INFORME DE DDH ALERTA ARGENTINA - Maristella Svampa
INFORME DE DDH ALERTA ARGENTINA - Maristella Svampa INFORME DE DDH ALERTA ARGENTINA - Maristella Svampa
es igualmente severo, ya que unánimemente se asume que los grupos menos aventajados –los que no tienen el dinero suficiente como para comprar su acceso a los medios de comunicación pueden quedar sin alternativas expresivas de importancia si se les obstruye sistemáticamente el acceso a ciertos foros públicos. En tal sentido, los tribunales han sabido advertir que muchas restricciones de uso sobre los foros públicos, dirigidas –pretendidamente a “todos los grupos por igual,” tienden, en definitiva, a impactar de modo desigual sobre algunos de ellos, afectando especialmente a los grupos con menos recursos. La existencia de este consenso generalizado en torno a los principios que deben regular el uso de los foros públicos merece ser bienvenido, especialmente porque el mismo puede ayudarnos a pensar mejor un tema demasiado importante, y sobre el cual todavía hemos pensado demasiado poco. Nuestros jueces, en particular, deberían reflexionar sobre tales acuerdos, y explicarnos si existen razones públicas que justifican su acercamiento tan diferente sobre la materia. 2) Ambivalencias y complejidades de las organizaciones piqueteras Maristella Svampa * Junio de 2005 En varias oportunidades hemos afirmado que, en nuestro país, la mayor experiencia de resistencia al neoliberalismo nació en los márgenes, en los límites, en el extremo de la descolectivización masiva. En efecto, fueron los desocupados, aquellos que estaban fuera del sistema, los que desde el fondo de la descomposición social fueron gestando nuevas formas de lucha y autoorganización territorial. Sin embargo, una vez dicho esto, es necesario recordar que este proceso tiene como telón de fondo un importante pasado de integración social, * Extracto del capítulo 9 (pp.278286), de La sociedad excluyente. La Argentina bajo el signo del neoliberalismo, Buenos Aires, Taurus, 2005.
asociado a la vigencia de los derechos sociales. 46 Por ello mismo, la experiencia argentina termina por ser muy ambivalente, pues si bien es cierto que en la práctica nace en el extremo de una descolectivización acelerada, en los discursos recoge diferentes tradiciones y memorias, sobre todo la asociada a la tradición nacionalpopular, que alimenta la esperanza de volver a ser lo que se era, a saber, un “pueblo trabajador”. Así, pese a que mucho se ha dicho sobre la naturaleza del nuevo actor, la mayor parte de las categorías empleadas traicionan la complejidad del sujeto. En realidad, para comprender la realidad emergente del proceso social consumado en los 90 es necesario abandonar las viejas categorías sociopolíticas (así como las visiones normativas) y partir de una lectura que privilegie una doble mirada, esto es, que tenga en cuenta tanto la conformación de las bases sociales como la dinámica organizativa interna. Ni pueblo o clase trabajadora como antaño, tampoco ejército industrial de reserva, ni nuevo lumpemproletariado, las bases sociales que componen las organizaciones piqueteras presentan un carácter multiforme y heterogéneo, que suma y yuxtapone nueva y vieja informalidad con tradición obrera y militantismo político; rabia juvenil y consumista con talante antirrepresivo y anticapitalista, protagonismo femenino con trabajo comunitario. En suma, vistas “desde abajo”, las organizaciones piqueteras son muy ambivalentes, con diferentes inflexiones políticas, que van de la demanda de reintegración al sistema, a la afirmación de una radicalidad anticapitalista. A la vez, es un fenómeno fuertemente plebeyo, proclive a la acción directa, que apunta a la afirmación de lo popular, en cuanto ser negado, excluido y sacrificado en aras del modelo neoliberal. 46 Dicho aspecto es muy relevante, independientemente de las interpretaciones que se hagan de él y pese a que muy probablemente gran parte de los desocupados nunca hayan sido beneficiarios directos del modelo nacionalpopular. Esta defensa y evocación de los derechos conculcados, presente ya en el origen –pese a qe tienden a ser desdibujados por la política asistencial, ayuda a entender por qué los desocupados en nuestro país orientan sus reclamos hacia al Estado, en lugar de limitarse exclusivamente a desarrollar redes de reciprocidad e intercambio dentro del mundo popular.
