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COLINAS PLATEADAS

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Colinas plateadas<br />

Periódico del I.E.S. "Aravalle"<br />

Número 9: invierno de 2013.<br />

Noveno número monográfico.<br />

Tema: Colinas plateadas.<br />

Edición impresa.<br />

Edición digital en:<br />

http://arcadiabarcense.blogspot.com.es/<br />

http://www.educa.jcyl.es/es/revistacentros/revistas-centros-avila/revista-ies-aravalle<br />

Página 1


Es ilusión ser el primer soneto<br />

los primeros poemas, los primeros amores<br />

recuerdos que buscamos casi siempre<br />

para que no lo sean, para que vuelvan<br />

para volverlo a ser, así sea poco, falso<br />

la ilusión de tomarte de la mano<br />

la de volverme tu primer soneto<br />

la de volvernos el primer soneto<br />

siquiera el primer<br />

verso<br />

be[r]so<br />

De Panfletario (inédito)<br />

Continuum<br />

seguimos siendo instantes que se siguen buscando<br />

que empiezan y terminan en sí mismos<br />

el tiempo queda aparte<br />

los instantes lo ven<br />

pero de lejos<br />

ni lo niegan<br />

ni afirman<br />

que haya algo de razón fuera de ellos<br />

¿alguien puede negarme que hay semanas<br />

que encierran una vida?<br />

¿acaso no duran unos días más que otros?<br />

¿no vivimos momentos que dan sentido a todo?<br />

seguimos siendo instantes que se siguen buscando<br />

que empiezan y terminan en sí mismos<br />

que no niegan el tiempo<br />

ni lo afirman<br />

sólo son parte de esa<br />

serenidad que bulle<br />

quietud<br />

eternidad<br />

De Panfletario (inédito)<br />

Julio César Vélez Vallejo<br />

Hoy no encuentro un abrigo para el alma.<br />

Tal vez ni es lo que busco,<br />

tal vez con una gabardina sea bastante.<br />

Hoy la corbata aprieta,<br />

los gemelos no son ni mancuernillas,<br />

el sombrero se muestra en el espejo,<br />

ese sombrero que no uso<br />

y que hoy veo.<br />

Hoy está gris,<br />

aquí y en todas partes,<br />

y el gris angustia<br />

ahoga<br />

y no hay quien lo describa...<br />

Pinche y jodido gris,<br />

ahoga por gris y por ser lo de siempre,<br />

por lo repetitivo, lo sobado.<br />

Hoy quise ir a París,<br />

con sol, en primavera,<br />

y lo encontré en el cine,<br />

en color pero en gris<br />

y en el DF.<br />

El DF, que para mí es París,<br />

hoy no sé lo que es,<br />

ni con sombrero.<br />

De Edición de autor<br />

Musa<br />

quiero meterme en ti<br />

nadar tu cuerpo<br />

morder las telarañas, desgarrarlas<br />

cerrar tus cicatrices desde dentro<br />

con saliva<br />

con besos<br />

que así, conmigo dentro<br />

y sin que te des cuenta<br />

te estremezcas<br />

como dicta el deseo<br />

sin espacio ni tiempo<br />

(inédito)<br />

Página 2


Ignacio Martín, el poeta charro de las dos<br />

orillas.<br />

Mónica Martín Mena<br />

A mí los poetas me salieron muy<br />

temprano, y el más madrugador fue Ignacio<br />

Martín con sus sonetos adolescentes que leí en<br />

bares y parques. Luego vinieron las filologías, el<br />

amor a la literatura hispanoamericana a través<br />

del maestro y poeta Julio Vélez y la beca a la<br />

Universidad Autónoma de México que cambió su<br />

vida. Ignacio Martín era un poeta salmantino y<br />

se hizo charro mexicano con el paso de los años<br />

y de los libros, de su trabajo como experto en la<br />

narrativa de Arreola y de su tarea editorial en<br />

diversas entidades de la Ciudad de México. Pero<br />

charro al fin, le disfrutamos en sus columnas del<br />

periódico salmantino El Adelanto, para que no se<br />

nos olvide que son tan charros los de acá como<br />

los de allá. Y él sabe mantener muy bien ambos<br />

