Año 19, t. 24, nº 91 (1914) - Publicaciones Periódicas del Uruguay
Año 19, t. 24, nº 91 (1914) - Publicaciones Periódicas del Uruguay Año 19, t. 24, nº 91 (1914) - Publicaciones Periódicas del Uruguay
370 Anales de la Universidad IV LA ENSEÑANZA PRÁCTICA.—LOS PROFESORES Li enseñanza, en general, se hace bien, y si en algunas materias resulta un poco débil, es más bien por et modo cómo se hace, que por otro motivo. Más de un Profesor se extiende en consideraciones de orden secundarioy deja de lado hechos y observaciones de importancia capital. El plan vigente de Enseñanza Secundaria responde, en primer término, á un plan de cultura, y por eso quedan descartadas de la enseñanza los detalles y particularidades, más propias para los que hacen exclusivamente trabajo intelectual y previo á las Facultades superiores y no á los que sólo persiguen la cultura del espíritu. Por ese motivo se han reducido los programas á su mínima expresión, facilitando su conocimiento á los estudiantes que se inician. Que el alumno aprenda poco pero bien, he ahí el desiderátum; que comprenda lo que estudie, que razone, se dé cuenta, explique y aprecie el valor de los conocimientos. Sin embargo, no siempre se procede en esa forma; en el estudio de la Historia Natural, por ejemplo, el Profesor se detiene en la explicación de una apófisis, en el detalle de un hueso, en el estudio de sus caras, de su forma, etc., pero no explica con mayor detención el funcionamiento del riñon ó la función del corazón ó del hígado, cuyo conocimiento es el que más interesa al alumno para la vida práctica. Igual cosa cabe decir de la Física y de la Química. Estudiantes muy distinguidos, sobresalientes algunos, repetían de memoria la historia de un fenómeno, una combinación ó una reacción, sin darse cuenta, en muchos casos, de la ley que rige esos fenómenos y esas combinaciones. Las clases prácticas dictadas en esa forma importan un verdadero descalabro, puesto que el estudiante pierde su.
Alíales de la Universidad 371 tiempo, y lo que es más sensible, pierde el entusiasmo y la afición, si es que la tiene, por ese género de estudios. Podrá decirse que los Liceos no lian sido dotados á tiempo del material de enseñanza, de los museos, gabinetes y laboratorios respectivos. El hecho es cierto, pero no es menos cierto que en algunos de aquéllos, donde ese material existía, el resultado ha sido idéntico, lo que quiere decir que ese mismo material de enseñanza, en algún caso sólo sirve como elemento decorativo ó como objeto de adorno. Y es eso lo que hay que combatir, lo que debe perseguirse por todos los medios, y obligar no sólo al Profesor ó Profesores de las asignaturas, á que hagan práctica la enseñanza, sino también á los propios Directores de los Liceos, para que empleen su severidad en ese género de inspecciones. Y así como hablo de las ciencias físico naturales, puedo hablar de la GeogT¿ifía, de la Aritmética, de la Gramática, de la Historia y del Dibujo. Mucho se ha adelantado en esta parte, pero aún queda mucho por hacer. En mi informe del año pasado, hacía presente la manera poco provechosa con que se hacía el estudio de la Gramática y de la Aritmética, y llegaba á citar ejemplos vivísimos que demostraban la inutilidad de su estudio en esa forma. Las cosas pasan ahora de otra manera. Mucho se ha cambiado, pero hay tod¿ivía que cambiar más, no con relación á los alumnos sino á los propios profesores, seleccionándolos, separando, como acaba de hacerse, con los que no prestan servicio ó lo prestan mal, perjudicando así la marcha del Liceo. Diez y seis estudiantes de una Institución fueron observados en Aritmética, por falta de razonamiento en las demostración de los teoremas. El Profesor les habría enseñado el curso con arreglo al texto, sin la explicación previa ó acaso insuficientemente, y los alumnos repetían las demostraciones tomadas literalmente del libro, sin darse cuenta de lo que hacían. Un simple cambio de letras ó de números en el planteo de mi problema, habría sido suficiente para desechar á todos. En el propio estudio de
- Page 315 and 316: Anales de la Universidad 319 patrim
- Page 317 and 318: Anales de la Uniceraidad 321 Claro
- Page 319 and 320: Alíales de la Universidad 323 que
- Page 321 and 322: Anales de la Universidad 325 que ti
- Page 323 and 324: Anales de la Universidod A esto se
