Haciendo Justicia - Acceso al sistema

DERECHO YDIFERENCIA ÉTNICA' 415
tablecidas en edificios deteriorados, en muy malas condiciones." La mayoría
de estos edificios se encuentran condenados desde el sismo de
1985 y todavía no pueden ser recuperados. Ahí dentro, en general, pueden
contar con uno o dos baños comunes, un lavadero, y muy poca estructura
básica de luz y gas, lo que hace de estas vecindades un riesgo
para la vida. En algunas de ellas conviven con personas no indígenas,
los "urbanos" como muchos les dicen; sin embargo, este sector es minoritario
y la organización es estructurada a partir de los indígenas, en
general, familiares.' La distinción de "indígenas" y "urbanos" parece rara,
principalmente cuando muchos se definen como citadinos, además, parece
fundamentada en los principios de la migración cuando marcan su
aislamiento en la ciudad.
Desde que llegaron a la ciudad los mazahuas se han dedicado a la venta
ambulante, sumada a otras actividades marginales como limpiar los
parabrisas de coches en los semáforos. Sin embargo, la ciudad se ha
transformado y aunque sigan los problemas con la fiscalización que
limitan el comercio en las calles, el comercio ambulante ha crecido y generado
otras oportunidades para estos grupos. De hecho, los propios mazahuas
ya describen la venta ambulante como parte de sus propias culturas,
independiente de los conflictos que puedan generar, y la perciben
como una actividad tradicional realizada por sus abuelos y padres." Se
podría imaginar que el comercio ambulante ya se ha consolidado como
una tradición reelaborada sobre nuevas condiciones.
El proceso de adaptación de los mazahuas a la ciudad fue marcado
por la discriminación, por la segregación y por la vida difícil dentro de
vecindades en pésimas condiciones (Arizpe, 1975). A ellos los tenían como
delincuentes, mendigos, "atrasados". Sin embargo, aunque sus condiciones
sean todavía difíciles, muchos mazahuas sienten que hoy pue-
'Recientemente, debido a un programa de apoyo a la vivienda para indígenas migrantes implementado
por la Secretaría de Desarrollo Social del Gobierno del Distrito varias de las vecindades consideradas
de alto riesgo para ser habitables, han sido desalojadas mientras se construyen habitaciones más adecuadas
para sus integrantes (nota de la editora MTS).
'Durante la investigación, juntamente con la antropóloga Rafaela Flores, se pudo detectar que en
una de las organizaciones mazahuas, había un integrante de la mesa directiva no indígena que era avalado
como tal. Aunque parezca raro tal situación, el grupo explica que esta persona se encontraba con
ellos hace mucho tiempo, compartía sus tradiciones, además argumentaba que si un indígena puede dejar
de ser indígena e integrarse a otra cultura, por qué ellos no podían agregar a un urbano como parte
de la organización indígena.
'En los estudios de Maya Lorena Pérez Ruiz con los mazahuas migrantes a Ciudad Juárez, en el
norte del país, se observa cómo igualmente allí se establecieron en el comercio ambulante y cómo aunque
se les ofrezca un trabajo en las maquiladoras siguen en este trabajo enfrentando todo tipo de agresiones
de los policías y del personal de la vía pública (Pérez Ruiz, 1993).