pies bien asentados en los libros y en el amor de<br />

sus dos tierras, porque su corazón no está<br />

dividido, sino lleno. Y lleno también de estos<br />

paisajes, porque su compañera de toda la vida,<br />

su charra mexicana es de Piedrahíta. Autor de<br />

varios poemarios, como Luz tan fuerte que se<br />

escucha, cuyo título es una sinestesia<br />

originalísima; también ha escrito un ensayo de<br />

“novema”, prosa poética­poema­relato<br />

autobiográfico en el que evoca al poeta profesor<br />

Julio Vélez, que tan importante fue para su<br />

trayectoria vital y poética; una escritura marcada<br />

por el amor a la literatura, el tono coloquial,<br />

aparentemente sencillo en ocasiones, que oculta<br />

una gran complejidad reflexiva. El poeta que yo<br />

conocí en el instituto sigue siendo un purista de<br />

la forma. ¡Sus sonetos entonces eran perfectos!,<br />

y mantiene una inmensa curiosidad por el<br />

mundo, los viajes, las gentes, los libros, los<br />

autores, su ciudad infinita en México… Una<br />

mirada totalizadora que convierte en versos<br />

cercanos, complejos, llenos de sensaciones,<br />

deseos, reflexiones, paisajes, evocaciones y<br />

admiraciones. Para él y para su escritura no hay<br />

fronteras, ni océanos ni distancias… Todo se<br />

convierte en verso, y nos lo envía desde la<br />

región más transparente del aire…, a otra que<br />

tan bien conoce y que es aún más transparente,<br />

llena de las colinas plateadas de nuestro paisaje.<br />

Charo Alonso.<br />

Página 3


Chilango<br />

Vivo en una ciudad donde los ahuehuetes<br />

son mucho más que árboles<br />

la habitan<br />

se manifiestan<br />

toman las calles<br />

levantan las aceras<br />

–yo creo que saben algo<br />

desde el 68–<br />

levantan las aceras, les decía,<br />

aunque debajo encuentren nada más un lago<br />

en el que alguna vez navegó una ciudad<br />

y tomaron las calles<br />

–les contaba–<br />

los ahuehuetes<br />

líderes de otros árboles<br />

–no conozco los nombres–<br />

que llegaron de lejos<br />

y ya mestizos<br />

como los que también llegamos de otras partes<br />

se quedaron también<br />

con la ciudad<br />

en la ciudad<br />

enraizando sus sueños en las calles<br />

que antaño fueron agua<br />

Publicado en El libro verde (antología del<br />

Encuentro Iberoamericano de Poesía Carlos Pellicer<br />

Cámara)<br />

Jitanjáfora de poesía mexicana<br />

A todos, en Reyes y Huidobro<br />

Sabines castellanos,<br />

como pachecos nervos y velardes.<br />

Moreno de Cervantes,<br />

como de antiguas monjas tan brocadas.<br />

Cabreras pelliceras,<br />

tan magañas y becerras de trópico.<br />

Rulfianos arreolas<br />

de huertas y mirones.<br />

Caos de piedras kazamas<br />

umbrales escalonas.<br />

Espaldas valdepeñas,<br />

trejos de España, Francia y lacandonas.<br />

León de cernudas garfias,<br />

mejías de cardenales y granieles.<br />

Castros plenos de cisnes martinianos,<br />

como anaya de la chihuahua nájera.<br />

Lina nava de amor,<br />

minerva plata.<br />

Otto nuevos colores, rebullendo<br />

en tu cálida frómeta de delfines.<br />

Poesía mexicana,<br />

descansa en Paz<br />

y no te mueras nunca.<br />

Publicado en El libro verde (antología del<br />

Encuentro Iberoamericano de Poesía Carlos<br />

Pellicer Cámara)<br />

Página 4


DE LA DOLOSA DESPEDIDA DA MITADE DO JUGLAR A LO<br />

DIVINO DEL ESTUDIO ARAVALLENSI, NUNCA<br />

SUFICIENTEMENTE LOADO E CONSAGRADO AL<br />

SANTÍSIMO CRISTO DO CAÑO.<br />

Por Charo Alonso.<br />

Cofrades e cofradesas de la mi congregaçión<br />

Hermanos nel esfuerço y en el sagrado temor,<br />

De que nos quiten la extra en la próxima ocasión,<br />