- Page 325 and 326: Anales de la Universidad 329 ciar s
- Page 327 and 328: Anales de la Universidad 331 insupe
- Page 329 and 330: Anales de la Universidad 333 CAPÍT
- Page 331 and 332: Anales de la Universidad posible de
- Page 333 and 334: Anales de la Universidad 337 Nuestr
- Page 335 and 336: Anales de. la Universidad 339 comú
- Page 337 and 338: Anales de la Universidad 341 caso d
- Page 339: Anales de la Universidad 343 acció
- Page 343 and 344: Anales de la Universidad 347 INFORM
- Page 345 and 346: Anales de la Universidad 349 Los pr
- Page 347 and 348: Anales de la Universidad 351 Así s
- Page 349 and 350: Anales de la Universidad 353 sició
- Page 351 and 352: Anales de la Universidad 355 taria
- Page 353 and 354: Anales de la Universidad 357 nosotr
- Page 355 and 356: Anales de, la Universidad 359 acons
- Page 357 and 358: Anales de la Universidad 361 progre
- Page 359 and 360: Anales de la Universidad 363 Los cu
- Page 361 and 362: Anales de ¿a Universidad 36» tes
- Page 363 and 364: Anales de la Universidad 367 tar el
- Page 365: Anales de la Unicersidad 369 •de
- Page 369 and 370: Anales de la Universidad 373 demost
- Page 371 and 372: Analta de la Universidad 375 •exi
- Page 373 and 374: Alíales de la Universidad un Direc
- Page 375 and 376: Anales de la Universidad 379 ción
- Page 377 and 378: Anales de la Universidad 381 mar do
- Page 379 and 380: Alíales de la Universidad 383 dado
- Page 381 and 382: Anales de la Universidad 385 Segund
- Page 383 and 384: Anales de la Universidad 387 un des
- Page 385 and 386: Anales de la Unícersidad 389 Esa p
- Page 387 and 388: Anai'efi de la Universidad 391 resp
- Page 389 and 390: Anales de la Universidad 393 jo, es
- Page 391 and 392: Anales de la Universidad 395 Si en
- Page 393 and 394: Anales d^. la Universidad 397 repar
- Page 395 and 396: Anales de la Universidad 399 arregl
- Page 397: 26. AMPUTACIÓN RÁPIDA DEL MUSLO
- Page 400 and 401: 404 Anales de la Universidad f-ciei
- Page 403: APENDICECTOMIAS DIFÍCILES
- Page 406 and 407: 410 Anales de la Universidad dificu
- Page 408 and 409: 412 Attdics ili' í. Ki áüii'nlo
- Page 410 and 411: 414 Anales de la Universidad hoja d
- Page 412 and 413: 416 Anales de (a Uiiioersidad media
- Page 414 and 415: 418 Anales de la Universidad cisió
370 Anales de la Universidad<br />
IV<br />
LA ENSEÑANZA PRÁCTICA.—LOS PROFESORES<br />
Li enseñanza, en general, se hace bien, y si en algunas<br />
materias resulta un poco débil, es más bien por et<br />
modo cómo se hace, que por otro motivo. Más de un Profesor<br />
se extiende en consideraciones de orden secundarioy<br />
deja de lado hechos y observaciones de importancia capital.<br />
El plan vigente de Enseñanza Secundaria responde,<br />
en primer término, á un plan de cultura, y por eso quedan<br />
descartadas de la enseñanza los detalles y particularidades,<br />
más propias para los que hacen exclusivamente<br />
trabajo intelectual y previo á las Facultades superiores<br />
y no á los que sólo persiguen la cultura <strong>del</strong> espíritu. Por<br />
ese motivo se han reducido los programas á su mínima<br />
expresión, facilitando su conocimiento á los estudiantes<br />
que se inician. Que el alumno aprenda poco pero bien,<br />
he ahí el desiderátum; que comprenda lo que estudie, que<br />
razone, se dé cuenta, explique y aprecie el valor de los<br />
conocimientos. Sin embargo, no siempre se procede en esa<br />
forma; en el estudio de la Historia Natural, por ejemplo,<br />
el Profesor se detiene en la explicación de una apófisis,<br />
en el detalle de un hueso, en el estudio de sus caras, de<br />
su forma, etc., pero no explica con mayor detención el<br />
funcionamiento <strong>del</strong> riñon ó la función <strong>del</strong> corazón ó <strong>del</strong><br />
hígado, cuyo conocimiento es el que más interesa al alumno<br />
para la vida práctica. Igual cosa cabe decir de la Física<br />
y de la Química. Estudiantes muy distinguidos, sobresalientes<br />
algunos, repetían de memoria la historia de<br />
un fenómeno, una combinación ó una reacción, sin darse<br />
cuenta, en muchos casos, de la ley que rige esos fenómenos<br />
y esas combinaciones.<br />
Las clases prácticas dictadas en esa forma importan un<br />
verdadero descalabro, puesto que el estudiante pierde su.