DE SEAT CAJA DE HERRAMIENTAS - Anglo American

5J.5 RESPUESTA AL VIH/SIDA, LA TUBERCULOSIS
Y LA MALARIA
La incidencia geográfica del VIH / SIDA, la tuberculosis y la
malaria suele superponerse e impacta de manera más negativa
en África (aunque actualmente, partes de Asia muestran signos
de incidencia de las tres enfermedades). La convergencia
de estas tres afecciones posee un efecto debilitador sobre
sistemas de salud ya sobrecargados, donde el manejo integrado
de enfermedades no es aún una norma.
Si se superponen las tres enfermedades, se recomienda un
control integrado. El Cuadro 5J.5 ilustra ejemplos de actividades
de colaboración, mientras que el Cuadro 5J.4 más arriba
demostraba un ejemplo de sociedad establecida para combatir
esta combinación de problemas.
Cuadro 5J.5 Ejemplos de actividades de
colaboración
• Establecimiento de un comité de coordinación y asignación de
fondos específicos para actividades relacionadas con la lucha del
VIH / SIDA, la tuberculosis y la malaria
• Desarrollo de un plan integrado que incluya la movilización
de recursos, el desarrollo y la capacitación de habilidades y la
movilización social y de comunicaciones, la participación de los
stakeholder y la investigación.
• La vigilancia de la prevalencia del VIH en pacientes con
tuberculosis y malaria para determinar la carga de VIH entre estos
pacientes (esto servirá para planificar los servicios).
• La capacitación sobre tuberculosis, VIH y malaria de los
prestadores médicos se debe realizar de manera conjunta.
Adaptado de la Orientación de buenas prácticas de ICMM sobre
VIH / SIDA, tuberculosis y malaria.
Además de las actividades cooperativas que se describen
en el Cuadro 5J.4, las siguientes secciones incluyen
recomendaciones para fortalecer la colaboración entre los
servicios de salud; de manera tal que, en última instancia, se
logre reducir la carga de las enfermedades.
Actividades recomendadas para combatir la
tuberculosis y el SIDA
1. Establecer un mecanismo de colaboración
••
Involucrar a las personas con tuberculosis y SIDA en
actividades de planificación, prestación y control en lo
que a VIH y tuberculosis se refiere; y
••
Fortalecer los servicios de laboratorio para garantizar
la calidad de los diagnósticos y la gestión de la
tuberculosis asociada con el SIDA, la tuberculosis
multifármacorresistente, la tuberculosis extremadamente
fármacorresistente , la tuberculosis infantil, el diagnóstico
y la evolución del VIH, y el control de los efectos
colaterales del tratamiento conjunto contra la tuberculosis
y el SIDA.
2. Disminuir la carga de la tuberculosis en personas
portadoras de VIH/SIDA
Las personas que viven con VIH pueden someterse regularmente
a pruebas de tuberculosis activa y pueden recibir
terapia preventiva contra la tuberculosis si esta enfermedad
no está en la fase activa. Además, se pueden implementar los
procedimientos adecuados de control de infecciones (1) .
3. Disminuir la carga de VIH en pacientes con
tuberculosis
En entornos de alta prevalencia de VIH, se puede ofrecer
asesoramientos y análisis de VIH a todos los pacientes con
diagnóstico de tuberculosis, con una opción de exclusión
para quienes prefieran no hacerse la prueba. (La prueba con
opción de exclusión significa que se recibe un asesoramiento
limitado antes de hacerse el análisis y, por ende, se reduce
el tiempo necesario para hacerse el análisis y se mejora la
eficiencia y la cobertura de la implementación generalizada de
las pruebas). Los pacientes de tuberculosis también pueden
recibir métodos de prevención de VIH, tales como condones y
tratamiento de las infecciones de transmisión sexual, además
de otros elementos de un programa integral de prevención,
tratamiento y cuidados relacionado con el VIH.
Actividades recomendadas para combatir la
malaria y el SIDA
1. Establecer un mecanismo de colaboración
Consulte el Cuadro 5J.5.
2. Disminuir la carga de la malaria para las personas
con VIH
En las áreas donde la malaria es endémica y prevalece el VIH,
las personas portadoras de VIH deben recibir capacitación
sobre la importancia de las medidas para prevenir la malaria.
Los tratamientos efectivos contra la malaria reducen el
impacto de esta enfermedad sobre la anemia vinculada al VIH
y sobre las cargas virales de VIH, con el consecuente avance
y transmisión de dicha enfermedad. A todas las personas
infectadas con VIH se les pueden ofrecer mosquiteros para
cama tratados con insecticida además de otras medidas
preventivas que se describen en la sección 6 del Manual de
orientación de buenas prácticas de ICMM.
3. Disminuir la carga del VIH en pacientes con
malaria Los pacientes con malaria pueden
someterse a análisis de VIH de rutina.
Los pacientes de malaria infectados con VIH pueden
inscribirse en un programa de atención y tratamiento contra
el VIH / SIDA una vez que hayan finalizado el tratamiento
contra la malaria. La anemia asociada con la malaria suele
requerir transfusiones de sangre. En muchos países en
desarrollo, es posible que la sangre no reciba el análisis
adecuado para rastrear la presencia de VIH o malaria, lo que
contribuye así a la diseminación de ambas dolencias. Si se
garantiza un suministro de sangre sano, se puede reducir la
transmisión de VIH a los pacientes con malaria a través de
las transfusiones de sangre. En las áreas donde el control
de la malaria incluye la desinfección de hogares, se puede
utilizar este contacto para educar a los habitantes sobre la
prevención del VIH y la malaria y para promover u ofrecer
análisis de VIH.
4. Realizar exámenes a los trabajadores con fiebre
La fiebre es una manifestación común en pacientes tanto
con VIH como con malaria (y de tuberculosis también).
Los trabajadores con fiebre deben someterse a análisis de
malaria y VIH para garantizar un correcto manejo de ambas.
(1) Orientación de buenas prácticas de ICMM sobre VIH/SIDA, tuberculosis y malaria.
232 Herramienta 5J: apoyo a la salud comunitaria