E multipliquen las horas dedicadas al sermón,<br />

Que vivimos tiempos duros, ya lo dice la escriptura,<br />

Y aunque Bocyl nos ilumine con toda su cordura,<br />

Cuando se reúnen los pastores no es más que pá impostura,<br />

Jorobar al funcionario e meterlo en angosturas.<br />

A me mesma me ha tocado, por amor de la Gloriosa,<br />

Impartir sapiencia lejos, sen vosotros e vosotras,<br />

Desterrada d´estas terras, tan feraçes, tan fermosas,<br />

Hállome transladada en villa, e aquesto es outra cosa.<br />

Muito extraño en las maitinas la montaña cor de plata,<br />

Los cafés muy odorosos das tabernas y su trata.<br />

El río tan creçido entrambas las corrientes<br />

Me transmuta en pastoril lengua, pluma e mente.<br />

Por lo tanto, mes dilectos, es aqueste mi sermón,<br />

En soltando ya la pluma, en pidiendo compasión,<br />

que fui juglar muy pendejo e fize burla en ocasión,<br />

en folgando dos cofrades e de toa la dirección.<br />

Mas vos era muy devota, bien lo sabe la Gloriosa,<br />

E al santo Cristo del Caño e a la caña tan gostosa.<br />

Caso es que mi pluma, a veces jolgorosa,<br />

Apiadó aos míos chefes con mi prosa alevosa.<br />

Hasta o padre Abate Paulus olvidó mis osadías,<br />

Deixó­me hablar burradas de toda a cofradía.<br />

Non me puso Fray Miguel expediente ni porfía,<br />

Ni descóntome Fray Alfredo ducados da alcançía.<br />

Era yo feliz joglar, criticando a lo divino,<br />

Fablando dos Abatese sembrando desatino;<br />

Non tenía a miña pluma más plazer luciferino<br />

Que glosar los nuestros cuentos entre risas de camino.<br />

Agora com pesar obedezco a la Gloriosa,<br />

Voy­me lexos, cantarina, con mi prosa tan graciosa.<br />

Página 5


Una semana en la que el I.E.S. "Aravalle" invita a<br />

su comunidad educativa, a la del C.E.I.P. "Juan<br />

Arrabal", y a toda la población de El Barco de<br />

Ávila y de otras localidades vecinas a participar en<br />

un conjunto de actividades artísticas, deportivas y<br />

de conocimiento protagonizadas principalmente<br />

por ell@s mism@s.<br />

EL LÁPIZ VIAJERO<br />

Por ALBA BERMEJO, 5º de Primaria en el C.E.I.P.<br />

“Juan Arrabal”.<br />

Mención Especial, Modalidad Educación Primaria,<br />

del Premio de Literatura Semana Cultural<br />

I.E.S. "Aravalle" 201 3<br />

Había una vez un lápiz que quería dar<br />

la vuelta a España en trenes y aviones. El<br />

lápiz, un día, decidió cumplir su sueño, y se<br />

puso manos a la obra.<br />

Primero, fue a Andalucía, y pasó por<br />

Sevilla, Córdoba y Jaén. También estuvo en<br />

Granada, Huelva, Almería, Cádiz y Málaga.<br />

Por cierto, en Málaga se hizo amigo de Boli-<br />

Loli.<br />

Luego, se fue a Aragón. Allí pasó unos<br />

días en Teruel, en Zaragoza, y en Huesca.<br />

Desde las tierras mañas partió rumbo a<br />

Castilla y León, donde visitó en primer lugar<br />

Soria, Valladolid, Segovia y Ávila. En la<br />

Provincia de Ávila, en un pueblo al pie de la<br />

Sierra de Gredos, conoció a Alba, Elisa,<br />

Natalia, María, Lucía y muchas niñas más, que<br />

estudiaban en un colegio llamado “Juan<br />

Arrabal”. Desde ahí se fue a Salamanca, luego<br />

visitó Zamora y León, y finalmente llegó a<br />

Burgos.<br />

La siguiente ruta fue hacia La Rioja,<br />

parando en Logroño.<br />

Y así sucesivamente, el lápiz viajero fue<br />

visitando todas las regiones del país.<br />

Cuando llegó el día de su cumpleaños,<br />

tod@s l@s amig@s que había hecho a lo<br />

largo de su viaje estaban esperándole con una<br />

fiesta que habían preparado. Se lo pasaron<br />

tod@s muy bien, y el regalo que le tenían<br />

preparado fue... un viaje alrededor del mundo.<br />

Página 6


EL CÍRCULO DE LA MUERTE<br />

