PDF 10112011 - Prensa Libre

PRENSA LIBRE
16
Guatemala, jueves 10 de noviembre de 2011
OPINIÓN /
EDITORIAL
Siguen riesgos de
violencia electoral
FUNDADO EN 1951
CASA EDITORA PRENSA LIBRE S.A.
13 calle 9-31 zona 1, Guatemala
Presidenta:
Vicepresidente:
Director editorial:
Gerente general:
La Procuraduría de los
Derechos Humanos
(PDH) hizo pública su
muy justificada preocupación porque la
violencia generada por el proceso electoral
pueda continuar en 48 municipios
de 16 de los departamentos del país,
cuando el 14 de enero próximo se realice
el cambio de autoridades municipales.
Este hecho afianza la creencia de
que la serie de sucesos sin precedentes
ocurridos durante la campaña política
del 2011 tienen consecuencias insospechadas
porque muchos tuvieron relación
directa con la desobediencia de la
ley, de lo que no escapó ningún partido.
En efecto, en un 15 por ciento de los
municipios y un 70 por ciento de los
departamentos, grupos de ciudadanos
inconformes con los resultados electorales
hacen que la PDH tema actos de
violencia. En los seis procesos electorales
ocurridos desde 1985, si bien hubo
casos esporádicos de inconformidad, no
habían alcanzado la magnitud de lo ocurrido
en este proceso del 2011: quema de
urnas y edificios municipales, confrontación
de vecinos y riesgo para quienes
recibirán o continuarán en los cargos
públicos, sobre todo las alcaldías.
Los motivos de esta violencia generalizada
deben ser buscados no solamente
en grupos que no aceptan el juego
democrático del cambio en las personas
que ejercen la autoridad gracias a
los votos. Hay que analizar, sobre todo
en el caso de las reelecciones, en cuáles
casos los alcaldes que buscaron de nuevo
el cargo lograron el triunfo a base de
algún tipo de actividad ilegal o de abusos,
amenazas y presiones de todo tipo.
El problema es serio para los dos
gobiernos: el de la UNE, porque debe
poner especial cuidado en que tales acciones
violentas no ocurran. Y el del
Partido Patriota, porque comenzar su
período con violencia generada por los
resultados electorales lo obliga a actuar
de manera enérgica desde el primer día,
a fin de que la violencia de este origen
no continúe en los municipios de Sacatepéquez,
Santa Rosa, Escuintla, Chimaltenango,
Suchitepéquez, Jalapa, Jutiapa,
Chiquimula, Izabal, El Progreso,
Petén, Quiché, Quetzaltenango, Sololá,
Baja Verapaz, Alta Verapaz y Guatemala.
Por esta causa, el equipo de transición
integrado por representantes del
gobierno saliente y el entrante tiene entre
los temas para ponerse de acuerdo
el referente a cómo actuarán de manera
conjunta para advertir a los eventuales
bochincheros acerca de las consecuencias
de causar problemas el día de la
toma de posesión. Es asunto de interés
mutuo, pero también para la ciudadanía,
tanto residente en los lugares con riesgo
de violencia como en el resto del país.
Alguna parte de la violencia temida
puede ser consecuencia de lagunas en
la Ley Electoral y de Partidos Políticos,
que tiene en esta preocupante posibilidad
una razón más para que comience
el consenso nacional a fin de hacerla un
instrumento coercitivo. Es tarea de los
analistas buscar las razones de esta actitud
y sugerir soluciones que sean aplicadas
por las autoridades, pero a nadie
debe quedarle duda de que los abusos
de funcionarios que fueron reelectos es
una de las causas que deben ser eliminadas.
De nada sirven elecciones limpias,
si luego las turbas actúan.
María Mercedes Girón de Blank
Mario Antonio Sandoval
Miguel Ángel Méndez Zetina
Luis Enrique Solórzano C.
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MIEMBRO DE LA SOCIEDAD INTERAMERICANA DE PRENSA
PERSISTENCIA
La poesía
nos trasciende
En estos días en que nos agobia el ambiente
político, vuelvo los ojos a la poesía.
E N EL V FESTIVAL INTERNAcional
de Poesía de Quetzaltenango
en el 2000, dedicado al
poeta Francisco Morales Santos
por su poema Asalto al
cielo, escribí estas palabras
perdidas en el tiempo, que me
parece oportuno recordar para
aliviar un poco el ambiente político
que nos agobia. Porque si
algo nos hermana es el arte de
escribir.
