Año 9, t. 11, 5a. entrega (1901) - Publicaciones Periódicas del ...

024 Anales de la Universidadd
de imperiosa urgencia, el ejercicio de la justicia queda suspendido en
el interés de los litigantes: para volverles la calma, aunque sea transitoriamente,
y permitirles volver sus vistas hacia sus tareas ú ocupacio
nes ordinarias y reanudar sus afectos que la apremiante necesidad de
defender sus derechos ha desviado de su objeto habitual, en el interés
de los magistrados: porque les permite recobrar las fuerzas gastadas
en el estudio prolongado é incesante de las causas.
El uso de las vacaciones judiciales, según Dalloz, es muy antiguo^
en razón de que deriva de la necesidad.
El descanso dominical y el de otras fiestas, ha sido instituido por la
Iglesia Católica, como una obligación.
El Señor, por ministerio de Moisés recomendó á los israelistas la observancia
del Sábado, diciéndoles: Mañana es el día de Sábado, cuyo
descanso está consagrado al Señor. (Éxodo—Cap. XVI. v. 23). Seis
días trabajarás: el séptimo descansarás. (Éxodo—Cap. XXIIl, v. 12).
La feria mayor aquí entre nosotros, desde que nos regimos por leyes
propias ha durado un mes: desde el 25 de Diciembre al 25 de
Enero. Nuestro Proyecto innova y fija otra época, determina que la
feria mayor transcurrirá todo el mes de Diciembre; así la reapertura
del nuevo período judicial se verificará con la apertura de cada nuevo
año. Además, el mes de Diciembre: último de la Primavera es el mejor
por su temperatura, por los dones y atractivos de la naturaleza, para
solaz de las gentes del foro, que en la feria acostumbran ausentarse de
las ciudades invadiendo nuestras hermosas campiñas.
En Francia y en España, las vacaciones duran dos meses; en Italia
duran tres.
Para que la justicia no quede desatendida ni se frustre el fin de la
feria mayor, se hace indispensable la existencia de los Jueces de feria''
que serán por turnos: uno de los Jueces de lo Correccional ó de lo
Penitenciario, y uno de Instrucción, en el Departamento de Montevideo;
y uno de lo Correccional-Penitenciario, ó un Juez de Paz, y uno
de Instrucción, en los otros de los Departamentos de la República.
Los Tribunales Superiores nombrarán por turno uno de sus miembros
para que durante la feria provea de mero trámite y ejerza superintendencia
sobre los Jueces de feria.
La habilitación de los días feriados y de feria mayor, puede pedirse
/ decretarse antes ó en ellos mismos, según el Proyecto. De manera
que el silencio guardado hasta ahora por la legislación del país, sobre
este tópico, quedará interrumpido por una disposición terminante que
no dé lugar á dudas y que armonizará con la jurisprudencia práctica
preestablecida.
Si no fuera de ese modo, ¿cómo podrían las partes, los mismos Jueces,
aprovecharse del beneficio de la habilitación, cuando la causa que
la motiva ha surgido en día inhábil? ¡Cómo! ¿habrían de ver impasibles
que se frustra tal vez la única prueba, ó la más importante que tengan