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Nº 34, Septiembre 2011 - Centro de Estudios Garrigues

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COLABORACIONES<br />

Antonio Chicote Carranco<br />

Departamento tributario en De Andrés y Artiñano Abogados. Antiguo Alumno Máster en Tributación 2003-2004<br />

El IVA irrumpe en el<br />

<strong>de</strong>partamento <strong>de</strong> RR. HH.<br />

Con su contestación a la consulta<br />

vinculante número V0745-<br />

11, la Dirección General <strong>de</strong><br />

Tributos (DGT) nos ha brindado un<br />

nuevo motivo para la incertidumbre,<br />

cambiando su criterio respecto <strong>de</strong>l tratamiento<br />

en el Impuesto sobre el Valor<br />

Añadido <strong>de</strong> <strong>de</strong>terminadas retribuciones<br />

en especie.<br />

Este cambio supone un giro radical<br />

en la tributación asociada a <strong>de</strong>terminados<br />

esquemas <strong>de</strong> retribuciones<br />

flexible <strong>de</strong> las empresas a favor <strong>de</strong><br />

sus empleados. Según el nuevo criterio,<br />

<strong>de</strong>terminadas retribuciones en<br />

especie quedarían sujetas a IVA, por<br />

lo que (salvo que se trate <strong>de</strong> operaciones<br />

exentas por su propia naturaleza)<br />

la empresa <strong>de</strong>bería repercutir el impuesto<br />

al trabajador por la retribución<br />

pactada.<br />

Hasta la fecha, parecía pacífico<br />

que las retribuciones en especie <strong>de</strong> los<br />

trabajadores quedaban fuera <strong>de</strong>l ámbito<br />

<strong>de</strong> aplicación <strong>de</strong>l IVA. Del mismo<br />

modo, en la medida que el empresario<br />

actuaba como consumidor final, el IVA<br />

soportado en la adquisición <strong>de</strong> bienes<br />

o servicios, para cesión a sus empleados,<br />

no se consi<strong>de</strong>raba <strong>de</strong>ducible<br />

(salvo en los vehículos en que resultaba<br />

<strong>de</strong> aplicación la presunción legal <strong>de</strong><br />

afectación <strong>de</strong>l 50 %).<br />

El cambio en el tratamiento tiene<br />

sus antece<strong>de</strong>ntes en una sentencia <strong>de</strong>l<br />

Tribunal <strong>de</strong> Justicia <strong>de</strong> la Unión Europea<br />

<strong>de</strong> fecha 29 <strong>de</strong> julio <strong>de</strong>l 2010, Astra<br />

Zeneka, asunto C-40/09. Interpretando<br />

esta sentencia, la DGT llega a la<br />

conclusión que en aquellos supuestos<br />

en los que la retribución en especie implique<br />

una novación contractual y un<br />

cambio en la composición <strong>de</strong>l sistema<br />

retributivo <strong>de</strong>l empleado, es <strong>de</strong>cir, se<br />

sustituyan retribuciones dinerarias por<br />

no dinerarias, la empresa estaría prestando<br />

un servicio <strong>de</strong> carácter oneroso<br />

(a cambio <strong>de</strong> una contraprestación<br />

cuantificable) y, en consecuencia, <strong>de</strong>bería<br />

repercutir IVA. Paralelamente, y al<br />

trasladarse en estos casos la figura <strong>de</strong><br />

consumidor final al empleado, la empresa<br />

tendría <strong>de</strong>recho, en función <strong>de</strong><br />

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