¿Quien-creo-a-Dios? de R. Zacharias-N. Geisler

¿Quien-creo-a-Dios? de R. Zacharias-N. Geisler ¿Quien-creo-a-Dios? de R. Zacharias-N. Geisler

elteologillo.files.wordpress.com
from elteologillo.files.wordpress.com More from this publisher
08.11.2014 Views

26 i ~ U I ¡ n n ¡ Ó R ~ I ~ P PREGUNTAS DIFÍCILES ACERCA DE DIOS 27 Si este es el caso, bastará demostrar que el universo tuvo un principio y probar que obedece a una causa (por ejemplo, a Dios). Hay dos argumentos contundentes que permiten probar que el universo tuvo un principio. Uno proviene de la ciencia: la segunda ley de la Termodinámica. El segundo pro~ viene de la filosofía, y consiste en la imposibilidad de un número infinito de momentos. Según la segunda ley de la Termodinámica, la energía uti~ lizable del universo se está agotandd. Ahora bien, si el uni~ verso está agotándose, no puede ser eterno. De lo contrario, ya se habría agotado completamente. Si la cantidad de ener~ gía fuera ilimitada no se podría agotar, pero una cantidad limitada de energía puede agotarse. Por lo tanto, el universo debió tener un principio. Pongamos l!na ilustración. Cualquier vehículo cuenta con una cantidad limitada de energía (combustible). Por eso es necesario cargar el tanque cada tanto tiempo, más seguido que lo que desearíamos. Si contáramos con un enorme e ilimitado tanque de combusti~ ble, ya no tendríamos que cargar nunca más. El que tengamos que cargar el tanque cada tanto tiempo demuestra que tuvo que haber sido llenado una primera vez. O, para usar otro ejemplo: un viejo reloj que poco a poco se queda sin movi~ miento, y al que debemos darle cuerda para que siga andan~ do, no se detendría si no se le hubiera dado cuerda en un principio. En resumidas cuentas, el universo tuvo un princi~ pio. Y todo lo que haya tenido principio, requiere de alguien que le haya dado origen. Por lo tanto, el universo tuvo alguien que le dio origen: Dios. Algunos han especulado con que el universo se retroali~ menta o recupera automáticamente. Pero esta posición no es más que mera especulación sin ninguna evidencia empírica que la sustente. De hecho, es contraria a la segunda ley de Termodinámica por cuanto aun si el universo pudiera recu~ perar su estado inicial, como un balón que rebota, gradual~ mente perdería fuerza. No hay sencillamente ninguna obser~ vación que pruebe que el universo se retroalimenta automá~ ticamente. Incluso los astrónomos agnósticos, como Robert Jastrow, han señalado: «Una vez que el hidrógeno de la estre~ lla se ha consumido y convertido en elementos más pesados, nunca puede ser restaurado a su estado original». Por lo tanto, «minuto a minuto, y año tras año, a medida que las estrellas consumen el hidrógeno, las reservas de este elemen~ to disminuyen»2. Si la cantidad total de energía permanece constante pero la cantidad utilizable en el universo disminuye, nunca hubo una cantidad infinita, porque una cantidad así nunca dismi~ nuiría. Esto implica que el universo no podría haber existido eternamente en el pasado. Debió tener un principio. O, para expresarlo de otra manera, según la segunda ley de Termodinámica, dado que aumenta el desorden en el univer~ so, este no puede ser eterno. De lo contrario, el desorden ya sería completo, lo cual no es el caso. Por lo tanto, debió haber tenido un principio; uno extremadamente ordenado. Un segundo argumento para probar que el universo tuvo un principio, y por lo tanto que hay alguien que le dio ori~ gen, lo aporta la filosofía. Plantea que no podría haber exis~ tido un número infinito de momentos antes de hoy; de lo contrario, hoy nunca hubiera llegado a ser (cuando efectiva~ mente lo es). Esto se debe a que, por definición, el infinito no se puede atravesar: no tiene fin (ni principio). Pero como los momentos anteriores a hoy han sido atravesados, porque así hemos llegado al día de hoy, debe concluirse que solo puede haber existido un número finito (limitado) de momentos anteriores a hoy. O sea, el tiempo tuvo un princi~ pio. Pero si el universo de tiempo y espacio tuvo un princi~ pio, su existencia debió obedecer a una causa. Esta causa de todo lo que existe se llama Dios. ¡Dios existe!

