ROYAL PhiLhARmOnic ORchestRA - Blog del Auditorio Miguel ...
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Ludwig van Beethoven<br />
(Bonn, 17-x i i-1770; Viena, 26-iii-1827)<br />
Concierto para piano y orquesta nº 4 en Sol mayor, op. 58<br />
Composición: 1805-1806. Estreno: 22-x i i-1808 en el Theater an der Wien;<br />
Beethoven, piano.<br />
Audición privada en el palacio <strong>del</strong> Príncipe de Lobkowicz: iii-1807.<br />
Dedicado al Archiduque Rodolfo de Austria.<br />
Cuando Beethoven compuso este Concierto para piano nº 4<br />
en Sol mayor, estaba también trabajando simultáneamente en la<br />
ópera Fi<strong>del</strong>io, el Triple Concierto, la Sonata Apassionata op. 57, los<br />
Cuartetos Razumovsky, op. 59, las Sinfonías nº 4 y 5 y el Concierto<br />
para violín, op. 61. Aunque para algunos esta exuberancia<br />
inventiva se debía a su noviazgo con Thérèse von Brunsvick, con<br />
la que supuestamente se había prometido, lo más probable es que<br />
esto únicamente forme parte de la leyenda que rodea la vida y los<br />
tortuosos amores <strong>del</strong> personaje, y que los románticos potenciaron<br />
y agrandaron. Sin embargo lo que realmente no es leyenda ni<br />
ficción es la magnitud de las obras relacionadas –y especialmente<br />
las de cámara, mucho más innovadoras– y su importancia e<br />
influencia en el desarrollo posterior de la música.<br />
Beethoven pasaba en su época, cuanto menos, por ser<br />
un excéntrico. Frases como “¡Oh, no es para usted…! Es<br />
para los tiempos venideros”. O: “¿Creen que pienso en<br />
sus miserables cuerdas cuando el espíritu me habla”, eran<br />
algunas de sus respuestas a los comentarios despectivos<br />
sobre sus cuartetos de cuerda. Lo trascendente, lo singular<br />
y lo original, parecían ser el objeto principal de sus<br />
composiciones, de tal manera que hasta Haydn aludía a su<br />
alumno como “el joven mogol”. Sin embargo esa díscola<br />
postura que le permitía liberarse de adoptar