Baja mortalidad en niños con leucemia y sicklemia - Juventud ...
Baja mortalidad en niños con leucemia y sicklemia - Juventud ...
Baja mortalidad en niños con leucemia y sicklemia - Juventud ...
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
02<br />
OPINIÓN<br />
VIERNES 22 DE MAYO DE 2009<br />
juv<strong>en</strong>tud rebelde<br />
COLOQUIANDO<br />
LUIS SEXTO<br />
sexto@<strong>en</strong>et.cu<br />
Cosas ya dichas<br />
LA excepción debe <strong>con</strong>vertirse<br />
<strong>en</strong> regla, dijo una vez Fidel. Y uno<br />
interpreta que no ha de ser al<br />
revés: la regla como excepción,<br />
que es como andar de espaldas,<br />
como ir <strong>en</strong> <strong>con</strong>tra de cuanto fuimos,<br />
somos y queremos ser. Lo<br />
que pasó ayer, ha definido algui<strong>en</strong>,<br />
es historia. Lo que pasa<br />
hoy es política, acción y también<br />
omisión. Ahora bi<strong>en</strong>, <strong>en</strong>tre ayer y<br />
hoy existe un <strong>en</strong>cad<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to,<br />
una <strong>con</strong>tinuidad…<br />
Antes de proseguir he de recordar<br />
que quise int<strong>en</strong>tar responder,<br />
hace dos semanas, algunas<br />
preguntas e invité, para que me<br />
ayudaran, a los lectores de esta<br />
columna. Las respuestas son variadas,<br />
e incluso algunas plantean<br />
las mismas interrogantes, porque<br />
numerosos remit<strong>en</strong>tes cu<strong>en</strong>tan<br />
historias parecidas a la que pres<strong>en</strong>té<br />
el 8 de mayo.<br />
Por qué, preguntaba yo <strong>en</strong>tonces,<br />
un trabajador ha de esperar<br />
16 meses para que la administración<br />
de su c<strong>en</strong>tro laboral obedezca<br />
un fallo judicial. ¿Por qué<br />
pasa? Y si yo hubiera t<strong>en</strong>ido dudas<br />
de que esta práctica dilatoria<br />
más que a la excepción parece<br />
derivar hacia la regla, los m<strong>en</strong>sajes<br />
recibidos me lo habrían casi<br />
<strong>con</strong>firmado. Suel<strong>en</strong> pasar las dilaciones<br />
o las in<strong>con</strong>secu<strong>en</strong>cias<br />
legales. Y claro, si pasan y nada<br />
pasa como <strong>con</strong>trapartida correctiva,<br />
es lógico que cualquier ciudadano<br />
se si<strong>en</strong>ta compelido a comunicarle<br />
a algui<strong>en</strong> su problema<br />
y su in<strong>con</strong>formidad.<br />
A ciertos juicios les inquieta, sin<br />
embargo, que los periódicos abord<strong>en</strong><br />
estos temas y publiqu<strong>en</strong> las<br />
quejas de los lectores. El periodista<br />
—recomi<strong>en</strong>dan— debe decirles<br />
que hay que resistir, que la patria<br />
bloqueada exige aplazar necesidades<br />
y querellas… No juego. Eso<br />
a<strong>con</strong>sejan algunos para evitar que<br />
la «angustia se exti<strong>en</strong>da». Desde<br />
luego, hay que acostumbrarse a oír<br />
criterios distintos, a asumir la sociedad<br />
socialista como la interrelación<br />
social, dialógica y solidaria <strong>en</strong>tre<br />
una libertad y otra libertad, porque<br />
proscribir un criterio que nos<br />
parezca disparatado se aparta de<br />
la regla inclusiva que nuestro país<br />
se ha impuesto como uno de sus<br />
ideales.<br />
Pero un criterio así, tan reductor<br />
del espacio democrático, suscita el<br />
criterio opuesto y la <strong>con</strong>secu<strong>en</strong>te argum<strong>en</strong>tación.<br />
Esa aludida angustia<br />
