CAMBIO CLIMATICO
CAMBIO CLIMATICO
CAMBIO CLIMATICO
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
PRIMERA COMUNICACIÓN NACIONAL<br />
otro a las condiciones actuales (1995-2000) los<br />
cuales se correspondieron con los cambios observados<br />
en el patrón estacional y las tendencias<br />
ya discutidas en el epígrafe anterior.<br />
Las tendencias observadas en la enfermedad de<br />
la malaria coinciden con las tendencias regionales<br />
manifestadas en el clima, las cuales a<br />
partir de 1975 señalan cambios en el régimen<br />
de precipitaciones con tendencias a la disminución<br />
y variación ligera en la humedad, así como<br />
una tendencia al calentamiento que aunque ligera<br />
y no significativa, ya ha comenzado a dar<br />
señales de que se calienta la región. Resulta interesante<br />
que aquí no hay una clara evidencia<br />
entre los brotes y las condiciones de eventos<br />
ENOS, ya que en 1999 se produjo un alza y no<br />
estábamos en condiciones de evento ENOS sino<br />
de AENOS.<br />
1.4.4.b) Efectos de la variabilidad del<br />
clima sobre las enfermedades<br />
Los resultados alcanzados nos corroboran la hipótesis<br />
del que el clima es un factor modificador<br />
de los patrones epidemiológicos de la malaria y<br />
de hecho los ha estado variando a medida que el<br />
clima ha variado en la región, donde la enfermedad<br />
se presenta en períodos poco contrastantes,<br />
con altas temperaturas y tendencias al aumento<br />
de la humedad relativa como consecuencia del<br />
comienzo de las precipitaciones. Estas condiciones<br />
favorecen la proliferación de los agentes patógenos<br />
para la aparición de las epidemias.<br />
1.4.4.c) Evaluación de los impactos<br />
físicos<br />
Existen evidencias científicas que demuestran<br />
que las enfermedades estudiadas en esta evaluación<br />
son susceptibles a los efectos del cambio climático<br />
(Ortiz, 1995; Ortiz, 1996, CONAMA,<br />
CNCC, 1999; IPK, 1999). Muchos de los organismos<br />
biológicos y procesos ligados a la aparición<br />
de enfermedades infecciosas están especialmente<br />
influenciados por fluctuaciones en las variables<br />
climáticas, especialmente la temperatura,<br />
precipitación y humedad (McMichael, A.J, and<br />
others, 1996). El cambio climático regional ha<br />
alterado el patrón en el número de enfermedades<br />
infecciosas y enfermedades producidas por intoxicación<br />
alimentaría, entre otras.<br />
Tanto el clima como las enfermedades presentan<br />
cambios significativos en los comportamientos<br />
de los patrones de la variabilidad y epidemiológicos<br />
respectivamente, puesto que ambas series<br />
a partir de la década de los 90 daban señales de<br />
una persistencia en sus variaciones que pudieran<br />
tomarse como las primeras señales del cambio<br />
en el clima, así como en el comportamiento<br />
de las enfermedades y sus respuestas a las variaciones<br />
del clima; es decir, se observa una tendencia<br />
secular ( o a largo plazo) de la evolución de<br />
la variabilidad climática en el área de estudio.<br />
Es posible formular distintas estrategias de<br />
adaptación para reducir el impacto del clima en<br />
la salud humana. En general, tales medidas pudieran<br />
desarrollarse tanto en el ámbito de los individuos<br />
como de la población.<br />
La primera medida es común a todas las entidades<br />
abordadas y se refiere a mantener informada<br />
a la población con la labor educativa sobre<br />
los riesgos o acontecimientos que se pudieran<br />
presentar. Esto permitirá una participación activa<br />
de la comunidad, dando soluciones locales<br />
que permitan atenuar algunos de estos efectos.<br />
Para cada una de estas enfermedades deben<br />
identificarse o recomendarse medidas específicas<br />
que permitan un impacto con el menor costo posible,<br />
para obtener una mayor eficacia en la reducción<br />
de los problemas de salud que debe<br />
afrontar el país en este nuevo siglo.<br />
La forma de lograr esto debe ser a través de la<br />
creación de un Sistema Integrado de Vigilancia<br />
como parte de una red o sistema nacional, que<br />
facilite la predicción de las epidemias o la determinación<br />
de comportamientos de enfermedades<br />
fuera de su canal endémico. Como resultado<br />
se podrá realizar una planificación más<br />
adecuada y racional de los recursos disponibles<br />
durante períodos de contingencia y reducir los<br />
efectos del impacto del cambio climático. Tam-<br />
37