RPPM - N 1 - Año 1.pdf
Revista Peruana del Pensamiento Marxista N°1
Revista Peruana del Pensamiento Marxista N°1
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Revista Peruana del Pensamiento Marxista<br />
dorados. El desarrollo de las fuerzas productivas<br />
que fue inadecuadamente denominada "revolución<br />
verde", se dio de modo paralelo a la acelerada<br />
urbanización del mundo, que adquirió niveles<br />
monstruosos en países emergentes o menos<br />
desarrollados como México, Brasil, India, etc. El<br />
avance de las fuerzas productivas agropecuarias<br />
sirvió para proveer de alimentos a la creciente<br />
población urbana.<br />
11. Los años dorados pusieron en el primer<br />
plano de la escena política a los movimientos<br />
estudiantiles universitarios a partir del auge<br />
mundial de las profesiones. Antes de la segunda<br />
guerra mundial, los países más cultos y desarrollados<br />
tenían poblaciones universitarias poco<br />
numerosas. Después de ella se dio inexorablemente<br />
la masificación de la educación universitaria<br />
de modo que en los años 80 del siglo XX, ya<br />
los universitarios se contaban por millones.<br />
Con este auge se generó un inédito protagonismo<br />
político y social de los estudiantes universitarios<br />
y del movimiento juvenil. Durante la década del<br />
60 y comienzos de los años 70, una oleada de<br />
rebeldía juvenil conmocionó sociedades de<br />
Europa, Norteamérica, Asia y el Tercer Mundo.<br />
En determinados periodos su importancia<br />
política superó a la de los trabajadores asalariados,<br />
a los proletarios, que vivían contentos con el<br />
"Estado del bienestar" capitalista. Así, el<br />
estallido estudiantil de mayo del 68 en Francia<br />
puso en evidencia el conservadurismo obrero.<br />
En EE.UU se tomaron los campus universitarios<br />
en rechazo especialmente a la intervención<br />
yanqui en Vietnam. En los países dictatoriales<br />
eran el único colectivo capaz de hacer movilizaciones<br />
de protesta y en países coloniales o del<br />
tercer mundo alimentaron los movimientos de<br />
liberación y guerrilleros. En la URSS, sin<br />
embargo, los estudiantes universitarios nunca<br />
formaron un movimiento contestatario ni<br />
influyeron en el derrumbe del "socialismo<br />
realmente existente". En China, se dio el movimiento<br />
de la Revolución Cultural protagonizado<br />
por jóvenes "guardias rojos" que pretendía<br />
prevenir la restauración capitalista, barrer los<br />
rezagos feudales y consolidar el camino socialista.<br />
Este movimiento es calificado de aberrante<br />
por Hobsbawm.<br />
Mientras tanto, nunca se dio la revolución<br />
proletaria en los países capitalistas más avanzados<br />
donde la clase obrera era numerosa y tenía<br />
mayor nivel cultural y de organización. Este<br />
importante contingente nunca quiso la revolución<br />
y se aburguesó dentro del "Estado del<br />
bienestar". Su decadencia "no fue una crisis de<br />
clase sino de conciencia" (cf. 307-312).<br />
12. Después de la segunda guerra mundial se<br />
acrecentó la presencia de la mujer en el desenvolvimiento<br />
social de los países capitalistas más<br />
avanzados, y en todo el mundo. Aumentó la clase<br />
obrera femenina, incluso de mujeres casadas, y<br />
se acrecentó el número de universitarias y<br />
profesionales mujeres. Su protagonismo en la<br />
política y en cargos públicos también creció y el<br />
feminismo tuvo una nueva etapa de auge. "La<br />
entrada masiva de mujeres casadas (…) en el<br />
mercado laboral y la extraordinaria expansión<br />
de la enseñanza superior configuraron el telón de<br />
fondo, por lo menos en los países desarrollados<br />
occidentales típicos, del impresionante renacer<br />
de los movimientos feministas a partir de los<br />
años sesenta" (p. 314). Por razones históricas<br />
conocidas, en el mundo socialista la cuestión era<br />
distinta. Dice Hobsbawm: "Al contrario de las<br />
feministas occidentales, la mayoría de las<br />
mujeres casadas soviéticas, acostumbradas<br />
desde hace tiempo a una vida de asalariadas,<br />
soñaba con el lujo de quedarse en casa y tener un<br />
solo trabajo" (p. 318).<br />
13. La bonanza económica de los años dorados<br />
posibilitó la autosuficiencia económica de<br />
muchos y el desarrollo de las "clases medias".<br />
Esto exacerbó el individualismo burgués a<br />
niveles inéditos, un egocentrismo abrumador y<br />
una sobrevaloración del libre albedrío. A criterio<br />
de Hobsbawm, estas exacerbaciones provocaron<br />
una revolución cultural en todo el mundo<br />
occidental y se proyectaron a los grupos juveniles<br />
del tercer mundo. Así, "la revolución cultural<br />
de fines del siglo XX debe (…) entenderse como<br />
el triunfo del individuo sobre la sociedad o,<br />
mejor, como la ruptura de los hilos que hasta<br />
entonces habían imbricado a los individuos en el<br />
tejido social" (p. 336). Dentro de este creciente y<br />
difundido individualismo, "la cultura juvenil se<br />
convirtió en la matriz de la revolución cultural en<br />
36<br />
Lecturas