06.10.2014 Views

Antecedentes legales y parlamentarios - Ministerio de Defensa

Antecedentes legales y parlamentarios - Ministerio de Defensa

Antecedentes legales y parlamentarios - Ministerio de Defensa

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

19 <strong>de</strong> noviembre <strong>de</strong> 1975<br />

188<br />

¿Cómo se hace en la Argentina para ser nacionalista auténtico? Todos los sectores tenemos<br />

que realizar un esfuerzo para lograrlo, asumiendo nuestras responsabilida<strong>de</strong>s y nuestras culpas,<br />

sin caer en la etiqueta que preten<strong>de</strong> ser <strong>de</strong>scalificante. Por eso, para terminar, queremos <strong>de</strong>finir<br />

dos cuestiones. La primera, que si el régimen <strong>de</strong>mocrático significa la posibilidad cierta, abierta<br />

a la discusión <strong>de</strong> todas las i<strong>de</strong>as, si el régimen <strong>de</strong>mocrático funciona en plenitud, lo que significa<br />

admitir la discusión plenamente, porque no pue<strong>de</strong> haber anticuerpos que <strong>de</strong>sconozcan la substancia<br />

<strong>de</strong>l cuerpo que rechazan, porque <strong>de</strong>be conocerse todo, para saber qué somos.<br />

Si la <strong>de</strong>mocracia es la amplia difusión, sobre esa base se va a asentar el fortalecimiento <strong>de</strong> la<br />

sociedad argentina, que vendrá por sí solo y no por el <strong>de</strong>sconocimiento, la prohibición <strong>de</strong> libros<br />

o el temor. Habrá adquirido por sí misma la madurez política para encontrar su propio <strong>de</strong>stino<br />

frente a todas las i<strong>de</strong>ologías extranjeras. Si eso es la <strong>de</strong>mocracia, si así funciona y <strong>de</strong>be funcionar,<br />

no po<strong>de</strong>mos hablar entonces <strong>de</strong> infiltrados ni <strong>de</strong> agentes. Si algún día en el país, quienes<br />

sostienen i<strong>de</strong>as que nosotros no compartimos son mayoría, <strong>de</strong> ellos será el gobierno, y los que<br />

estaremos equivocados seremos nosotros. Esa es la única forma <strong>de</strong> enten<strong>de</strong>r auténticamente la<br />

<strong>de</strong>mocracia. Lo otro es usar la <strong>de</strong>mocracia para conseguir leyes en <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong> intereses particulares<br />

<strong>de</strong> algunos que nos acusan a nosotros y a otros sectores <strong>de</strong> anti<strong>de</strong>mocráticos, porque estamos<br />

<strong>de</strong>nunciando esos intereses, pero no porque no creamos en el sistema <strong>de</strong>mocrático en serio y<br />

aplicado integralmente.<br />

Todo cambio que se proponga <strong>de</strong>be tener las puertas abiertas, y en esto no hay obstáculo ni<br />

aún en la Constitución, porque el régimen <strong>de</strong>mocrático permite todo eso, aunque sea a través <strong>de</strong><br />

la reforma constitucional.<br />

Des<strong>de</strong> ya, señor presi<strong>de</strong>nte, que frente a lo que es un gobierno <strong>de</strong> facto lo dijimos, y lo repetimos<br />

ahora, y lo <strong>de</strong>cimos por lo que pueda ocurrir en la vida <strong>de</strong>l país, el gobierno <strong>de</strong> facto es un<br />

gobierno <strong>de</strong> fuerza que no tiene razones morales ni jurídicas que lo sustenten y no se diferencia<br />

<strong>de</strong> quienes lo atacan, incluso por la fuerza, ya que llegó a ser gobierno por ser más fuerte que el<br />

otro. ¡No consi<strong>de</strong>remos eso porque no es ni la Constitución ni la ley!<br />

En segundo lugar, si todo esto que estoy diciendo, señor presi<strong>de</strong>nte, no fuera suficiente, me<br />

permitiría hacer dos menciones <strong>de</strong> algo que voy a leer y que se refiere, muy someramente, al<br />

pensamiento <strong>de</strong> la Iglesia sobre esta materia e, inclusive, sobre la subversión. Concretamente,<br />

y para no alargar mi exposición, voy a leer algunas conclusiones <strong>de</strong>l libro La Iglesia en la actual<br />

transformación en América latina a la luz <strong>de</strong>l Concilio. Segunda Conferencia <strong>de</strong>l Episcopado<br />

Latinoamericano, realizada en la ciudad <strong>de</strong> Me<strong>de</strong>llín, Bogotá, <strong>de</strong>l 26 <strong>de</strong> agosto al 6 <strong>de</strong> septiembre<br />

<strong>de</strong> 1968. Dice lo siguiente frente al panorama <strong>de</strong> América latina, en su página 66: “El fenómeno<br />

universal <strong>de</strong> las expectativas crecientes asume en América latina una dimensión particularmente<br />

agresiva. La razón es obvia: las <strong>de</strong>sigualda<strong>de</strong>s excesivas impi<strong>de</strong>n sistemáticamente la satisfacción <strong>de</strong><br />

las legítimas aspiraciones <strong>de</strong> los sectores postergados. Se generan así frustraciones crecientes.”<br />

“Semejante estado <strong>de</strong> ánimo se constata también en aquellas clases medias que, ante graves crisis,<br />

entran en un proceso <strong>de</strong> <strong>de</strong>sintegración y proletarización.”<br />

Y sigue diciendo: “Sin excluir una eventual voluntad <strong>de</strong> opresión, se observa más frecuentemente<br />

una insensibilidad lamentable <strong>de</strong> los sectores más favorecidos frente a la miseria <strong>de</strong> los sectores marginados.<br />

De ahí las palabras <strong>de</strong>l Papa a los dirigentes: ‘que vuestro oído y vuestro corazón sean sensibles<br />

a las voces <strong>de</strong> quienes pi<strong>de</strong>n pan, interés, justicia.’”<br />

“No es raro comprobar —dice— que estos grupos o sectores, con excepción <strong>de</strong> algunas minorías,<br />

califiquen <strong>de</strong> acción subversiva todo intento <strong>de</strong> cambiar un sistema social que favorece la permanencia<br />

<strong>de</strong> sus privilegios.” Y más a<strong>de</strong>lante señala: “Como una consecuencia normal <strong>de</strong> las actitu<strong>de</strong>s<br />

mencionadas, algunos miembros <strong>de</strong> los sectores dominantes recurren, a veces, al uso <strong>de</strong> la fuerza para<br />

reprimir drásticamente todo intento <strong>de</strong> reacción. Les será muy fácil encontrar aparentes justificaciones<br />

i<strong>de</strong>ológicas (verbigracia, anticomunismo) o prácticas (conservación <strong>de</strong>l “or<strong>de</strong>n”) para cohonestar<br />

este proce<strong>de</strong>r”. Y aña<strong>de</strong>: “Todo lo prece<strong>de</strong>nte resulta cada vez más intolerable por la progresiva

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!