3 sumario.indd, page 1 @ Normalize - Centro de Estudios Garrigues
3 sumario.indd, page 1 @ Normalize - Centro de Estudios Garrigues
3 sumario.indd, page 1 @ Normalize - Centro de Estudios Garrigues
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
COLABORACION EXTRAORDINARIA<br />
Ignacio Buqueras y Bach<br />
Presi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la Comisión Nacional para la Racionalización <strong>de</strong> los Horarios Españoles y <strong>de</strong> ARHOE. Autor <strong>de</strong> Tiempo al tiempo (Planeta)<br />
Cambiar nuestros horarios<br />
para lograr la excelencia<br />
Todavía hoy, para un gran número<br />
<strong>de</strong> españoles, la jornada laboral<br />
empieza entre las ocho y las<br />
nueve <strong>de</strong> la mañana, y termina avanzada<br />
la tar<strong>de</strong> o incluso <strong>de</strong> noche. A ello<br />
hay que añadir el tiempo <strong>de</strong> <strong>de</strong>splazamiento<br />
que, en las gran<strong>de</strong>s ciuda<strong>de</strong>s,<br />
y sobre todo para quienes se trasladan<br />
<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el centro hasta la periferia o viceversa,<br />
pue<strong>de</strong> superar las dos horas<br />
entre la ida y la vuelta.<br />
Llegamos a casa muy tar<strong>de</strong> y agotados;<br />
cenamos fuera <strong>de</strong> hora; apenas<br />
nos queda tiempo para estar con<br />
nuestra pareja y nuestros hijos; prolongamos<br />
la jornada con un rato ante la<br />
televisión, cuya programación se rige<br />
a menudo por horarios ina<strong>de</strong>cuados; y<br />
dormimos poco y mal, lo cual repercute<br />
en nuestra salud y calidad <strong>de</strong> vida, y<br />
en un mayor riesgo <strong>de</strong> sufrir acci<strong>de</strong>ntes<br />
laborales y <strong>de</strong> tráfi co... Así, no es extraño<br />
que muchos españoles encuentren<br />
gran<strong>de</strong>s difi culta<strong>de</strong>s para conciliar el<br />
trabajo remunerado con su vida privada,<br />
lo cual da lugar a unas situaciones<br />
personales ciertamente lamentables.<br />
Padres y madres que no ven a sus hijos<br />
en toda la semana, y que se <strong>de</strong>sesperan<br />
porque no saben cómo resolverlo;<br />
menores <strong>de</strong>satendidos; mujeres que<br />
retrasan sine die la maternidad por miedo<br />
a per<strong>de</strong>r su cargo o a <strong>de</strong>scarrilarse<br />
completamente <strong>de</strong>l tren <strong>de</strong> su carrera<br />
profesional; abuelas estresadas por<br />
aten<strong>de</strong>r a sus nietos...<br />
Por todo lo anterior, consi<strong>de</strong>ro imprescindible<br />
cambiar nuestros horarios.<br />
¿Cómo? Acercándolos a los <strong>de</strong> otros<br />
países europeos <strong>de</strong> nuestro mismo<br />
nivel cultural y económico -Alemania,<br />
Bélgica, Dinamarca, Francia, Reino Unido...-,<br />
en los que los ciudadanos llegan<br />
a sus casas a las cinco o las seis <strong>de</strong><br />
la tar<strong>de</strong> y les queda tiempo libre para<br />
ellos mismos y para sus relaciones con<br />
los <strong>de</strong>más. Propongo implantar en España<br />
un nuevo mo<strong>de</strong>lo horario, un esquema<br />
<strong>de</strong> jornadas laborales capaz <strong>de</strong><br />
conciliar, <strong>de</strong> una vez por todas, la vida<br />
personal y familiar con la vida laboral.<br />
Defi endo la fl exibilidad <strong>de</strong> horarios, la<br />
jornada continua o comprimida, el teletrabajo<br />
con tecnología pagada por la<br />
empresa...<br />
Con estos propósitos creamos, en<br />
junio <strong>de</strong>l 2003, la Comisión Nacional<br />
para la Racionalización <strong>de</strong> los Horarios<br />
Españoles y su Normalización con<br />
los <strong>de</strong> los Países <strong>de</strong> la Unión Europea<br />
que, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> entonces presido. Dicha racionalización<br />
y normalización presenta<br />
innegables ventajas: conciliar nuestra<br />
vida personal, familiar y laboral; permitir<br />
la igualdad real entre el hombre y la<br />
mujer; mejorar nuestra felicidad y calidad<br />
<strong>de</strong> vida; dormir el tiempo sufi ciente;<br />
favorecer la salud; aumentar la productividad<br />
<strong>de</strong> las empresas; disminuir<br />
la siniestralidad; apoyar el rendimiento<br />
escolar; facilitar la globalización... y, en<br />
<strong>de</strong>fi nitiva, algo tan importante y tan hermoso<br />
como dar mayor valor al tiempo,<br />
para lo que es imprescindible apren<strong>de</strong>r<br />
a gestionarlo. Un minuto que pasa es<br />
irrecuperable, <strong>de</strong>cía Gandhi, quien añadía:<br />
sabiendo esto, ¿cómo po<strong>de</strong>mos<br />
malgastar tantas horas?<br />
Llevamos, pues, cinco años estudiando<br />
a fondo tan interesante e importante<br />
asunto y tratando <strong>de</strong> aportar soluciones<br />
que ofrezcan a los españoles <strong>de</strong><br />
hoy, a nuestros hijos y a las siguientes<br />
generaciones un espacio <strong>de</strong> oportunida<strong>de</strong>s.<br />
El hábito <strong>de</strong> calentar la silla<br />
En España sigue estando muy arraigada<br />
la cultura <strong>de</strong> la presencia, <strong>de</strong> horarios<br />
interminables bajo la fi scalizadora<br />
mirada <strong>de</strong>l jefe, don<strong>de</strong> lo que importa<br />
es permanecer en el lugar <strong>de</strong> trabajo un<br />
16