Cuaderno Derecho Penitenciario N 15 - Ilustre Colegio de ...

Judicial 6/1985 de 1 de julio, que están exentas
del recurso de apelación las resoluciones del Juez
de Vigilancia cuando se hayan dictado resolviendo
recurso contra resolución administrativa, que es lo
que ocurre en el presente caso en el que al interno
recurrente se le instruyó expediente disciplinario
en el que recayó una sanción también disciplinaria
contra la que se formuló recurso que resuelve
el auto combatido del Juez de Vigilancia Penitenciaria,
y contra el que como antes hemos dicho
no cabe recurso de apelación, por ello procede
desestimar la queja formulada por el interno recurrente.
Auto 2638/06, 7 de junio de 2006, JVP nº 3 de
Madrid. Exp. 1871/99.
[175] Copia sellada.
La razón por la que no debe acogerse su pretensión
consiste en que el recurrente no alega cuál es
la indefensión, en concreto, que ha significado para
él el hecho de que en el Centro penitenciario no
selle la copia de los escritos de los internos que
deba quedar en poder de éstos, ni tampoco qué
merma de derecho fundamental haya podido representar,
siendo así que este Tribunal carece de atribuciones
para intervenir en la organización del
establecimiento o para dar órdenes directas relativas
a la misma.
El recurrente invoca el Reglamento Penitenciario
en apoyo de sus alegaciones. Pero ha de tener presente
que el supuesto concreto a que el artículo
50.2 hace expresa referencia es el de la copia sellada
de los recursos que se interpongan para ante la
autoridad judicial.
Por otra parte, el informe que ha emitido el Director,
por orden del Juez de Vigilancia y que consta
en el expediente con fecha 9 de febrero, da cuenta
detallada del procedimiento seguido en garantía del
cumplimiento del deber de dar curso legal a todos y
cada uno de los escritos presentados por los internos
a las diferentes autoridades tanto judiciales
como administrativas, del que no puede concluirse
ninguna arbitrariedad.
La alegación del interno de que no se ha dado
curso a sus requerimientos y hojas de designación
de Letrado no ha resultado debidamente acreditada,
pues se apoya tan sólo en sus manifestaciones,
que se encuentran en contradicción con lo informado
por el centro penitenciario, al que le consta la
tramitación de una instancia al Colegio de Abogados
de Valladolid, en sobre cerrado, con fecha
13.04.05 y el asesoramiento a los condenados
sobre los cauces a través de los cuales se deben
tramitar sus concretas instancias. Es posible, de
acuerdo con lo relatado por el apelante en sus alegaciones
manuscritas de 4 de junio de 2005, que
haya habido alguna discrepancia con algún funcionario
a propósito del modo en que debía cursar ese
tipo de instancias para alcanzar eficacia, pero tal
actuación no implica abuso de poder ni vulneración
del derecho del interno.
En cuanto a la pretendida negativa del centro a
entregar copias selladas de los documentos presentados,
debe tenerse en cuenta, como ha señalado
en otras ocasiones la Sala, que tan sólo se
hace expresa referencia a la entrega de copias
selladas en el artículo 50.2 de la Ley Orgánica
General Penitenciaria cuando se trata de la interposición
de recursos, sin que exista obligación legal
en los demás casos de entregar copia sellada del
escrito presentado en pliego cerrado, bastando
como justificante el oportuno resguardo o recibo.
Por tanto, puesto que en la queja que aquí se
valora el escrito presentado no era de interposición
de recurso, el Tribunal, fuera de la prescripción
legal, carece de atribuciones para intervenir en la
organización del establecimiento o para dar órdenes
directas relativas a la misma.
Auto 985/07, 28 de febrero de 2007, JVP nº 3 de
Madrid. Exp. 578/02.
[176] No importa la denominación,
sino el fin, comprobar el número
de internos.
Se formulo queja por el interno que fue estimada
por el órgano jurisdiccional de que además de los
recuentos ordinarios que establece el artículo 67.1
XVIII
RECUENTOS
del Reglamento Penitenciario, coincidentes con los
relevos de personal de vigilancia, diariamente se
están realizando con el mismo carácter de ordinarios
otros recuentos que son extraordinarios, infringiéndose
la ley que no prevé éstos como medidas
diarias con horario fijo, sino que responden a otras
motivaciones.
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