Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
p o l o<br />
El Tortugas Country Club<br />
es sin duda uno de los<br />
clubes de campo con más<br />
solera de toda Argentina<br />
y probablemente uno<br />
de los más antiguos del<br />
mundo. Está situado en<br />
un entorno incomparable<br />
y privilegiado por su<br />
proximidad con respecto a la ciudad de Buenos<br />
Aires y por la belleza singular de sus paisajes.<br />
Pero Tortugas no es sólo un Country Club sino<br />
un lugar residencial de excelencia consagrado<br />
primordialmente al polo, la equitación, el golf<br />
y otros deportes y actividades que repercuten<br />
en la mejora física, la recreación, el disfrute del<br />
entorno y la vida al aire libre.<br />
Las personas que viven en Tortugas tienen<br />
un particular y diferenciado estilo de vida<br />
que trasciende más allá de los límites físicos<br />
del Country Club, contribuyendo al progreso,<br />
bienestar y convivencia de las comunidades circundantes<br />
de este pequeño paraíso argentino.<br />
Si bien es cierto que Tortugas podría definirse<br />
por su particular way of life, también podríamos<br />
afirmar sin temor a equivocarnos que es<br />
“un club de amigos para los amigos”, tal y como<br />
lo definió su fundador, Antonio Maura, y como<br />
nos los contó su actual presidente, Francisco<br />
Dorignac, con el que tuvimos el privilegio de<br />
entrevistarnos en persona.<br />
Las personas que viven<br />
en Tortugas tienen un<br />
particular y diferenciado<br />
estilo de vida<br />
El club Tortugas fue fundado en 1930 por el<br />
noble español Antonio Maura y Gamazo, hijo<br />
del renombrado político Antonio Maura y Montaner,<br />
quien presidió el Consejo de Ministros<br />
en cinco ocasiones así como la Real Academia<br />
de la Lengua. Antonio Maura hijo, nació en el<br />
madrileño Paseo de Recoletos y cursó ingeniería<br />
industrial y arquitectura en Barcelona,<br />
estudios que le aportaron tanto una visión<br />
empresarial como una sensibilidad artística<br />
que más adelante sabría volcar en la labor<br />
que desarrolló posteriormente en Argentina.<br />
El joven Maura, gracias a la intervención del<br />
Marqués de Comillas, probó suerte y fortuna en<br />
la Compañía General de Tabacos Santa Isabel,<br />
en Filipinas, donde fue ascendiendo poco a poco<br />
hasta ostentar el cargo de inspector general<br />
y demostrar que no era un señorito en busca<br />
de aventuras. A su regreso a Madrid conoció a<br />
una joven viuda de procedencia argentina, Sara<br />
Escalante de Newberry, con la que contrajo<br />
matrimonio en la conocida Iglesia de San Jerónimo.<br />
Durante la ceremonia, don Antonio lució<br />
el frac diplomático con bordados en oro, que<br />
www.spend-in.com<br />
•45