Por DANIEL HERNÁNDEZ HOMPANERA, 2º de<br />

E.S.O. del I.E.S. "Aravalle".<br />

2º Lugar, Modalidad Educación Secundaria,<br />

del Premio de Literatura Semana Cultural<br />

I.E.S. "Aravalle" 2013<br />

Me encontraba en la noche de mi vida.<br />

Caminaba por la calle cuando un árbol me<br />

llamó la atención; estaba lleno de rostros<br />

humanos.<br />

No te miento.<br />

Estaba examinando el árbol cuando<br />

éste, con una rama, me agarró con toda la<br />

fuerza que puede tener un árbol. De repente<br />

me encontraba ahí, en el Círculo de los<br />

Muertos.<br />

Sentí que abandonaba mi cuerpo.<br />

Mi cuerpo sin alma cogió una mascara<br />

y empezó a bailar la danza macabra, la Danza<br />

de la Muerte. Fue entonces cuando apareció él,<br />

la Muerte. Tenia un traje largo con una capucha<br />

de pico negra y una guadaña roja cobre.<br />

Mi cuerpo bailaba y brincaba feliz.<br />

Deseé volver a mi cuerpo y escapar de<br />

ahí, correr; porque cuando ves tu muerte, sólo<br />

deseas volver a vivir.<br />

Después recuerdos.<br />

Vi pasar toda mi vida en un momento,<br />

incluso cosas que no recordaba. Cuando me<br />

quise dar cuenta, estaba en mi cuerpo y la<br />

Muerte se me acercaba. Es un momento en<br />

que prefieres estar en otro mal momento o<br />

haber rehecho toda tu vida para arreglarla.<br />

Era el fin de una vida, y nada más.<br />

La Muerte alzó su roja guadaña y me<br />

encerró con su golpe en el árbol de los<br />

lamentos (voz atrapada en el Árbol de los<br />

Lamentos).<br />

EL VIAJE A PARÍS<br />

Por MARTA YÁÑEZ GARCÍA, 5º de Primaria en el<br />

C.E.I.P. “Juan Arrabal”.<br />

2º Lugar, Modalidad Educación Primaria,<br />

del Premio de Literatura Semana Cultural<br />

I.E.S. "Aravalle" 2013<br />

¡Qué lugar tan maravilloso! La<br />

Ciudad de las Luces; la Torre Eiffel, ¿cuánto<br />

medirá? ¿300 metros? ¿400? Está situada<br />

en el Campo de Marte, a la orilla del río<br />

Sena.<br />

¡Me gustaría tanto ir a París!<br />

Aprender francés, visitar los Campos<br />

Elíseos, el Arco de Triunfo... Fue construido<br />

por orden de Napoleón, y está en la Plaza<br />

Charles de Gaulle; doce avenidas están<br />

unidas a esta plaza, formando una estrella.<br />

¡La Catedral de Notre Dame!<br />

¿Habrá un jorobado?<br />

El gran Panteón de París, para<br />

enterrar gente importante... ¿Me encontraré<br />

alguna momia?<br />

Aunque me han dicho que es la<br />

ciudad de “l'amour”, no sé si encontraré a<br />

Cupido. Espero que no.<br />

Este es mi viaje fantástico.<br />

Página 7


AQUELARRE<br />

Por PATRICIA FLORES LORENZANA, 5º de Primaria en el C.E.I.P. “Juan Arrabal”.<br />

1º Lugar, Modalidad Educación Primaria,<br />

del Premio de Literatura Semana Cultural<br />

I.E.S. "Aravalle" 2013<br />

Ayer realicé un viaje a un lugar muy extraño. Estaba cubierto por un brillante arco iris.<br />

Había criaturas fantásticas que desprendían luz, caballos blancos con afilados cuernos en el<br />

centro de la cabeza, que me recordaron a los unicornios, simpáticas hadas que jugaban entre<br />

las flores, sirenas de cola plateada, que entraban y salían del agua chapoteando... También<br />

había animalitos más comunes que no hacían nada en particular.<br />

Mi curiosidad me llevó a meterme en un bosquecillo que parecía más interesante. Allí<br />

eran los búhos y murciélagos, con sus ojos brillando en las sombras, los que llamarían mi<br />

atención.<br />

En lo mas espeso del bosque, una gran hoguera en el centro de un circulo de piedras<br />

casi no me dejaba ver nada más. Sin embargo, pude escuchar:<br />

“Pentumbra, muertos vivientes, hombres lobo y vampiros, salid de estas llamas”.<br />

