JORNADAS NACIONALES DE ÉTICA 2009 - UCES

Algunas reflexiones evolucionistas sobre la ética convergente
por sus interlocutores. Probablemente, la estrategia apriorista de fundamentación
puede sugerir cierta irrelevancia del problema de la génesis a
la hora de discutir el problema de la validez. Si ese fuera el caso, queda
por aclarar la función de las reflexiones antropológicas y etológicas en la
estructura de la ética convergente.
Para mejorar la visibilidad del planteo es relevante señalar una segunda
convergencia teórica del trabajo de Maliandi vinculada con la formulación
de un paradigma de aplicabilidad en el marco de su proyecto filosófico. El
campo de la ética aplicada, argumenta Maliandi, se ha desarrollado bajo
el impacto de la llamada globalización. El impulso al desarrollo científico
tecnológico da apertura a la reflexión ética en varios sentidos, ampliando
sus incumbencias a nuevos campos y descubriendo nuevos problemas en
esa ampliación, lo que conduce a la generación de nuevos valores y nuevos
objetos de reflexión, exigiendo, a partir de ellos, nuevos modos de producción
normativa.
Para Maliandi, el abordaje de estas nuevas cuestiones obliga a clarificar la
bidimensionalidad de la razón, distinguiendo sus funciones críticas de sus
funciones de fundamentación. El desarrollo de su paradigma de aplicabilidad
reclama asumir las tensiones de la razón entre sus funciones crítica y
fundamentadora para lo cual debe ser una práctica interdisciplinaria en la
que converjan las racionalidades particulares de las diferentes disciplinas.
Es a partir de la puesta en juego de una racionalidad compleja y bifronte
que podrá proponerse una fundamentación de modelos normativos aplicables
a los nuevos campos que desafían la razón práctica. Esta lógica
particular implicó una convergencia con el modelo bioético de Beauchamp
y Childress, procurando dar una fundamentación a priori a los principios
bioéticos, para habilitar su aplicación a las nuevas prácticas emergentes del
desarrollo tecnológico.
Posiblemente este énfasis en la relación entre ética aplicada e impacto tecnológico
ilumina el punto en que las tesis antropológicas y etológicas de
Maliandi se insertan en su argumentación. En efecto, Maliandi enmarca los
actuales dilemas prácticos partiendo de algunas tesis etológicas sobre la
especie humana que permiten comprender el peculiar desafío que confronta
a la ética con el desarrollo tecnológico. Siguiendo algunas tesis etológicas
de Konrad Lorenz, propone interpretar la aparición de la técnica como una
búsqueda del equilibrio perdido entre el ecosistema y nuestra especie, que
ponía al hombre en riesgo de extinción. Según Lorenz, la ética surge para
compensar el desequilibrio etológico que significó la aparición de la técnica
para nuestra agresión intraespecífica, siendo que la técnica siempre ha sido
bifronte: dominadora de la naturaleza y del hombre. Este doble carácter
impuso una ambigüedad a la técnica que ha constituido la precondición
884