La poesía es la propia cara y
la cara del mundo. Posibilidad
de existir. Su actividad trasciende
toda ética, todo vano conformismo,
toda categoría estética.
La poesía amenaza nuestra
rutina, nuestra pereza, nuestra
impotencia. Es aclamada desesperadamente
por los agónicamente
esperanzados. Es paraíso
o infierno; nada intermedio.
Abismos o cumbres son sus recintos.
Es serpiente ocóndor;
repetición, innovación.
La poesía es aquel
agudo silencio que por
fin se torna en palabra.
Es conversión, diversión,
aceptación, herejía,
inmersión, rechazo.
Es rebelión y revelación,
desalojo, aposento,
extravío, camino,
atajo, abandono, entrega;
es lo que se va a
escribir y ya se está escribiendo.
Es imposibilidad
yposibilidad. Patético
reto.
La poesía nos asciende, nos
desciende, nos trasciende. Es
altibajo de vida y muerte, voz
oculta que nos arranca de la
apatía ynos sumerge oemerge
en un juego de aguas tumultuosas
o calmas, límpidas o cenagosas.
Es ámbito propio y ámbito
ajeno; apertura a lo sagrado
y alo maldito, disyuntiva entre
lo inteligible y lo ininteligible.
Es amenaza, caos, plenitud.
La poesía es inconsciencia
que se torna conciencia, es
tiempo que desmenuza el tiempo;
hermética eternidad insondable.
La poesía nos sacude y
afronta, nos confronta. Es desquiciadora
actividad de continuas
interrogantes, de negaciones,
afirmaciones, contradicciones.
Es salida yencierro. Es
ponerse frente al espejo y mirar
más allá de él: no nuestra carne,
nuestros huesos; no nuestros
huesos, nuestra médula; no
nuestra médula, nuestra ceniza.
Totalidad del ser que se niega al
no ser. La poesía tiene siempre
Margarita
Carrera
dos caras: la de la vida y la de la
muerte, la del amor y la del odio,
la del ser y la del no ser. Muerte
y resurrección.
La poesía es resurgimiento,
tartamudeo, grito, carcajada, sollozo,
canto; todo, menos aceptación
incondicional de lo establecido.
La poesía más que
respuestas expande dudas. Murmullo
insensato, lúcido, intraducible.
Es magia incesante,
destrucción y construcción, alegría
y sufrimiento, permanencia
yhuida. Es el parque en donde
se disputan fantasmales los seres
del ayer, del hoy, del mañana.
Se aventura al ocultismo, a la
pesadilla, al trasmundo. La poesía
es búsqueda, angustia, triunfo,
dicha, derrota. Es muerte
porque es vida; es vida porque
es muerte. Es desgarre de amor,
supresión de toda indiferencia;
humilde y soberbia. Tránsito temible,
provoca, reta,
acaricia, golpea. Hace
sensible lo insensible.
Es el duelo entre nuestro
yoynuestro noyo.
Es ácido que corroe lo
inexplicable.
Es represión que da
rienda suelta a su deseo,
liberación, avidez
permanente. Meditación
y premeditación.
Alevosía, ventaja. Escondida,
resurge en los
poetas ciegos. A veces
es necesaria la ceguera total
para irradiar su inmensa luz.
Homero y Borges. El poeta, la
poeta irradia en palabras los
largos silencios de la niñez,
vuelve a ser niño a ser niña por
el milagro de la palabra. Pero
hay silencios de silencios: están
los silencios negros de una niñez
y juventud desgarrados, silencios
del abandono, del desconsuelo,
dela muerte ensuicidio
perpetuo. Silencios de silencios,
silencios, también de
luz en el entresueño del alba, de
ríos cristalinos, de montes y
cielos sin límite.
El poeta, la poeta nos trae
palabras que trascienden los límites
del lenguaje. Él o ella no
elige; a él oaella lo eligió el
destino. Por el vasto campo de
la existencia, la poesía nos asciende
y nos trasciende; nos
enciende. Fuego y luz, sombra y
silencio. Por la poesía somos
seres humanos atotalidad. Nos
rescata de lo sombrío de los
alegatos y de lo rutinario con su
desgaste fatal.