contenido - Yacht Club Argentino
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logramos pescar nada en el mar, pero tuvimos la suerte<br />
de que un pescador del pueblo nos vino a regalar una<br />
especie de sardinas que las acababa de pescar. Ni lo<br />
dudamos y las hicimos a la marinera esa misma noche.<br />
Exquisitas. Al día siguiente seguimos en camino, dejando<br />
Nueva Escocia y empezando a subir latitudes entre<br />
Terranova y Newfoundland.<br />
El título que nació en la cubierta del Nordwind.<br />
Zarpamos en la mañana del 4 de julio rumbo a<br />
Lunemburg, haciendo escala en un fondeadero que se<br />
encontraba a unas , como para no irnos de Maine sin<br />
conocer unas de las zonas más lindas para navegar y<br />
aprovechamos para ir amarinando el barco. Al día<br />
siguiente levamos ancla a las 6 de la mañana y luego de<br />
dos días de navegación llegamos a Lunemburg, un<br />
pueblito de pescadores en Nueva Escocia, Canadá, el<br />
cual fue nombrado patrimonio de la UNESCO. Allí se<br />
encontraba el famoso Bluenose II que es la réplica de la<br />
famosa goleta, la más rápida de América en los años 30.<br />
Era un buen fondeadero y el pueblo muy pintoresco, así<br />
que aprovechamos para quedarnos ahí a esperar al resto<br />
de la tripulación y hacer los últimos trabajos a bordo<br />
antes de empezar nuestra primera gran etapa.<br />
El día 15 de julio llegó el resto de la tripulación en auto<br />
desde los Estados Unidos. Andrew el estadounidense<br />
trajo consigo su rifle, que por disposiciones del gobierno<br />
canadiense se debe portar en caso de bajar a tierra, por<br />
los numerosos casos de ataques de osos polares, que<br />
son los mamíferos carnívoros terrestres más grandes.<br />
Al segundo día de navegación soportamos vientos<br />
intensos como muestrario de lo que nos esperaba más<br />
adelante. Tuvimos la primera avería de importancia, el<br />
enrollador de genoa se trabó a mitad de camino y subí al<br />
mástil para verificar el problema. Cuando llegué al tope,<br />
descubrí que al estay proel se le habían cortando 4 hilos.<br />
Bajé con la mala noticia. De inmediato nos pusimos a<br />
pensar cómo y dónde repararlo. No teníamos tiempo<br />
para volver atrás, ciudades grandes por delante<br />
tampoco. Así que la decisión fue ir a una factoría<br />
pesquera que estaba a unas 150 millas al norte y allí<br />
tratar de conseguir un cable extra y ponerlo como un<br />
segundo estay, el cual nos serviría para poder<br />
engarruchar una trinquetilla que teníamos de backup.<br />
Tomamos puerto a la madrugada. Ahí empezó una<br />
“operación comando”. Mientras unos se fueron hasta un<br />
pueblo a 10 km de ahí para buscar el cable, otros<br />
empezamos a arreglar el riel y la driza que se habían<br />
enroscado, preparando todo para cuando nuestros<br />
compañeros volviesen. Además se aprovechó un camión<br />
cisterna de combustible diesel, cargando unos 1200 lts<br />
para hacer el cruce a Groenlandia. Terminamos la<br />
instalación del nuevo estay con las ultimas luces del día.<br />
Comimos algunas verduras frescas y pescado<br />
obsequiados por los habitantes del lugar, que venían a<br />
ver nuestro barco como gran acontecimiento del lugar,<br />
destacándose un par de bacalaos que esa noche le<br />
dimos un feliz fin. Descansamos tocando diana a las 6 de<br />
la mañana.<br />
Nevada nocturna de verano.<br />
Con la tripulación completa, el 17 de julio levantamos<br />
fondeo y nos dirigimos hacia Halifax con una niebla<br />
cerrada, apenas 50 mts. de visibilidad. A puro motor y<br />
con los ojos bien abiertos. Llegamos al medio día a una<br />
de las ciudades más grandes de Canadá. Amarramos en<br />
el muelle público y aprovechamos a buscar las últimas<br />
cartas de navegación, visitar su museo marítimo donde<br />
están algunos restos del Titanic, ya que de ahí salieron<br />
los buques de rescate, y hacer la última compra de<br />
víveres. Al final del día nos fuimos a fondear a una bahía<br />
del otro lado de la ciudad para salir temprano a la<br />
mañana siguiente. El próximo destino fue Luisburg<br />
donde llegamos luego de dos días de navegación. No<br />
34 El <strong>Yacht</strong> diciembre 2012