Haciendo Justicia - Acceso al sistema

INTERLEGALIDAD, JUSTICIA YDERECHOS' 131
Cada autoridad y cada instancia tienen definidas sus competencias
legalmente, si bien en la práctica suelen alejarse de la norma legal sobre
todo a nivel de las juntas auxiliares y las comunidades, pero también
en el municipio. Puede afirmarse que a mayor profesionalización del
campo jurídico se complejizan las instancias jurídicas y se impone el
discurso legal con mayor fuerza. A menor profesionalización existe
más posibilidad de que se geste una dinámica jurídica más autónoma
de la ley y más vinculada con procedimientos y normas culturales indígenas.
Las estipulaciones legales definidas tanto en el Código de Defensa
Social como en la Ley Orgánica Municipal establecen de manera
general los ámbitos y competencias de las autoridades municipales y de
las juntas auxiliares, sin hacer mención alguna a la condición étnica. Se
trata de lineamientos muy generales que suelen ser desconocidos por
las autoridades de los pueblos. De ahí también que, al igual que en la
región de Huauchinango, las autoridades judiciales suelen implementar
cursos dirigidos a las autoridades de las comunidades para que tengan
en cuenta sus "funciones" y sus "límites". La tendencia a la capacitación
de las autoridades indígenas sobre la ley se ha agudizado en los últimos
tiempos, como unajustificación del Estado para garantizar elllamado
estado de derecho.
Pude estar presente en varios de estos cursos realizados en Huauchinango
y en Cuetzalan con la presencia de autoridades de las comunidades.
En uno de ellos, que tuvo lugar en el Palacio Municipal de
Cuetzalan, me sorprendió la manera en que el maestro, una personajoven
y trajeada -más preocupada de su tiempo que en hacerse entenderpretendía
enseñar a las autoridades indígenas, casi todas autoridades
mayores de edad, cómo debían aplicar la ley. Insistía en señalar los límites
en la actuación de las autoridades para que no cometan "abuso
de autoridad" al encarcelar a alguien por más horas de las previstas, o
detenerlo sin haber cometido un delito. Pero sobre todo señalaba que al
aplicar la ley debían de hacerlo con la Constitución en la mano. Las autoridades
miraban con suspicacia a su respingado maestro, y algunos
comentaron, ya al término de la reunión, que "así como él decía no
se podía". Actitudes como la del funcionario muestran el desconocimiento
que funcionarios oficiales tienen de la justicia en las comunidades
indígenas, lo que además no les suele interesar, pero también la
arrogancia y falta de respeto al ni siquiera tener en cuenta que se dirigía
a autoridades comunitarias y municipales, y no a alumnos de una
escuela. Más allá de la resistencia o la dificultad de las autoridades in-