PREGUNTAS DIFíCILES ACERCA DE DIOS 29 Incluso el gran escéptico, David Hume, aceptaba las dos premisas de esta argumentación a favor de Dios. Es más, nunca negó que la existencia de las cosas se debiera a una causa. Escribió: «Nunca afirmé una proposición tan absurda como que algo pudiera surgir sin una causa que le diera ori, gen»3. También dijo que era absurdo creer que había un número infinito de momentos: «El mundo temporal tuvo un principio. Un número infinito de partes de tiempo real, que se suceden y agotan unas tras otras, es una contradicción tan evidente que ningún hombre, cabría uno pensar, cuyo juicio no está corrompido, en vez de ser mejor debido a la ciencia, podría admitir» 4. Ahora bien, si ambas premisas son verdade, ras, debemos concluir que debió haber un Creador del uni, verso temporal y espacial que llamamos cosmos. Por lo tanto, Dios existe. ¿CÓMO PUDO DIOS CREAR ALGO DE LA NADA? Si Dios y absolutamente nada más existía antes de la cre, ación del mundo, el universo llegó a existir a partir de la nada. Pero, ¿acaso no es absurdo decir que algo se originó de la nada? Es absurdo decir que la nada puede ser causa de algo, porque la nada no existe y no tiene poder para hacer nada. No obstante, no es absurdo decir que alguien (por ejemplo, Dios) hizo que el universo existiera a partir de la no existen' cia. La nada no puede crear algo, pero alguien, que solo es Dios, puede crear algo a partir de la nada. De hecho, si el universo tuvo un principio (como demos, tramos anteriormente), entonces hubo un tiempo en que el universo no existía y luego existió, después de que Dios lo creara. Esto es lo que significa la creación «de la nada~~ (en latín, ex nihilo). No significa que Dios tomara un «puñado de nada» e hiciera algo, como si la «nada» fuera algo a partir de lo que se pudiera hacer el mundo. Lo único que había era Dios y nada más. Dios hizo que existiera algo que hasta ese momento no había existido. Dicho de otra manera, la creación «de la nada» simple, mente significa que Dios no creó algo a partir de algo que ya existía junto con él, como sostienen ciertas formas de dualis, mo que suponen la existencia de dos entidades esenciales eternas. Esto sería propiamente dicho creación ex materia: la creación a partir de un material preexistente ajeno a Dios. Era la posición sostenida por el filósofo griego Platón. Tampoco creó Dios el mundo a partir de sí mismo (ex Deo). Es decir, no tomó una parte de su ser para dar origen al mundo a partir de eso. En realidad, el Dios cristiano ortodoxo no tiene partes. Él es un todo íntegro que es absolutamente Uno. Por lo tanto, no había manera de que Dios pudiera tomar una parte de sí para hacer el mundo. Dios es Infinito y el mundo es finito. No se puede producir un infinito a partir de ninguna cantidad de partes finitas, ya que sea cual fuera la cantidad de partes o piezas que se tuvieran, siempre cabría la posibilidad de agregar una más. Pero tampoco puede haber más de un infinito. Por lo tanto, ninguna cantidad de partes podrían igualar un infinito. Por lo tanto, Dios no podría haber creado al mundo de una parte de sí (por ejemplo, ex materia). El mundo provino de Dios pero no es de Dios. Él fue su causa pero no su sustancia. Dio origen a la existencia del mundo, por él, pero no está hecho con partes de él, no es de él en ese sentido. Sin embargo, si el mundo no fue creado a partir de Dios (ex Deo) ni a partir de ninguna otra cosa (ex materia) co,existente con él, el mundo debió haber sido cre, . ado de la nada (ex nihilo). No hay otra alter'uativa. Dios creó una cosa que antes de que la creara no existía, ni en él ni en ninguna otra parte. El único lugar en que el mundo «existía» antes de que Dios lo creara era como una idea en su mente. Así como un

PREGUNTAS DIFíCILES ACERCA DE DIOS 29<br />

Incluso el gran escéptico, David Hume, aceptaba las dos<br />

premisas <strong>de</strong> esta argumentación a favor <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>. Es más,<br />

nunca negó que la existencia <strong>de</strong> las cosas se <strong>de</strong>biera a una<br />

causa. Escribió: «Nunca afirmé una proposición tan absurda<br />

como que algo pudiera surgir sin una causa que le diera ori,<br />

gen»3. También dijo que era absurdo creer que había un<br />

número infinito <strong>de</strong> momentos: «El mundo temporal tuvo un<br />

principio. Un número infinito <strong>de</strong> partes <strong>de</strong> tiempo real, que<br />

se suce<strong>de</strong>n y agotan unas tras otras, es una contradicción tan<br />

evi<strong>de</strong>nte que ningún hombre, cabría uno pensar, cuyo juicio<br />

no está corrompido, en vez <strong>de</strong> ser mejor <strong>de</strong>bido a la ciencia,<br />

podría admitir» 4. Ahora bien, si ambas premisas son verda<strong>de</strong>,<br />

ras, <strong>de</strong>bemos concluir que <strong>de</strong>bió haber un Creador <strong>de</strong>l uni,<br />

verso temporal y espacial que llamamos cosmos. Por lo tanto,<br />

<strong>Dios</strong> existe.<br />

¿CÓMO PUDO DIOS CREAR ALGO DE LA NADA?<br />

Si <strong>Dios</strong> y absolutamente nada más existía antes <strong>de</strong> la cre,<br />

ación <strong>de</strong>l mundo, el universo llegó a existir a partir <strong>de</strong> la<br />

nada. Pero, ¿acaso no es absurdo <strong>de</strong>cir que algo se originó <strong>de</strong><br />

la nada? Es absurdo <strong>de</strong>cir que la nada pue<strong>de</strong> ser causa <strong>de</strong> algo,<br />

porque la nada no existe y no tiene po<strong>de</strong>r para hacer nada.<br />