no será nunca causada por la publicación<br />
de la carta, sino más bi<strong>en</strong><br />
por el <strong>con</strong>flicto sin resolver. ¿Sabe<br />
usted qué significa para un trabajador<br />
saber que los tribunales han<br />
legitimado su reclamación y que<br />
una voluntad casi irracional le niega,<br />
mediante escamoteos y sorderas<br />
culposas, el derecho? Evid<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te<br />
eso g<strong>en</strong>era angustias, inseguridad.<br />
Pero lo es<strong>en</strong>cial es tratar de responder<br />
por qué pasan, <strong>con</strong> una frecu<strong>en</strong>cia<br />
que puede y debe preocupar,<br />
esas neglig<strong>en</strong>cias tan agobiantes<br />
y desmovilizadoras para la <strong>con</strong>ci<strong>en</strong>cia<br />
de los ciudadanos. Si algo<br />
se está haci<strong>en</strong>do <strong>con</strong>tra esas actitudes,<br />
uno no se ha <strong>en</strong>terado. Y por<br />
la recurr<strong>en</strong>cia de las quejas, uno<br />
cree, <strong>con</strong> la cautela de rigor, que la<br />
impunidad los b<strong>en</strong>eficia y que los tribunales<br />
no ti<strong>en</strong><strong>en</strong> los medios para<br />
hacerse respetar. Para mí, responder<br />
implica volver a decir cosas ya dichas.<br />
¿Qué <strong>con</strong>vierte a una administración,<br />
un <strong>con</strong>sejo de dirección, <strong>en</strong><br />
figuras supremas, inexorables, a<br />
prueba de cualquier cuestionami<strong>en</strong>to?<br />
La burocratización. A estar s<strong>en</strong>tado<br />
<strong>en</strong> una posición tan rígida que<br />
solo permite mirar hacia arriba y<br />
hacia abajo <strong>en</strong> una línea vertical inmodificable.<br />
Ni siquiera las instituciones<br />
dispuestas <strong>en</strong> nuestro ord<strong>en</strong><br />
social y político pued<strong>en</strong> a veces evitar<br />
o <strong>en</strong>derezar los desajustes. ¿Puede<br />
influir la sección sindical? ¿Puede hacer<br />
prevalecer ese papel de <strong>con</strong>trapartida<br />
que hace muchos años Fidel<br />
hizo recordar que les correspondía a<br />
los sindicatos <strong>en</strong> la sociedad revolucionaria?<br />
En fin, cuanto más prospere la verticalidad<br />
autoritaria <strong>en</strong> detrim<strong>en</strong>to de<br />
la horizontalidad democrática, cuanto<br />
más crean algunos que administrar o<br />
gobernar es mandar —ese grito que<br />
Martí <strong>con</strong>d<strong>en</strong>ó <strong>en</strong> lo político—, más<br />
se increm<strong>en</strong>taría el riesgo de perder<br />
la <strong>con</strong>tinuidad <strong>en</strong>tre ayer, la historia, y<br />
hoy, la política, la acción. Y por tanto<br />
ciertas <strong>con</strong>ductas podrían olvidar que<br />
la resist<strong>en</strong>cia ti<strong>en</strong>e un s<strong>en</strong>tido, una<br />
finalidad: ser mejor que ayer, porque<br />
si no andaríamos al revés: de espaldas<br />
a nuestros ideales de justicia,<br />
indep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia, bi<strong>en</strong>estar. Esto es,<br />
<strong>con</strong>tra ellos. Y eso ni como excepción<br />
puede pasar.<br />
ACUSE DE RECIBO<br />
JOSÉ ALEJANDRO RODRÍGUEZ<br />
acuse@jrebelde.cip.cu<br />
Destape <strong>en</strong> las guaguas<br />
GUILLERMO Fernández de Bulnes (Ayestarán<br />
226, apartam<strong>en</strong>to 6, Cerro, Ciudad de La Habana)<br />
escribe para alertar de una nueva modalidad<br />
