Universidad Alberto Hurtado

vez los riegos de la población infantil se multiplican porque no es posible dejar
a los niños bajo cuidados profesionales cuando se debe ir a trabajar. Además
este tema termina afectando, casi de manera exclusiva a las mujeres, y con
ello se reproducen y aumentan las condiciones desfavorables históricas de
género, ya que son las abuelas, vecinas, o hermanas mayores que quedan al
cuidado de los niños, sin tener ni las condiciones ni el tiempo para hacerlo.
Por lo tanto, la demanda va creciendo y la presión se vuelva hacia la
Asociación de Moradores, ellos comienzan entonces a gestionar los recursos y
los posibles actores- socios. En el caso del Jardín Infantil, se consiguió en una
primera etapa la donación del terreno, este quedó legalmente inscripto a
nombre de la Asociación; luego comenzó la campaña para conseguir los
materiales, y la mano de obra que construiría el edificio educacional.
Con esos recursos obtenidos, la Prefeitura asume la responsabilidad de hacer
funcionar financieramente el proyecto, es decir asume los gastos de
mantención total, sean estos alimentación, empleados, personal técnico y pone
a disposición su red de profesionales, asumiendo por ejemplo el traslado de
ellos hacia los lugares donde se desarrolla el proyecto. En este caso los
jardines reciben una visita mensual de los profesionales necesarios para toda
institución pedagógica: psicólogo, nutricionistas, psicopedagogos, etc.
Este tipo de proyectos, además de solucionar importantes carencias, son
generadores de trabajo permanente y formal, ya que uno de los requisitos del
programa es que la gente empleada sea miembro de la comunidad. Solo en los
casos en que no se cuenta con miembros lo suficientemente capacitados,
puede contratarse a moradores externos.
Por último, está la ONG “Gente de Brasil” que surgió de la iniciativa de un
agente externo, pero fue inspirada y ayudada por actores de internos,
trabajando también en ella solo actores de la comunidad.
Estos casos son muy interesantes ya que permiten una vinculación
importante entre agentes externos y agentes internos. Lo que acarrea una
gran cantidad de beneficios, como por ejemplo, una mayor participación por
parte de la comunidad, un mayor autocuidado de las instituciones, un diálogo
importante entre la comunidad y agentes externos, la creación de programas
basados en las verdaderas problemáticas de la comunidad, la generación de
empleo estable y formal, el aumento de los niveles de confianza y asociatividad
entre otros.
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