Universidad Alberto Hurtado

Tercera Etapa: Gpaé como actor único en la sustentación del cambio.
Después de casi diez años de dominio del narcotráfico (etapa dos) un
hecho circunstancial gatilló el proceso de intervención más importante que la
comunidad había vivido en toda su historia. La policía Militar, con su
agrupamiento de policías en áreas especiales (GPAÉ), decide instalarse de
forma permanente en el morro y combatir frontalmente el narcotráfico. A las
pocas semanas del proceso de intervención este actor se comienza a
consolidar, logrando romper la resistencia de los grupos de tráfico de drogas y
de la población en general. El Gpaé haciendo uso de la fuerza y el combate
frontal se instala en el centro del morro en unas dependencias cedidas por la
Varig. Así se comienza a gestar una nueva etapa en la comunidad, donde el
narcotráfico deja de ser el actor preponderante y comienzan a surgir nuevos
liderazgos. Sin la amenaza constante de la violencia armada, el morro pasa a
ser un lugar ideal para la inserción de programas sociales que ayuden a
reincentivar a la comunidad y a mejorar la calidad de vida de las personas. Se
articula así un espacio ideal para la instalación de organizaciones no
gubernamentales y para que las identidades del gobierno se instalen también
en el morro. Esto se plasma en la configuración de un nuevo mapa de actor
muchos más rico y diverso, donde se incluyen instituciones gubernamentales,
educativas, de salud, culturales, etc.
Los espacios públicos por su parte también se ven claramente
enriquecidos. Con una red mayor de actores, una comunidad sin miedo y la
vigilancia permanente del Gpaé, la gente vuelve a apoderarse del territorio. Los
niños vuelven a jugar tranquilos en las calles y los espacios de socialización se
incrementan. Además las nuevas organizaciones que se insertan en el morro,
realizan actividades que fomentan el uso de los espacios públicos, lo que
despierta nuevamente el interés por el cuidado de ellos. Así ocurren cambios
significativos, como la transformación de un bar en una sala de lecturas y
esparcimiento de la ONG Gente de Brasil, o la transformación de una sala
abandonada de la Asociación de Moradores en un centro de computación.
Este ciclo virtuoso: llegada de la policía militar, fin del narcotráfico,
densificación del mapa de actores, aumento de las actividades, intensificación
del uso del espacio público, incremento de la calidad de estos espacios, etc.
funciona bajo la lógica de sinergias positivas que son fuerzas concéntricas,
que al unirse hacen más fuerte y efectivo este proceso.
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