de indisciplina social que se está registrando<br />
<strong>en</strong> la medida que arrecian los calores:<br />
personas que sub<strong>en</strong> a los ómnibus sin camisa<br />
y hasta <strong>en</strong> trusa.<br />
Según Guillermo, esta especie de «destape»<br />
no solo se observa <strong>en</strong> guaguas que van o vi<strong>en</strong><strong>en</strong><br />
de las playas, sino <strong>en</strong> cualquier ruta que se<br />
mueve por el c<strong>en</strong>tro de la ciudad. «Resulta que<br />
usted va al trabajo o sale de él, y se expone a<br />
los sudores de los “sin camisa” y los que van<br />
<strong>en</strong> trusa», señala.<br />
Con razón, el lector está muy preocupado<br />
acerca de los ribetes que pueda alcanzar tal<br />
t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia. «Si al primer brote de indisciplina no<br />
se ataja —sosti<strong>en</strong>e—, cuando pasa el tiempo<br />
se <strong>con</strong>vierte <strong>en</strong> un mal difícil de erradicar. Y<br />
ejemplos hay de sobra».<br />
El asunto es muy serio, porque ya no solo<br />
<strong>en</strong> los ómnibus pres<strong>en</strong>ciamos esas manifestaciones.<br />
Hace un bu<strong>en</strong> tiempo que se han relajado<br />
las costumbres. Tales semidesnudeces<br />
siempre han sido propias de áreas de playa,<br />
pero lo inaudito es que hoy, <strong>en</strong> la capital cuba-<br />
na, hay adultos que <strong>en</strong>tran a cualquier sitio sin<br />
camisa. Y se lo permit<strong>en</strong>.<br />
Los he visto <strong>en</strong> cafeterías, ti<strong>en</strong>das y hasta<br />
<strong>en</strong> cines. El colmo son los que van a la<br />
<strong>con</strong>sulta del médico <strong>con</strong> escasa indum<strong>en</strong>taria.<br />
Y lam<strong>en</strong>tablem<strong>en</strong>te no <strong>en</strong> todos los sitios<br />
se les llama la at<strong>en</strong>ción o se les impide el<br />
acceso.<br />
Hay que fr<strong>en</strong>ar esa t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia, porque el<br />
vestir es una <strong>con</strong>v<strong>en</strong>ción social, que debe<br />
expresar también respeto al prójimo.<br />
«MULTAS» AL PASAJE<br />
De otras irregularidades <strong>en</strong> los ómnibus de<br />
la capital versa la carta que <strong>en</strong>vía Lianet García<br />
Rodríguez, vecina de Soledad 378, <strong>en</strong>tre Cuarta<br />
y Sexta, reparto El Roble, <strong>en</strong> el municipio de<br />
Guanabacoa.<br />
La remit<strong>en</strong>te cu<strong>en</strong>ta que a diario se traslada<br />
desde su domicilio al Vedado, donde labora.<br />
Y aunque el transporte desde Guanabacoa<br />
ha mejorado <strong>con</strong> los nuevos ómnibus, ella<br />
si<strong>en</strong>te insatisfacciones <strong>con</strong> el trabajo de ciertos<br />
choferes y <strong>con</strong>ductores.<br />
Ejemplifica <strong>con</strong> la ruta 195, que toma a diario:<br />
«Los <strong>con</strong>ductores, cuando las personas les<br />
dan un peso para que cobr<strong>en</strong> el pasaje, no les<br />
dan el vuelto. Si das un billete de cinco pesos<br />
o de diez, te dan el vuelto de cuatro o de nueve,<br />
pero no los 60 c<strong>en</strong>tavos restantes.<br />
«Se hac<strong>en</strong> los “chivos locos”, como decimos<br />
<strong>en</strong> bu<strong>en</strong> cubano —refiere—. Pero cuando<br />
se les pide el vuelto, se pon<strong>en</strong> bravos y te tratan<br />
<strong>en</strong> muy mala forma. Junto a todo eso no<br />