Tal fue el susto que me dio aquella escena de brujas, que me obligó a despertarme y<br />

abrir los ojos. ¡Qué suerte, era mi madre!, que, como todos los días, me estaba gritando para<br />

que me tirara de la cama y no llegar tarde al Colegio.<br />

Página 8


Mi sangre hierve, mi<br />

aliento se espesa, mi<br />

puño se cierra y la voz<br />

reclama que todo se<br />

acabó, con la oscuridad<br />

se enfría la discusión y<br />

sólo nos quedan miradas<br />

rotas y las promesas<br />

vacías.<br />

Colores que vacían el<br />

rencor del ser humano en<br />

inmensas gamas de<br />

pequeños matices, y el<br />

más grande de ellos borra<br />

los resquicios de la<br />

oscura noche en la que el<br />

frio paraliza el universo, y<br />

solo se escucha la<br />

inmensidad del grito de<br />

una sociedad rota y<br />

corrupta por el cáncer de<br />

la estupidez.<br />

Resuenan las viejas<br />

campanadas en la muerte,<br />

trae consigo la guadaña de<br />

la verdad y la inquietante<br />

sombra de tu realidad, ¿Qué<br />

porque viene sonriendo?<br />

bueno, mírala, viene a segar<br />

tu alma como si fueras un<br />

pequeño grano de humo en<br />

su inmensa niebla…No<br />

podrás encontrar escondite,<br />

nadie puede huir de su figura<br />

quebrada, su fría mano te<br />

sostiene por el cuello y te<br />

arrastra a otro universo.<br />

Creíste poder ser más que<br />

los demás… ¡que<br />

ingenuidad! Ahora<br />

compruebas que la muerte<br />

arrasa allí donde va…Piensa<br />

en las veces que rompiste a<br />

suplicar, los silencios que<br />

podrías guardar si te<br />

resignaras, así, sin más…<br />

Cenizas… polvo… frío…<br />

oscuridad.<br />

Mónica Martín Mena.<br />

Mónica Martín Mena.<br />

Página 9


Por CLAUDIA BONILLA, 3º de<br />

E.S.O. del I.E.S. "Aravalle".<br />

1 º Lugar, Modalidad Educación Secundaria,<br />

del Premio de Literatura Semana Cultural<br />

I.E.S. "Aravalle" 201 3<br />

Cuentan físicos y<br />

matemáticos que el viaje más<br />

largo que puedes realizar es la<br />

vuelta al mundo por tierras y<br />

mares, que se mide en horas,<br />

minutos y segundos. Cuentan<br />

también que existen kilómetros<br />

entre países, estados, regiones y<br />

personas.<br />

Todo esto tenía lógica<br />

hasta que me di cuenta de que el<br />

viaje más largo que puedes<br />

realizar es la vida, de distinta<br />

trayectoria para cada persona,<br />

pero largo y emocionante; medido<br />

en momentos y sin nada que<br />

separe países y personas, sólo<br />

unos miseros kilómetros físicos<br />

que no tienen nada que hacer al<br />

lado de sentimientos y corazones.<br />

Mónica Martín Mena<br />

El Ladrón de Libros<br />

Carolina Gallardo<br />

Intentó por todos los medios recuperar la<br />

atención de ella; hizo todo; hizo lo imposible. No se<br />

imaginaba cuán lejos estaba de lograrlo. Para ella, él<br />

era ya como esos libros que te regala alguien que no<br />

conoce tus gustos; un libro de esos que tienes por<br />

casualidad, pero que sabes que jamás leerás y por<br />

eso lo colocas donde todos lo vean, con la esperanza<br />

de que alguien te lo pida "prestado" y jamás lo<br />

regrese, con la esperanza de que sea objeto del<br />

deseo del ladrón de libros.<br />

Página 10


Saudades de mim<br />

Recorro mis paisajes<br />

los que he ido descubriendo<br />

los nuevos<br />

los antiguos<br />

Quando não posso cantar<br />

Tenho saudades de mim.<br />

Camané ("Mar impossível")<br />

Vago por esas ítacas a las que he ido llegando<br />

tal vez de pensamiento<br />

nada más<br />

Desando los caminos<br />

en los que me convierto<br />

pues me encanta volver<br />

volver incluso a donde nunca he estado<br />

Mas este afán viajero<br />

tantas veces confuso<br />

tantas veces sentado<br />

en un sillón<br />

que mira al mar<br />

me ha vuelto un poco<br />

y lee<br />

turista de mi propia ciudad<br />

visitante de mis propios recuerdos<br />

Huésped de mis afectos<br />

de quienes son,<br />

de quienes fueron míos<br />

