Haciendo Justicia - Acceso al sistema

42 • HACIENDO JUSTICIA
sí abren alternativas y generan algunas fisuras a costumbres establecidas
que muchas mujeres están aprovechando. En el caso de las organizaciones
de mujeres observamos la construcción de un discurso crítico
que al mismo tiempo que busca poner límites al derecho indígena,
cuestiona la visión androcéntrica de la ley.
Uama especialmente la atención el papel que las organizaciones de
derechos humanos estánjugando al generar nuevos espacios de mediación,
promoviendo que los asuntos se resuelvan con base en acuerdos
entre las partes, sin tener que llegar a las instancias estatales. Un papel
clave lo juegan también los programas de gestores y defensores indígenas,
algunos de los cuales son impulsados por mujeres, según revelan
Morales (ms.) y Sierra en el municipio nahua de Cuetzalan y Zacapoaxtla.
Los procesos organizativos y las nuevas discursividades que
los acompañan constituyen importantes referentes en las dinámicas jurídicas
a nivel local y regional.
En suma, las dinámicas de cambio social y económicas impactan
de manera estructural la vida de las comunidades indígenas generando
nuevas contradicciones en los diferentes campos de la vida social.
En el ámbito de lo jurídico, los nuevos procesos están incidiendo en
las formas comunitarias de manejo de la conflictividad social y se revelan
nuevas y crecientes tensiones con el Estado, pero también procesos
de mayor integración e incidencia de los poderes y normas legales
estatales en los espacios regionales y locales. Las costumbres se
transforman para adecuarse a las nuevas situaciones, se incorporan
nuevos lenguajes normativos, se reivindican derechos y se apunta a
construir una etnicidad en donde lo jurídico juega un papel relevante.
Los nuevos discursos de derechos generan a su vez contradicciones
al valorar, por un lado, referentes de legalidad que abren nuevas
opciones ante el Estado, pero que, por otro lado, generan también
procesos críticos ante costumbres instituidas. Tal es, por ejemplo, lo
que sucede con la referencia al discurso de los derechos humanos
cuando se aplica mecánicamente para calificar las prácticas de la justicia
indígena, lo que suele llevar a cuestionar el ejercicio de la autoridad
comunitaria sin pasar por mediaciones previas que permitan
discutir el sentido de ciertas tradiciones culturales. En un sentido similar
hay que entender el discurso de las mujeres indígenas quienes
de manera directa plantean una crítica a sus costumbres cuestionando
así poderes establecidos ante las lógicas jurídicas indígenas y las del
Estado.