No obstante, no es absurdo <strong>de</strong>cir que alguien (por ejemplo,<br />

<strong>Dios</strong>) hizo que el universo existiera a partir <strong>de</strong> la no existen'<br />

cia. La nada no pue<strong>de</strong> crear algo, pero alguien, que solo es<br />

<strong>Dios</strong>, pue<strong>de</strong> crear algo a partir <strong>de</strong> la nada.<br />

De hecho, si el universo tuvo un principio (como <strong>de</strong>mos,<br />

tramos anteriormente), entonces hubo un tiempo en que el<br />

universo no existía y luego existió, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> que <strong>Dios</strong> lo<br />

creara. Esto es lo que significa la creación «<strong>de</strong> la nada~~ (en<br />

latín, ex nihilo). No significa que <strong>Dios</strong> tomara un «puñado <strong>de</strong><br />

nada» e hiciera algo, como si la «nada» fuera algo a partir <strong>de</strong><br />

lo que se pudiera hacer el mundo. Lo único que había era<br />

<strong>Dios</strong> y nada más. <strong>Dios</strong> hizo que existiera algo que hasta ese<br />

momento no había existido.<br />

Dicho <strong>de</strong> otra manera, la creación «<strong>de</strong> la nada» simple,<br />

mente significa que <strong>Dios</strong> no creó algo a partir <strong>de</strong> algo que ya<br />

existía junto con él, como sostienen ciertas formas <strong>de</strong> dualis,<br />

mo que suponen la existencia <strong>de</strong> dos entida<strong>de</strong>s esenciales<br />

eternas. Esto sería propiamente dicho creación ex materia: la<br />

creación a partir <strong>de</strong> un material preexistente ajeno a <strong>Dios</strong>.<br />

Era la posición sostenida por el filósofo griego Platón.<br />

Tampoco creó <strong>Dios</strong> el mundo a partir <strong>de</strong> sí mismo (ex Deo).<br />

Es <strong>de</strong>cir, no tomó una parte <strong>de</strong> su ser para dar origen al mundo<br />

a partir <strong>de</strong> eso. En realidad, el <strong>Dios</strong> cristiano ortodoxo no tiene<br />

partes. Él es un todo íntegro que es absolutamente Uno. Por lo<br />

tanto, no había manera <strong>de</strong> que <strong>Dios</strong> pudiera tomar una parte <strong>de</strong><br />

sí para hacer el mundo. <strong>Dios</strong> es Infinito y el mundo es finito.<br />

No se pue<strong>de</strong> producir un infinito a partir <strong>de</strong> ninguna cantidad<br />

<strong>de</strong> partes finitas, ya que sea cual fuera la cantidad <strong>de</strong> partes o<br />

piezas que se tuvieran, siempre cabría la posibilidad <strong>de</strong> agregar<br />

una más. Pero tampoco pue<strong>de</strong> haber más <strong>de</strong> un infinito. Por lo<br />

tanto, ninguna cantidad <strong>de</strong> partes podrían igualar un infinito.<br />

Por lo tanto, <strong>Dios</strong> no podría haber creado al mundo <strong>de</strong> una<br />

parte <strong>de</strong> sí (por ejemplo, ex materia).<br />

El mundo provino <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> pero no es <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>. Él fue su<br />

causa pero no su sustancia. Dio origen a la existencia <strong>de</strong>l<br />

mundo, por él, pero no está hecho con partes <strong>de</strong> él, no es <strong>de</strong><br />

él en ese sentido. Sin embargo, si el mundo no fue creado a<br />

partir <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> (ex Deo) ni a partir <strong>de</strong> ninguna otra cosa (ex<br />

materia) co,existente con él, el mundo <strong>de</strong>bió haber sido cre, .<br />

ado <strong>de</strong> la nada (ex nihilo). No hay otra alter'uativa. <strong>Dios</strong> creó<br />

una cosa que antes <strong>de</strong> que la creara no existía, ni en él ni en<br />

ninguna otra parte.<br />

El único lugar en que el mundo «existía» antes <strong>de</strong> que<br />

<strong>Dios</strong> lo creara era como una i<strong>de</strong>a en su mente. Así como un

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!