- Page 72 and 73: seguir teniendo una relación de re
- Page 74 and 75: Contacto El Bolsón. 02944455409
- Page 76 and 77: Algunas empresas de medios se han b
- Page 78 and 79: Tolosa, quienes se suman a la perse
- Page 80 and 81: compañeros no hicieron constar, lo
- Page 82 and 83: habían ido en días distintos a re
- Page 84 and 85: testimonio del manejo arbitrario e
- Page 86 and 87: colección de gente marginal en var
- Page 88 and 89: 3) A partir del caso Roser, y como
- Page 90 and 91: custodiarlo en su debida forma. Por
- Page 92 and 93: Por último, el juez ordena: “…
- Page 94 and 95: detenciones a través del Código d
- Page 96 and 97: sólo nos limitaremos a señalar qu
- Page 98 and 99: cobró fuerza como una forma de den
- Page 100 and 101: talleres de industria no se han vue
- Page 102 and 103: lugares de detención de personas p
- Page 104 and 105: (in)seguridad ciudadana (Ferrajoli,
- Page 106 and 107: de manera flagrante los principios
- Page 108 and 109: detenciones como indicador de efica
- Page 110 and 111: exclusivamente un tipo de tratamien
- Page 112 and 113: trabajan a destajo, con contratos b
- Page 114 and 115: Un cóctel peligroso es ser pobre y
- Page 116 and 117: atropello a su persona, fue víctim
- Page 118 and 119: Un fallo ejemplificador El viernes
- Page 120 and 121: con el genuino desconocimiento de a
- Page 124 and 125: Por otro lado, más allá de los pl
- Page 126 and 127: En tercer lugar, en los últimos ti
- Page 128 and 129: político, respecto de 2002, esta c
- Page 130 and 131: vehiculiza una cierta lectura polí
- Page 132 and 133: Asamblea de Vecinos Autoconvocados
- Page 134 and 135: Desde el CAI no tenemos dudas, el g
- Page 136 and 137: A partir de nuestro andar, de nuest
- Page 138 and 139: · La confección de este Documento
- Page 140 and 141: · Las condiciones laborales de los
- Page 142 and 143: · Profundizar la articulación ent
- Page 144 and 145: 5) Documento consensuado por famili
- Page 146 and 147: Romina Tejerina nació en San Pedro
- Page 148 and 149: nacionales como internacionales, qu
- Page 150 and 151: Yo no soy un delincuente, soy un si
es igualmente severo, ya que unánimemente se asume que los grupos menos<br />
aventajados –los que no tienen el dinero suficiente como para comprar su acceso a<br />
los medios de comunicación pueden quedar sin alternativas expresivas de<br />
importancia si se les obstruye sistemáticamente el acceso a ciertos foros públicos.<br />
En tal sentido, los tribunales han sabido advertir que muchas restricciones de uso<br />
sobre los foros públicos, dirigidas –pretendidamente a “todos los grupos por<br />
igual,” tienden, en definitiva, a impactar de modo desigual sobre algunos de ellos,<br />
afectando especialmente a los grupos con menos recursos.<br />
La existencia de este consenso generalizado en torno a los principios que deben<br />
regular el uso de los foros públicos merece ser bienvenido, especialmente porque<br />
el mismo puede ayudarnos a pensar mejor un tema demasiado importante, y<br />
sobre el cual todavía hemos pensado demasiado poco. Nuestros jueces, en<br />
particular, deberían reflexionar sobre tales acuerdos, y explicarnos si existen<br />
razones públicas que justifican su acercamiento tan diferente sobre la materia.<br />
2) Ambivalencias y complejidades de las organizaciones piqueteras<br />
<strong>Maristella</strong> <strong>Svampa</strong> *<br />
Junio de 2005<br />
En varias oportunidades hemos afirmado que, en nuestro país, la mayor<br />
experiencia de resistencia al neoliberalismo nació en los márgenes, en los límites,<br />
en el extremo de la descolectivización masiva. En efecto, fueron los desocupados,<br />
aquellos que estaban fuera del sistema, los que desde el fondo de la<br />
descomposición social fueron gestando nuevas formas de lucha y autoorganización<br />
territorial. Sin embargo, una vez dicho esto, es necesario recordar que este<br />
proceso tiene como telón de fondo un importante pasado de integración social,<br />
*<br />
Extracto del capítulo 9 (pp.278286), de La sociedad excluyente. La Argentina bajo el signo del<br />
neoliberalismo, Buenos Aires, Taurus, 2005.