Haciendo Justicia - Acceso al sistema

PROCURACIÓN DE JUSTICIA EINTERLEGALIDAD • 381
tu'un savi. Por su parte, agrega información que es de su conocimiento
como son las razones o argumentos de por qué se cometió la
falta, las posibles sanciones a aplicar en caso de incumplir con el
acuerdo establecido y la forma de avalar el escrito, mediante una firma
o asentando la huella digital. En ocasiones aparecen frases hechas,
tales como "se encontraba en estado de ebriedad" o "pedir perdón
o disculpas" a los demandantes y que éstos lo otorgan. Dichas
expresiones parecieran simples frases o muletillas, pero en realidad
son elementos que están dando cuenta de una lógica jurídica que está
detrás del procedimiento, con sus normas propias. El interés de la
autoridad y los comparecientes radica en establecer un acuerdo en el
que se repare parcialmente el daño cometido, de acuerdo con una
costumbre naa savi.
La solicitud y otorgamiento del perdón es el primer acuerdo de la
conciliación ante el síndico, cuando se ha realizado algún tipo de daño
o lesión; el segundo, es la forma como se va a solucionar el problema."
Otorgar el perdón tiene implicaciones en dos sentidos: la primera es en
el plano moral, pues al reconocer que se cometió una falta, el síndico
procurador y las otras personas mayores presentes, sancionan el proceder
del acusado, recordándole el deber ser y coaccionándolo a cumplir
con la petición de los quejosos. La segunda implicación consiste en facilitar
una forma de reparación del daño al establecer algún acuerdo
que resuelva parcialmente el agravio, pues si no se reconociera la conducta
perjudicial, el caso no tendría posibilidad de solución en la sindicatura
y la única salida entonces, sería turnar el caso a una autoridad
superior fuera del municipio, por lo tanto, mestiza.
En el caso antes mencionado, si el síndico hubiese dejado que se siguieran
los procedimientos oficiales, existe una alta posibilidad de que
los quejosos no pudieran dar continuidad al asunto por limitaciones
económicas, por lo que el síndico favorece la conciliación en el ayuntamiento
y, al menos, consigue una cierta compensación por los gastos
que el daño provocó a los afectados. Cuando el síndico visualiza la posibilidad
de arreglar un conflicto, puede incidir formulando algún tipo
de acta conciliatoria, con el fin de presionar para que más adelante se
llegue' a un acuerdo. No obstante, en el acta se reitera por escrito lo que
se acordó en el litigio, que en caso de que se presente el mismo asunto
ante la autoridad, entonces "se les aplicará la ley."
"Procesos similares son descritos en otros contextos por CoIlier (1995) y Sierra (1995).