también sé que serán<br />

no hay más remedio<br />

aunque parezca<br />

a veces<br />

que dejaran de serlo<br />

Este volver constante<br />

es lo que tiene<br />

Tanto empezar de nuevo<br />

acaba por tornarme<br />

visitante de mí<br />

No quiero ser burócrata<br />

de mi propia existencia<br />

Ignacio Martín. Publicado en El libro verde (antología del<br />

Encuentro Iberoamericano de Poesía Carlos Pellicer Cámara)<br />

Página 11


EN ESTE NÚMERO DE ARCADIA BARCENSE<br />

COLABORAN:<br />

TEXTOS.<br />

Ignacio Martín. Poeta invitado (España­México).<br />

Carolina Gallardo (Venezuela).<br />

Charo Alonso. Profesora IES "Mateo Hernández". Salamanca.<br />

Rosario Teresa Blázquez G. Maestra C.E.I.P. "Juan Arrabal". El Barco de Ávila.<br />

Marta Yánez García. Alumna del C.E.I.P. "Juan Arrabal". El Barco de Ávila.<br />

Mónica Martín Mena. Exalumna del I.E.S. "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

Alba Bermejo. Alumna del C.E.I.P. "Juan Arrabal". El Barco de Ávila.<br />

Claudia Bonilla. Alumna del I.E.S. "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

Patricia Flores Lorenzana. Alumna del I.E.S. "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

Daniel Hernández Hompanera. Alumno del IES "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

ORGANIZACIÓN Y COORDINACIÓN<br />

Charo Alonso. I.E.S. "Mateo Hernández". Salamanca.<br />

Dept. de Lengua Castellana y Literatura. I.E.S. "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

A. Carlos Ferreira D. Orientador I.E.S. "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

FOTOGRAFÍA E ILUSTRACIÓN<br />

Javier Aparicio. Profesor I.E.S. "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

Mónica Martín Mena. Exalumna I.E.S. "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

A. Carlos Ferreira D. Orientador I.E.S. "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

DISEÑO GRÁFICO:<br />

A. Carlos Ferreira D. Orientador I.E.S. "Aravalle". El Barco de Ávila.<br />

ANAGRAMA DE ARCADIA BARCENSE<br />

Carlos González Díaz. Profesor I.E.S. "Hermenegildo Martín Borro". Cebreros.<br />

Impresión: IDEM FOTOCOPIAS Salamanca.<br />

Sigue nevando. Es el resplandor. Es el<br />

silencio. Es la profunda calma, la quietud, el candor<br />

de lo recién estrenado. Tan sólo el ladrido de un<br />

perro en la lejanía da un toque terrenal al paisaje.<br />

Y como la nieve, como la nieve presiento que<br />

quisiera ser. La paz de un corazón puro. La alegría de<br />

un niño convirtiéndose en un muñeco de nieve con<br />

sombrero de paja, ojos de botones negros y por<br />

nariz una zanahoria.<br />

La nieve nutriendo la tierra toda y calmando<br />

su sed tras la sequía.<br />

Como la nieve, tabla rasa en la que escribir un<br />

poema, quizás un nombre amado, tal vez un corazón<br />

atravesado con una flecha. Los enamorados hacen<br />

ese tipo de cosas y quisieran, ¡ay!, que duraran para<br />

siempre…<br />

Como la nieve, que oculta las imperfecciones,<br />

las disimula, pero las acoge en su maternal seno, y<br />

por unos deliciosos momentos viste a toda la<br />

naturaleza con el blanco manto de la juventud.<br />

Como la nieve, y hacer que el hombre se<br />

vuelva niño y recuerde aquellos días de antaño en que<br />

nevaba mucho, mucho. Días sin escuela, con caminitos<br />

entre montículos de nieve. Días de risas, lumbre y<br />

abuelas contando cuentos y asando castañas. Un<br />

respiro en la cotidianidad que llenaba de magia los<br />

corazones infantiles.<br />

Como la nieve que es fría pero que te quema<br />

al tocarla, que te puede llegar a abrasar si te<br />

descuidas.<br />

Como la nieve quisiera ser, como la nieve del<br />

campo, siempre fulgor, no nieve de ciudad que acaba<br />

pisada y negra, amontonada en las aceras. Sucia.<br />

Ser nieve y convertirme postreramente en<br />

agua y volver a ascender a los cielos. Luz de un<br />

instante y silencio.<br />

Rosario­Teresa Blázquez Gómez<br />

Maestra del C.E.I.P. “Juan Arrabal”<br />

Página 12

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