey como
poeta, faceta apenas conocida, «pues no quería hacer
alardes de sus trabajos y los ocultaba». Además, Felipe
IV fue también autor de alguna comedia y de algunas
pinturas hoy perdidas, compositor de música que los
entendidos elogiaron y excelente tirador de mosquete
o arcabuz.
En alguna de las intervenciones también se resaltó
el papel de Felipe IV como generoso mecenas y se
recordó al incontable número de genios de las artes
y las letras protegidos bajo su reinado. Igualmente
se destacaron sus opiniones inteligentes sobre materias
políticas y económicas. Los participantes en el
ciclo insistieron en que Madrid y las Indias vieron
por entonces florecer su urbanismo, que maduró con
magníficos edificios religiosos y civiles. El reinado
de Felipe IV constituyó la etapa más brillante y cosmopolita
de la cultura española en el exterior. El
ciclo sirvió para aclarar la, a veces incorrecta, pero
extendida tesis historiográfica que traza una división
entre la trascendencia política de los dos primeros
Austrias, Carlos I y Felipe II, y sus sucesores, más
concretamente Felipe IV. Tras la sesión inaugural
tuvieron lugar las conferencias de don Fernando
Bouza Álvarez, Semblanza y aficiones del monarca;