Popper Karl - La Logica de la Investigacion Cientifica
Popper Karl - La Logica de la Investigacion Cientifica
Popper Karl - La Logica de la Investigacion Cientifica
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
132 ha lógica <strong>de</strong> <strong>la</strong> investigación científica<br />
no he sido yo quien ha introducido semejante término, y soy perfectamente<br />
consciente <strong>de</strong> sus <strong>de</strong>sventajas; lo único que afirmo es que el<br />
concepto <strong>de</strong> sencillez que voy a ac<strong>la</strong>rar ayuda a contestar precisamente<br />
aquel<strong>la</strong>s cuestiones que —como <strong>la</strong>s citas hechas muestran— los filósofos<br />
<strong>de</strong> <strong>la</strong> ciencia han p<strong>la</strong>nteado frecuentemente en re<strong>la</strong>ción con su<br />
«problema <strong>de</strong> <strong>la</strong> sencillez».<br />
43. SENCILLEZ T GRADO DE FALSABILIDAD<br />
Todas <strong>la</strong>s cuestiones epistemológicas que surgen alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong>l concepto<br />
<strong>de</strong> sencillez pue<strong>de</strong>n contestarse si igua<strong>la</strong>mos este concepto con<br />
el <strong>de</strong> grado <strong>de</strong> falsabilidad. Como es fácil que este aserto encuentre<br />
una actitud <strong>de</strong> oposición *^, trataré primero <strong>de</strong> hacerlo más aceptable<br />
intuitivamente.<br />
Ha sido muy satisfactorio encontrar por lo menos un epistemólogo —William<br />
Kneale— que ha aceptado esta teoría <strong>de</strong> <strong>la</strong> sencillez (incluidas <strong>la</strong>s i<strong>de</strong>as <strong>de</strong>l apartado<br />
40). Este autor escribe en su Ubro Probability and Induction, 1949, págs. 229<br />
y sig.: «... es fácil ver que <strong>la</strong> hipótesis más sencil<strong>la</strong> en este sentido es también <strong>la</strong> que<br />
po<strong>de</strong>mos esperar eUminar más rápidamente en caso <strong>de</strong> que sea falsa... En resumen,<br />
<strong>la</strong> norma <strong>de</strong> asumir siempre <strong>la</strong> hipótesis más sencil<strong>la</strong> que esté <strong>de</strong> acuerdo con los<br />
hechos conocidos es <strong>la</strong> que más rápidamente nos permitirá <strong>de</strong>sembarazarnos <strong>de</strong> hipótesis<br />
falsas»; y en una nota a pie <strong>de</strong> página se refiere a <strong>la</strong> pág. 116 <strong>de</strong>l libro <strong>de</strong> Weyl,<br />
así como al mío. Pero ni en esta página —<strong>de</strong> <strong>la</strong> que he citado <strong>la</strong>s frases pertinentes<br />
a esta cuestión en el texto— ni en ninguna otra parte <strong>de</strong>l espléndido libro <strong>de</strong> Weyl<br />
(ni en ningún otro) he sido capaz <strong>de</strong> encontrar el menor rastro <strong>de</strong> <strong>la</strong> tesis <strong>de</strong> que <strong>la</strong><br />
sencillez <strong>de</strong> una teoría se hal<strong>la</strong> en conexión con su falsabilidad —es <strong>de</strong>cir, con <strong>la</strong><br />
facilidad <strong>de</strong> su eliminación—. Y en caso <strong>de</strong> que Weyl (o cualquier otra persona<br />
llegada a mi noticia) se hubiera anticipado a mi teoría, no habría escrito yo (como lo<br />
hice hacia el final <strong>de</strong>l apartado anterior) que Weyl «no dice qué ventajas lógicas<br />
o epistemológicas se supone que tiene <strong>la</strong> ley más sencil<strong>la</strong>».<br />
Los hechos son los siguientes: en su profunda discusión <strong>de</strong>l problema (que aquí<br />
he citado en el apartado 42, texto correspondiente a <strong>la</strong> nota 7), Weyl menciona, en<br />
primer lugar, <strong>la</strong> opinión intuitiva <strong>de</strong> que una curva sencil<strong>la</strong> —digamos, una línea<br />
recta— ofrece ventajas sobre otra más complicada, porque podría consi<strong>de</strong>rarse un acci<strong>de</strong>nte<br />
muy improbable que todas <strong>la</strong>s observaciones se ajustaran a una curva tan<br />
sencil<strong>la</strong>; pero, en lugar <strong>de</strong> seguir esta opinión intuitiva (que, a mi enten<strong>de</strong>r, le hubiese<br />
llevado a advertir que una teoría más sencil<strong>la</strong> es más contrastable), Weyl <strong>la</strong> rechaza<br />
por no resistir a una crítica racional: seña<strong>la</strong> que lo mismo podría <strong>de</strong>cirse <strong>de</strong> cualquier<br />
curva dada, por complicada que sea (el argumento es enteramente correcto, pero<br />
<strong>de</strong>ja <strong>de</strong> ser válido si consi<strong>de</strong>ramos no ya los casos que verifican <strong>la</strong> ley, sino los<br />
posibles falsadores y su grado <strong>de</strong> composición). Weyl continúa luego discutiendo <strong>la</strong><br />
escasez <strong>de</strong> los parámetros como criterio <strong>de</strong> sencillez, sin poner en re<strong>la</strong>ción <strong>de</strong> ninguna<br />
forma este rasgo, ni con <strong>la</strong> opinión intuitiva que acababa <strong>de</strong> rechazar, ni con ningún<br />
concepto que, como el <strong>de</strong> contrastabiüdad o el <strong>de</strong> contenido, pudiese explicar nuestra<br />
preferencia epistemológica por <strong>la</strong>s teorías más sencil<strong>la</strong>s.<br />
<strong>La</strong> caracterización hecha por Weyl <strong>de</strong> <strong>la</strong> sencillez <strong>de</strong> una curva por su parvedad<br />
en parámetros había sido expuesta con anterioridad —<strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1921— por Harold Jeffreys<br />
y Dorothy Wrinch (Phil. Mag. 42, págs. 369 y sigs.). Pero si Weyl meramente<br />
no llegó a advertir lo que ahora es «fácil ver» (según Kneale), Jeffreys vio, en realidad,<br />
—y sigue viendo— justamente lo opuesto: atribuye a <strong>la</strong> ley más sencil<strong>la</strong> <strong>la</strong><br />
máxima probabilidad previa, en lugar <strong>de</strong> <strong>la</strong> máxima improbabilidad previa. (Así, pues,<br />
<strong>la</strong>s tesis <strong>de</strong> Jeffreys y <strong>de</strong> Kneale juntas pue<strong>de</strong>n ilustrar <strong>la</strong> observación <strong>de</strong> Schopenhauer<br />
<strong>de</strong> que <strong>la</strong> solución <strong>de</strong> un problema con frecuencia parece primero una paradoja<br />
y luego una perogrul<strong>la</strong>da). Me interesa añadir que posteriormente he <strong>de</strong>sarrol<strong>la</strong>do<br />
http://psikolibro.blogspot.com