JORNADAS NACIONALES DE ÉTICA 2009 - UCES

Conflictividad y tragedia
y un conflicto trágico entre ambas dimensiones de la verdad trágica. En
este sentido resulta el precursor de Hegel, Bachofen, Fustel de Coulanges,
Nietzsche 17 , Heidegger y muchos otros contemporáneos abocados al pensamiento
trágico.
Para este trabajo hemos seleccionado el desarrollo de esta teoría de los
conflictos tal como aparece en Hegel y su esbozo en Heidegger. Ambos, a su
manera, son deudores del pensar originario de Hölderlin. Según D. Henrich,
Hegel le debe a su “pacto espiritual” con Hölderlin nada menos que el “impulso
fundamental en el camino hacia su propio pensar”, sobre todo en la época
de Frankfurt y los primeros años de Jena, aunque luego su construcción del
sistema lo alejara de él 18 . Por su parte, el viraje (Kehre) heideggeriano se opera
estimulado por su diálogo hermenéutico con Hölderlin.
2. Hegel y el conflicto trágico
Destacamos tres períodos en el pensamiento del autor, en los que la
determinación de una identidad a partir de lo trágico resulta decisiva, lo cual
no excluye el rasgo trágico que atraviesa toda su obra y ha permitido que
ese pantragismo mantenga en vilo a su panlogismo. Lo podemos detectar
tanto en su filosofía de la historia como en el movimiento de la negatividad
que es el nervio de su dialéctica. Pero aquí nos referiremos especialmente
al período de Frankfurt (1797-1800), al de Jena (1801-1807) y al de Berlín
(1818-1831). En cada uno seleccionamos una obra fundamental para
nuestro tema: El espíritu del cristianismo y su destino, Fenomenología del
espíritu y Lecciones sobre la estética. Mientras que en las dos primeras se
agudizan las tensiones trágicas, en la última se acentúa más la tarea de su
reconciliación.
En Frankfurt, y gracias a Hölderlin, el pensamiento de Hegel hace su primer
viraje significativo.
“Hölderlin le hizo caer en cuenta de que su universo conceptual kantiano
era inadecuado para comprender experiencias comunes y convicciones de
los años juveniles -que la política griega era unión y no simple conexión
entre hombres libres, que la libertad tiene que ser pensada no únicamente
como mismidad, sino también como entrega, y que en la experiencia de lo
bello se encuentra algo más que el respeto por la ley racional” 19 .
17
Cf. Bodei, Remo, Hölderlin: la filosofía y lo trágico, trad. J. Díaz de Atauri, Barcelona, Visor,
1990, p. 77.
18
Cf. Henrich, Dieter, Hegel en su contexto, trad. J.A. Díaz, Caracas, Monte Ávila, 1990, pp.
12 s.
19
Ib., p. 21.
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