Discusiones-entre-un-protestante-y-los-catolico-romanos

EL 8ACERDOCIO CRISTIANO. 199
pasaje en que los ministros de la iglesia sean
llamados
sacerdotes, es decir, ofrecedores de sacrificios.
Son llamados ministros,
pastores, maestros, instructores,
presbíteros, diáconos, obispos, apóstoles, pero
sacerdotes nunca. Este hecho salta á la vista al leer
las Escrituras.
Tenemos muchos pasajes en que
se enumeran los
varios ministerios que hay en la iglesia de Dios, pero
nunca se nombra entre estos el ministerio sacerdotal
ó sacrificador. En la 1. a á Corint. 12. 27, 28 se lee:
«Pues vosotros sois el cuerpo de Cristo, y miembros
en parte. Y á unos puso Dios en la Iglesia, primeramente
apóstoles, luego profetas, lo tercero doctores,
luego facultades, luego dones de sanidades, ayudas,
gobernaciones, géneros de lenguas.» Ya se ve que aquí
no se hace mención de sacerdote ó sacerdocio. En
Efes. 4. 11, 12 dice también: «Y él mismo dió unos
ciertamente apóstoles, y otros profetas, y otros evangelistas,
y otros pastores y doctores. Para perfección
de los santos, para la obra del
ministerio, para edificación
del cuerpo de Cristo.» ¿Dónde están aquí los
sacerdotes? Lo mismo leemos en 1. a á Corintios 4. 1;
1. a á Timoteo 3. 1 y 8, Tito 1. 5. ¿Y es posible creer
que al hacer una enumeración tan detallada de los
varios ministerios que Jesucristo estableció en su
Iglesia, se hubiese escapado á la pluma de San Pablo,
iluminada por el Espíritu Santo, el contar el que
creen el principal entre todos los ministerios, el ministerio
del sacrificador ó sacerdote? ¡Ah! no: es que
teniendo al gran Sacerdote, Cristo, no necesitamos de
más sacerdotes; y el sostener esta necesidad es presuponer
la insuficiencia de Cristo.