Gardner, John - Para ser novelista (Ensayo)
Gardner, John - Para ser novelista (Ensayo)
Gardner, John - Para ser novelista (Ensayo)
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
verdad» (con esto no pretendo negar que a veces se hagan<br />
buenas películas), o <strong>ser</strong>ies televisivas para cretinos; puede<br />
enseñar literatura creativa a jornada completa; puede dedicarse<br />
a la publicidad o al pomo o a escribir artículos para National<br />
Geographic puede convertirse en el vago más interesante del<br />
vecindario; si ha obtenido cierto éxito con una novela comercial,<br />
puede convertirse en habitual de los programas de entrevistas;<br />
puede lanzarse a la política o hacerse colaborador de<br />
The NewYork Times o de The NewYork Review of Books...<br />
No hay nada más duro que convertirse en un verdadero<br />
<strong>novelista</strong>, a menos que uno quiera <strong>ser</strong> exclusivamente eso, en<br />
cuyo caso, a pesar de que llegar a <strong>ser</strong> un verdadero <strong>novelista</strong><br />
es duro, lo es menos que todo lo demás.<br />
Tener un carácter compulsivo puede acabar con alguien<br />
con la misma facilidad con que puede salvarlo. El <strong>novelista</strong><br />
ha de <strong>ser</strong> obsesivo y a la vez <strong>ser</strong> indiferente. Van Gogh no<br />
vendió un solo cuadro en su vida. Poe cultivó la poesía y la<br />
ficción, y vendió muy poco. La obsesión sólo sirve si arrastra<br />
al escritor no al suicidio, sino a la realización de espléndidas<br />
obras de arte, y si le permite, además, tomarse con indiferencia<br />
que la novela venda o no, que sea o no apreciada. La<br />
obsesión constituye un problema tanto para el <strong>novelista</strong> como<br />
para sus amigos; pero ningún <strong>novelista</strong>, creo yo, puede<br />
triunfar sin ella. Junto al campesino que lleva dentro, en todo<br />
<strong>novelista</strong> tiene que haber un hombre con un látigo.<br />
5<br />
Nadie puede decirle realmente al <strong>novelista</strong> si tiene o no lo<br />
que hace falta. La mayoría de aquéllos a quienes el joven<br />
escritor se lo pregunta no están capacitados para responder.<br />
Puede que estén muy bien situados, incluso que sean famosos,<br />
108