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que el principio de igualdad ante la
ley, así como el principio de igualdad
entre extranjeros y nacionales son
principios tutelados en los artículos
33 y 19 de la Constitución Política,
respectivamente.
E.- Disposiciones de la
Constitución Política incluidas
como medidas disconformes
Algunos opositores del TLC han
argumentado que dado que el Anexo
de medidas disconformes incluye
como tales a algunas disposiciones
constitucionales -como es el caso del
artículo 121 de la Constitución Política
citado en relación con los servicios
inalámbricos- el TLC violenta la
jerarquía de las fuentes del Derecho
estipuladas en el artículo 7 de la
Constitución, e implica que esta
última deberá “adaptarse” a las
obligaciones del TLC, cuando debería
ser al contrario.
Este argumento, que para un lector
no familiarizado con el derecho
internacional podría en un principio
parecer convincente, en realidad es
un serio error de interpretación del
TLC. La inclusión de aquellas
disposiciones constitucionales que
pudieran tener algún grado de
disconformidad con las obligaciones
de este Acuerdo comercial, más que
buscar que la Constitución se adapte
a este último, buscan lo contrario, es
decir, ajustar las obligaciones
asumidas por Costa Rica en el
contexto de TLC al orden
constitucional, por las siguientes
razones:
Al interpretar un tratado
internacional, es fundamental evitar
confundir dos cosas que son
totalmente diferentes: una es la
aplicación del derecho internacional a
nivel externo -y la responsabilidad
que emana de un Estado a otro como
consecuencia del incumplimiento de
una obligación de derecho
internacional- y otra es el orden de
prelación jurídica de un tratado a
nivel del derecho doméstico.
Los tratados internacionales tienen
efectos en dos planos jurídicos
distintos. Un primer plano es a nivel
internacional, plano en el que se
regulan las relaciones entre Estados y
en el cual un tratado establece
derechos y obligaciones entre las
partes -derechos y obligaciones que
son además exigibles en tribunales
internacionales-. Un segundo plano
en el cual los acuerdos
internacionales tienen efectos
jurídicos es en el plano del derecho
doméstico de las Partes signatarias.
En este caso, el contenido de un
tratado normalmente “se incorpora”
en el ordenamiento jurídico interno
de las partes conforme a los
parámetros establecidos en sus
respectivas Constituciones.
Los países pueden incorporar los
convenios internacionales a su
derecho interno básicamente de dos
formas: para algunos de ellos, basta
la aprobación legislativa del convenio
Revista Rhombus ISSN 1659-1623 Vol. 2, Especial N° 3. Julio 2006