dejo de m<strong>en</strong>cionar la grosería y la falta de respeto<br />
<strong>con</strong> que tratan al público, dici<strong>en</strong>do hasta<br />
malas palabras, y sabi<strong>en</strong>do que <strong>en</strong> la guagua<br />
viajan <strong>niños</strong> y ancianos».<br />
Lianet se pregunta: «¿El pasaje de la guagua<br />
cuesta 40 c<strong>en</strong>tavos o un peso? ¿Por qué<br />
ellos se pon<strong>en</strong> bravos y de muy mala forma<br />
cuando los pasajeros exig<strong>en</strong> su derecho y les<br />
reclaman el vuelto?».<br />
Re<strong>con</strong>oce la lectora que se viv<strong>en</strong> mom<strong>en</strong>tos<br />
difíciles, pues el dinero no alcanza. Pero<br />
<strong>con</strong>sidera que ellos ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que darse cu<strong>en</strong>ta<br />
de que todo el mundo está igual, y que ese<br />
dinero es el resultado del sacrificio de cada<br />
persona; por lo cual no ti<strong>en</strong><strong>en</strong> ningún derecho<br />
a quedarse <strong>con</strong> él.<br />
Aunque ella ejemplificó <strong>con</strong> la ruta que<br />
aborda diariam<strong>en</strong>te, <strong>con</strong>oce que tal situación<br />
no es privativa de la 195. Por eso llama a la<br />
reflexión a choferes y <strong>con</strong>ductores <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral.<br />
«Para trabajar <strong>con</strong> público se requiere educación<br />
y respeto, pues gran parte de la población<br />
dep<strong>en</strong>de del transporte urbano. No t<strong>en</strong>emos<br />
por qué soportar la falta de respeto y la<br />
mediocridad de personas a las cuales solo les<br />
importa aprovecharse de los demás ciudadanos»,<br />
<strong>con</strong>cluye.<br />
La tercera misiva la <strong>en</strong>vía Lourdes Margarita<br />
Machado, resid<strong>en</strong>te <strong>en</strong> Edificio 1, apartam<strong>en</strong>to<br />
10, reparto B<strong>en</strong>gochea <strong>en</strong> la ciudad de<br />
Santa Clara: el 8 de mayo su hermano le <strong>en</strong>vió<br />
un giro por el Día de las Madres. El jueves 14<br />
aún ella no lo había recibido. Llamó a la zona<br />
postal Santa Clara 3 y le dijeron que allí no<br />
había nada.<br />
Su hermano reclamó <strong>en</strong> La Habana y le<br />
aseguraron que estaba <strong>en</strong> Santa Clara. Ella<br />
vuelve a llamar a Santa Clara 3, y les dio el<br />
número del giro. Entonces le comunicó la<br />
empleada que se había trabado <strong>en</strong> la computadora,<br />
y que eso era frecu<strong>en</strong>te. Eso fue el 15<br />
de mayo, y el 18, cuando ella me escribió, aún<br />
no lo había recibido. Es la segunda vez que<br />
sufre tal percance. ¿Por qué?<br />
DIARIO DE LA JUVENTUD CUBANA<br />
Fundado por Fidel el 21 de octubre de 1965<br />
DIRECTOR: Rogelio Polanco Fu<strong>en</strong>tes<br />
SUBDIRECTORES EDITORIALES:<br />
Pelayo Terry Cuervo, Herminio Camacho Eiranova<br />
y Ricardo Ronquillo Bello<br />
SUBDIRECTOR ADMINISTRATIVO:<br />
Enrique Saínz Alonso<br />
REDACCIÓN: Territorial y G<strong>en</strong>eral Suárez,<br />
Plaza de la Revolución, Ciudad de La Habana, Cuba.<br />
APARTADO: 6344<br />
ZONA POSTAL: La Habana 6, CP: 10698<br />
PIZARRA: 882-0155, 882-0346, 882-0789<br />
TELÉFONO ATENCIÓN A LECTORES: 881-8265<br />
FAX: 883-8959<br />
CORREO ELECTRÓNICO: lectores@jrebelde.cip.cu<br />
INTERNET: www.juv<strong>en</strong>tudrebelde.cu<br />
ISSN: 0864-1412<br />
Impreso <strong>en</strong> el Combinado<br />
de Periódicos Granma.