contenido - Yacht Club Argentino

Foto: Arnaud Letresor
esa fecha sea más angosto, para cruzar la Zona rápido
porque sus calmas, inestabilidad y chubascos dificultan el
avance de un velero con un solo tripulante para hacer todos
los cambios y maniobras necesarias.
Cruzado el Ecuador, deben esquivar las calmas del
Centro de Alta Presión Permanente de la Isla Santa
Helena en el Golfo de Guinea que influye en los vientos
de hasta nuestras costas. Más al Sur en Latitudes de 40°
aparecen los vientos fuertes del Oeste que permiten
trasponer el Cabo de Buena Esperanza y entrar al cruel
Océano Indico que se extiende hasta Tasmania al SE de
Australia. Para acortar la distancia navegada, los
participantes siguen una derrota ortodrómica por todo
el Pacífico hasta el Cabo de Hornos, describiendo una
inmensa curva combada hacia el Polo Sur. Son tres
semanas navegando por regiones de poca luz diurna,
mucho frío y humedad, con hielos flotando a ras del
mar, muy difíciles de avistar y que no registra el radar,
a los que se trata de evitar navegando por el Norte del
Límite de los Hielos Antárticos (por el peligro de colisiones
con hielo flotante, los IMOCA tienen una falsa proa y un mamparo de
colisión estanco). Todos al rodear el Cabo de Hornos
festejan la superación de la peor parte de la regata. Pero
primero se deben sortear los problemas del Atlántico
Sur, como pamperos y temporales frente a nuestras
costas, más la corriente en contra con los Norestes
frente a Brasil. A pesar de esto, los ánimos mejoran
pues se navega hacia el calor y el sol del Trópico. Por
casi 5000 millas, el Atlántico tropical presenta todo su
colorido estival con vientos y olas más suaves. Otra vez
se debe resolver el cruce de la Zona de Convergencia
Intertropical y del Ecuador.
Ya en el Hemisferio Norte, se van alejando del calor y
del sol y van desandando el trayecto inicial hasta la
llegada si es que han cruzado la ITCZ por el mismo
meridiano. Si han ocurrido cambios en la ITCZ, el cruce
será distinto con otras estrategias según sea más
cercano a Brasil o al Africa, pero en general todos tratan
de cruzar entre Noronha y Ascención siguiendo sobre el
abismal central del Atlántico hasta dejar las Azores por
estribor y de allí derivar derecho hacia la llegada por
afuera del Golfo de Vizcaya.
LOS BARCOS
Los IMOCA (International Monohull Open Class Association) OPEN
60 son monocascos ultralivianos de carbono, desplazan 8/9
tons. con mangas máximas retrasadas que miden 6 mts.
(1/3 de la eslora de 18 metros). Utilizan timones de dos
palas retráctiles, quillotes ladeables de 4,50 mts. con un
bulbo de 3 tons, dos orzas “sable” (para reponer plano lateral
cuando se ladea el quillote al máximo), botalón en proa para los
spinnakers asimétricos, dos o tres estays de enrollar, cinco
tanques de asiento para 5 tons de agua, mástil de carbono,
de 30 mts. sobre cubierta con 300 m 2 de velas en ceñida y
600 m 2 en francos.
LA FLOTA DE LA 7ª VENDÉE GLOBE
Foto: Olivier Blanchet
De los 20 participantes hay uno, el CHEMINÉES
POUJOULAT del suizo Bernard Stamm que ha sido
diseñado por nuestro consocio Juan Koyoumdjian. Hay seis
participantes con diseños de van Petegen, Prevost y
Verdier. Otros cinco barcos son proyectos del estudio Farr.
20 El Yacht diciembre 2012