2 - Gnostic Liberation Front
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El Führer habló de la creación de linajes. En el estado actual de la involución del Vira, dentro del Kali-Yuga,<br />
encontrándose prisionero y habiendo perdido el poder creador directo, fulgurante, plasmador de Vril, ha llegado a<br />
hacer uso del mecanismo reproductor del Pasu, impuesto por el Demiurgo, valiéndose del sexo como un medio<br />
de procrear el cuerpo físico. Como si el prisionero hubiese sido obligado a valerse de los únicos medios y<br />
costumbres a disposición en este "universo concentracionario". La multiplicación se hacía imprescindible en estas<br />
etapas de la Gran Guerra, dentro del Kali-Yuga, para que subsistieran los materiales de relevo que hacen posible<br />
la continuación de la lucha contra el Demiurgo. Y así también la viabilidad de la Resurrección continuaría abierta<br />
para algunos. Porque dentro de un Linaje Hiperbóreo, de una Casa/de Familia, con uno que llegue, que ejecute la<br />
Melodía hasta su consumación, que dé a luz el Hijo del Hombre, que construya su Eidelón, su Cuerpo Astral y con<br />
él se salga, bastará para que todo el Linaje participe de la Resurrección y del retorno a Hiperbórea.<br />
El predestinado a quedar incincta del Hijo Interior, de la Muerte Mística, no debería participar en la procreación de<br />
los hijos de la carne por medio del sexo.<br />
Si alguien pudiera ver en esto cierta similitud con las doctrinas cataras, es sólo en apariencia. Tal como se han<br />
divulgado por sus enemigos, las creencias del catarismo considerarían la encarnación en la tierra del<br />
Demiurgo-Jehová como una caída, un conjuro, una violencia ejercida sobre los espíritus puros por medio del<br />
sexo, que los obliga a esta encarnación. Sólo ven el Mal, siendo por consiguiente contrarios a toda procreación y<br />
aceptando hasta el suicidio en la Endura, como un medio de poder escapar de las garras del Demiurgo. Mas,<br />
para el héroe del Hitlerismo Esotérico, para el Vira, para el guerrero de Wotan, el entrar aquí a combatir es una<br />
obligación de honor y lealtad (el lema de los SS). Únicamente así podrá luchar contra la creación demoníaca del<br />
Señor de las Tinieblas, llegando a transmutarla, a transfigurarla. Y hasta el sexo le habrá servido, como medio de<br />
arrebatarle algunos Pasu al Demiurgo, transmutándolos en Viras, por medio de este sacrificio tántrico, por así<br />
decir. Es,ta es la Gran Guerra.<br />
Si vence, saldrá resucitado, inmortal, como Hombre-Absoluto. Con un Rostro, individuado. Y esto sólo se logra<br />
en el combate glorioso "del quinto cielo hacia abajo", como guerreros de la Orden de Wotan y del Führer.<br />
Algo que se debe volver a insinuar, aunque sin revelarlo totalmente, es que ya no sería más necesaria la<br />
procreación del hijo de la carne por medio de la fórmula demiúrgica del sexo. Los Viras del Hitlerismo Esotérico<br />
han redescubierto la creación e inmortalización de los cuerpos valiéndose de otros procedimientos, recuperando<br />
el Vril, de modo que ya existen aquí también ejércitos inmortales, de Divyas con cuerpos rúnicos, de Vraja, rojos,-duros<br />
como el diamante, de Fuego Verde-Rojo. Son indestructibles, invulnerables aún al arma atómica y al<br />
láser. Ya están fuera y adentro de la tierra, entrando y saliendo en sus Vimanas, de modo que no les afectará la<br />
gran destrucción que se avecina al cierre del Ciclo.<br />
Esto lo adelanté en el Epílogo de "El Cordón Dorado".<br />
Es la Wildes Heer del Führer, con la que retornará en el momento preciso a rescatar a los Viras, sus camaradas.<br />
La desesperación del Demiurgo-Jehová, que también lo sabe, se refleja en su pretensión de imitar. Nada más<br />
puede hacer el Demiurgo y su "desdoblamiento psíquico", el judío. Sólo copiar malamente. Así, produce<br />
monstruos de laboratorio, inseminaciones artificiales, intentos de "hombres biónicos". Es decir, la ciencia<br />
tecnológica, la mecánica grosera del Kali-Yuga.<br />
REGRESO AL PAÍS DE OIYEHUE<br />
Fue muy corta mi permanencia en Chile, después de esa entrevista con los gobernantes de la Junta Militar. Toda<br />
ilusión se había perdido sobre un posible entendimiento del tema fundamental. Mi Maestro había dicho: "Chile<br />
descenderá al fondo de la miseria y de ahí se levantará hasta llegar a ser un poder en América". Pensemos que el<br />
descenso sea el momento actual y que aún quede una esperanza. Además, comprendo que vine a Chile guiado,<br />
no para ver a los jefes de la Junta, ni para colaborar con ellos. Se me trajo-aquí, aun cuando yo no lo supiera<br />
conscientemente, porque mi Maestro iba a partir. Para siempre y a regiones lejanísimas, siguiendo el Devayana,<br />
el Camino sin Retorno de los Dioses. Así pude estar con él hasta el final.<br />
Antes de dejar nuevamente Chile, hice declaraciones en un periódico de Santiago ("Las Ultimas Noticias")<br />
criticando la política económica que entonces se comenzaba a implantar en este país. Varias personas enviaron<br />
cartas al diario apoyando mi posición. Y ya no volví a Chile hasta que la Universidad me invitara para dar una<br />
charla sobre Nietzsche, en unos cursos de verano sobre "Wagner y Nietzsche", que debí repetir en la Universidad<br />
de Concepción. Aproveché para editar mi libro "El Cordón Dorado, Hitlerismo Esotérico", que tantos ataques<br />
arteros me valiera, poniéndome en el ostracismo literario y en una suerte de interdicción. Pero la edición del libro<br />
se agotó.<br />
Volví a partir a Europa, residiendo en el Ticino, como he dicho, en el viejo palazzo Camuzzi que también fuera la<br />
casa de Hermann Hesse en los años posteriores a la Primera Guerra Mundial.<br />
Por diez años había vivido en India, después en los Balcanes y en Austria; ahora, por diez años debí permanecer<br />
en Suiza. En India busqué las entradas al Ashram de los Siddhas en los Himalaya; en los Pirineos busqué a los<br />
agotes, la tumba de Pirena y el Gral de los Cataros, en las cavernas de Montsegur, del Sabarthé, donde también<br />
incursionara Otto Rahn. En los Alpes, en largas y agotadoras expediciones por las cimas del Grisone, en la alta<br />
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