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LOS TURISTORES KUNAS. ANTROPOLOGÍA DEL TURISMO ÉTNICO EN PANAMÁ 149
CAPÍTULO 7
d) “Cabañas Lucio”
“Es un proyecto situado al lado del muelle, integra una habitación
con dos camas dobles, cuesta 10$ el alojamiento y 20$ el paquete completo.
Lleva un año funcionando. Fue abierto por un trabajador de Yandup
y sirve como complemento en el caso de que Yandup se llene. Es
de madera y tiene un piso de altura, con vistas al mar y a al litoral. Es
un proyecto familiar de la familia de Lucio Arosemena, y en la parte de
abajo tienen un negocio de venta de gasolina, que pretende convertirse
en un restaurante” Diario de campo XP XP, 21-01-2010).
Zona de Akuanusadup (Narganá)
a) “Digir Tupu”
Este es un proyecto de turismo comunitario situado en el antiguo aeropuerto
de la comunidad de Digir (Tigre), al oeste de la comunidad y separada de la
misma. El proyecto nació en el año 1995 con la construcción de dos cabañas y
el apoyo de “Expediciones Tropicales” en la realización de algunas actividades
turísticas, como el kayak. La comunidad, que cumplió un siglo de existencia
el 4 de febrero del 2008, tiene 870 habitantes censados según datos oficiales
del 2006. En el 2005 y con financiamiento de CODESTA, una agencia ecoturística,
construyeron ocho cabañas. De acuerdo con el secretario general de la
Administración, Eugenio Mesa, de 39 años de edad, la idea nació del sahila
Manuel Castillo, quien contruyó cabañas reutilizando el terreno del aeropuerto,
cerrado por los accidentes que ocurrían. El proyecto al ser comunitario se
organiza de la siguiente forma: todos los miembros de la comunidad trabajan
rotativamente, siempre con un periodo de preparación previa. Los beneficios
del proyecto son parte para gastos de administración y salarios de los trabajadores,
pero en mayor proporcion para el congreso local. El proyecto cuenta
con paneles solares, acueducto y un restaurante. En sus ocho cabañas puede
acoger 22 turistas y además tienen un camping para mochileros. Seis de sus
cabañas cuentan con camas y dos con hamacas. Aunque la idea inicial era
que los turistas vendrían sobre todo de los EE.UU., los turistas proceden en
su mayor parte de Europa (Francia, España…) y luego de México y EE.UU por
ese orden; muchos son mochileros que se quedan entre dos y cinco días. Durante
el primer día los turistas, que suelen llegar a través del aeropuerto de
Narganá, descansan, hablan de la comida, saludan al sahila, van a la playa y
presencian la actuación del grupo de danzas. El segundo hacen un tour durante
el cual - a diferencia de otros proyectos, se nos cuenta - los turistas llevan
salvavidas. En los primeros meses del año 2006 los visitantes se distribuyeron
mensualmente de la siguiente forma:
• Enero: 23
• Febrero: 14
• Marzo: 26
• Abril: 9
Un hito importante son las fiestas de octubre, en las cuales se homenajea al
líder kuna Iguadinguipi (el 10 de octubre), un maestro que gobernó la comunidad
por 45 años y que hizo obras en el aeropuerto, construyó la escuela y
fundó el grupo de danzas kunas de la comunidad. Los turistas suelen visitar
el cementerio, las islas Bugadu, Maoquí (Cayos Holandeses) y el museo de Ticantiquí.
El proyecto tiene restaurante y la isla sirve como “comunidad típica”
en la visita de los turistas procedentes de la vecina Narganá. El turista es visto
como alguien con dinero que va buscando artesanía. Un detalle interesante es
que el proyecto tiene un buzón de sugerencias y otro es que en cada cabaña
tiene un panel informativo con las reglas de comportamiento a adoptar y respetar.
Los guías hablan en kuna y español, y hay cinco comuneros que hablan
inglés. La promoción se realiza a través de guías escritas como el Lonely Planet,
un folleto, agencias de viajes de la ciudad de Panamá y divulgación en el
aeropuerto de Narganá. La comunidad dispone de un bote grande que transporta
viajeros y mercancías desde Miramar (litoral de la provincia de Colón).
Los precios son muy módicos para occidentales y cobran 10 $ por persona, 15
$ por pareja y 20-25 $ por familia. La alimentación no está incluida y cuesta 2
$ el desayuno y 3,5 $ la comida. Las excursiones tienen tarifas en función de
la distancia a recorrer y la variación de los precios del petróleo. Otro servicio
turístico importante es el apoyo a los veleros, que pagan 3 $ por el anclaje
y la entrada en la comunidad. Subrayar que el proyecto recibe el apoyo de la