ANUARIO ORNITOLÓGICO DE CASTELLÓN 2007 - InterNatura

Anuario Ornitológico de Castellón. 2007
gaviotas grandes y más a tierra, ocupando
por su menor tamaño una posición menos
dominante. De todos modos no permanecen
por mucho tiempo, y poco a poco van
desapareciendo en pequeños grupos mar
adentro, raro es ver cabecinegras
descansando a plena luz del día. Donde y
cómo pescan es un pequeño misterio, tan
solo disponemos de algunos indicios
proporcionados por un par de salidas
invernales con los grandes arrastreros de la
flota pesquera de Castellón. En estas salidas
lo primero que llama la atención es lo
rápidamente que desaparecen las gaviotas
patiamarillas y sombrías del panorama
general, a las pocas millas se ven escasas y
casi desaparecen a las 10 millas. La gaviota
cabecinegra sin embargo sigue presente con
mayor o menor abundancia en toda la
plataforma, que es muy ancha en esta zona
(30 millas). En estos momentos se puede
disfrutar del vuelo fácil y ligero de las
cabecinegras que forman pequeñas partidas
que vuelan arriba y abajo, siguiendo a
veces durante bastante rato a los barcos,
confundiéndose con la gaviota tridáctila,
más grácil pero de tamaño muy similar
aunque de hábitos más marinos, ya que ni
siquiera los temporales de levante las llevan
a la costa. En estas situaciones de temporal,
precisamente, se aprecia un aumento de
cabecinengras en los dormideros, lo que
podría indicar que existe un contingente de
aves de costumbres completamente
pelágicas durante el invierno y que
subestiman los censos. Este hecho ya fue
observado en el entorno de la Albufera por
Dies & Dies (1992)
Además de esta pesca activa
diurna, la especie ha superado la tensión de
volar junto a motores rugientes de 500
caballos y se alimenta frenéticamente de la
inmensa cantidad de pescado que se lanzan
por las bordas de los arrastreros en su vuelta
al puerto, junto a todo el resto de gaviotas,
págalos y pardelas. Para un observador de
tierra, que puede pasar días sin ver págalos
o pardelas, es un espectáculo revelador de lo
difícil que es estudiar las aves marinas
desde la costa.
FENOLOGÍA CV
Alicante
El buen seguimiento de la especie,
básicamente por parte de A.J. Ramos, en
algunas zonas húmedas de Alicante (P.N. de
las Salinas de Santa Pola y Saladar de Agua
Amarga) indican que la gaviota cabecinegra
está presente todo el año, con máximos pre
y postnupciales que no llegan a sumar los
200 ejemplares los mejores años, y
presencia testimonial durante el invierno,
con una cita máxima de 20-30 ej. en el norte
de la provincia a finales de diciembre.
Valencia
El seguimiento por parte de los
ornitólogos valencianos de esta especie
indican que muestra un patrón muy similar
al observado en Alicante, pero su mayor
proximidad a las mejores áreas de invernada
de Castellón hace que se cite en mayor
número, con un máximo histórico de 400 ej.
en el Puerto de Sagunto a mediados de
enero de 1994 (M. Yuste, SVO, en Dies &
Dies, 1994). El primer intento de cría en la
Albufera de Valencia fue de 2001, con una
puesta que fracasó.
Castellón
Los censos realizados durante dos
inviernos seguidos (2002-2004) mostraron
una fenología muy similar, y un tanto
particular, aunque compartida con algunas
otras especies invernantes en el levante
ibérico, y caracterizada por un doble pico,
uno a principios de diciembre y otro a
principios de enero, con una bajada
intermedia muy notable y claramente
significativa, esto indica que en los poco
más de tres meses con presencia importante
de aves se producen dos pasos marcados,
queremos suponer que de aves hacia el
norte, hacia la gran población invernante
tarragonina y hacia el sur, hacia el atlántico
de nuevo en un paso muy temprano.
Fuera de la época invernal las
citas vienen marcadas por un goteo de
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