Libro que mata a la Muerte - Instituto Cultural Quetzalcoatl
Libro que mata a la Muerte - Instituto Cultural Quetzalcoatl
Libro que mata a la Muerte - Instituto Cultural Quetzalcoatl
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
El <strong>Libro</strong> <strong>que</strong> <strong>mata</strong> a <strong>la</strong> <strong>Muerte</strong><br />
Don Mario Roso de Luna<br />
hoy en día: una ciudad de pedantería, de acrimonia, de disputas, de odios y nimiedades de<br />
ingenio. El fanatismo era allí extremado; muy frecuentes <strong>la</strong>s sediciones religiosas. Los<br />
fariseos imperaban en el<strong>la</strong>; el estudio de <strong>la</strong> Ley, llevado hasta <strong>la</strong>s más insignificantes<br />
minucias y casuísmos, constituía <strong>la</strong> enseñanza única. A<strong>que</strong>l<strong>la</strong> cultura, exclusivamente<br />
teológica y canónica, no contribuía en nada a ilustrar los entendimientos. Tenía algo de <strong>la</strong><br />
estéril doctrina del faquir musulmán, de esa ciencia fútil <strong>que</strong> se agita en derredor de una<br />
mezquita, disipación considerable de tiempo y de dialéctica vana del todo. La misma<br />
educación teológica del clero moderno, aun<strong>que</strong> árida, no puede dar una idea de aquél<strong>la</strong>. .. La<br />
ciencia del doctor judío, soler o escriba, era puramente bárbara, absurda, sin<br />
compensaciones y desprovista de todo elemento moral, como puede juzgarse por el Talmud<br />
mismo. Para colmo de <strong>la</strong> desgracia, llenaba de un ridículo orgullo a todo el <strong>que</strong> se empeñaba<br />
en abrazar<strong>la</strong>. Orgulloso del pretendido saber, <strong>que</strong> tanto trabajo le costara, el escriba judío<br />
sentía por <strong>la</strong> cultura griega el mismo desprecio <strong>que</strong> el sabio musulmán de nuestros días<br />
experimenta por <strong>la</strong> cultura europea, y <strong>que</strong> el antiguo teólogo católico tenía por el saber de <strong>la</strong>s<br />
gentes del mundo. Siendo propio de esas culturas escolásticas el alejar al espíritu de todo lo<br />
delicado.... a<strong>que</strong>l odioso mundo no podía menos de oprimir gravemente a <strong>la</strong>s almas<br />
sensibles y delicadas del Norte, y el desprecio por ello de los hierosimilitanos hacia los<br />
galileos hacía aún mayor el abismo <strong>que</strong> los separaba." En cuanto a Nazareth, añade: "La<br />
ciudad santa de Jesús es un pueblecito situado en un repliegue del terreno <strong>que</strong> forma <strong>la</strong><br />
ancha meseta derivada de <strong>la</strong>s montañas <strong>que</strong> limitan al Norte <strong>la</strong> l<strong>la</strong>nura del Esdrelón. No le<br />
mencionan siquiera el Antiguo Testamento, ni Josefo, ni el Talmud. Su pob<strong>la</strong>ción actual es de<br />
unas tres a cuatro mil almas, y acaso no haya variado mucho desde entonces. Fría en<br />
invierno y de muy saludable clima. Sus alrededores son deliciosos, y en ningún país del<br />
mundo se hal<strong>la</strong>ría un lugar más a propósito para formar y dar pábulo a los ensueños de <strong>la</strong><br />
más absoluta ventura, pues <strong>que</strong> a<strong>que</strong>l pintoresco pueblo es acaso el único punto de<br />
Palestina en el <strong>que</strong> el alma se siente aliviada del opresivo afán <strong>que</strong> experimenta en medio de<br />
a<strong>que</strong>l<strong>la</strong> deso<strong>la</strong>ción sin rival. En el siglo VI Antonino Mártir hizo un cuadro encantador de <strong>la</strong><br />
fertilidad de sus alrededores, comparándolos con el Paraíso. Todavía algunos de los valles<br />
del Oeste justifican esta pretensión. El horizonte de <strong>la</strong> ciudad es reducido, pero cuando se<br />
asciende un poco hasta <strong>la</strong> meseta superior, barrida por continuas brisas. <strong>la</strong> perspectiva se<br />
agranda hasta hacerse espléndida. Al Oeste se extienden <strong>la</strong>s hermosas líneas del Carmelo,<br />
terminadas por una abrupta punta <strong>que</strong> parece sumergirse en el mar. En seguida se<br />
desarrol<strong>la</strong>n <strong>la</strong> doble cima <strong>que</strong> domina a Mageddo; <strong>la</strong>s montañas del país de Sichem, con sus<br />
lugares santos de <strong>la</strong> época patriarcal; el monte Gelboé; el pe<strong>que</strong>ño y pintoresco grupo al cual<br />
van siempre unidos.<br />
los recuerdos, risueños o terribles, de Sulem y de Endor, y, en fin. el Tabor, con su bel<strong>la</strong><br />
forma esferoidal, <strong>que</strong> los antiguos comparaban a un seno. El valle del Jordán y <strong>la</strong>s elevadas<br />
l<strong>la</strong>nuras de <strong>la</strong> Perea, <strong>que</strong> forman una línea continuada hacia el Este, se entrevén por una<br />
depresión montañosa entre Sulem y el Tabor. Al Norte. <strong>la</strong>s montañas de Safed se inclinan<br />
hacia el mar, ocultando a San Juan de Acre, pero dejan <strong>que</strong> <strong>la</strong> mirada se pierda en el golfo<br />
de Khaffa. Más allá, por el Norte y casi entre los f<strong>la</strong>ncos del Hermón. se descubre <strong>la</strong> Cesárea<br />
de Felipe, en tierra de gentiles, y por <strong>la</strong> parte del Sur, detrás de a<strong>que</strong>l<strong>la</strong>s montañas, ya<br />
menos rientes. de Samaria, se adivina <strong>la</strong> triste Judea, disecada por los vientos abrasadores,<br />
de muerte y de destrucción... Tal fué el horizonte de Jesús y de sus primeras predicaciones."<br />
Nazareth es, más o menos, toda Palestina, en sus tradiciones religiosas, su vivir casto y<br />
retirado, característico: esenio, ebionita. terapeuta y nazareno 122 , es decir, jina, si por <strong>la</strong> vaga<br />
122 "El nombre de esenios, dice <strong>la</strong> Maestra, viene de Essaioi y Asaya, "un médico". Lucas, <strong>que</strong> era médico, es designado en<br />
<strong>Instituto</strong> <strong>Cultural</strong> <strong>Quetzalcoatl</strong> (Gnosis) 160 www.samaelgnosis.net