Cuaderno Derecho Penitenciario N 15 - Ilustre Colegio de ...

te en el momento de denegarle el permiso el interno
no había cancelado una sanción por falta muy
grave, si bien la canceló mes y medio más tarde. El
argumento no es convincente por dos razones: porque
para cancelar una falta muy grave es preciso
no incurrir en nuevas faltas graves o muy graves
durante seis meses por lo que a la fecha de permiso
el penado había cumplido esa condición durante
más de cuatro; y sobre todo porque en un sistema
disciplinario particularmente intenso y extenso,
como obligadamente ha de ser el que rija en una
prisión, la comisión de una infracción, incluso muy
grave, no es de por sí demostrativa de mala conducta
y lo que la ley (art. 47) exige es que la conducta
no sea mala, sin imponer como requisito una
especial bondad de la misma, pues la conducta no
se refiere aquí a un acto aislado, como cuando se
habla de conductas típicas en el derecho penal,
sino a una forma global de comportarse que marque
una trayectoria claramente definida hacia valores
sociales y jurídicos. Y cuando a una infracción
aislada se suman la forma posterior correcta de
comportarse y la anterior y posterior de esforzarse
en ganar en cultura y en capacidad laboral, la trayectoria
que resulta del conjunto de esos factores
es positiva.
Auto 371/07, de 29 de enero. Exp. 366/05 del
JVP nº 3 de Madrid.
[143] Es criterio de esta Sala reanudar
los permisos cuando se
cancelan las sanciones.
El interno recurrente venía disfrutando desde
hace tiempo de permisos de salida autorizados por
este Tribunal que hubieron de suspenderse por
recaída en el consumo de estupefacientes y que
después, pasado un tiempo, se reanudaron (Auto
nº 1295/05, de 5 de mayo).
Nuevamente, el régimen de salidas hubo de suspenderse
por razón de la sanción disciplinaria en
que había incurrido el interno, según resulta del
expediente. Pero el informe emitido por el Centro
Penitenciario, a requerimiento de este Tribunal,
acredita que no tiene ninguna sanción sin cancelar,
habiendo cancelado el expediente disciplinario
490/05 el día 26 del mes de mayo pasado.
Es criterio de esta Sala, en consecuencia, el de
que procede reemprender otra vez las salidas de
permiso. El interno que está cumpliendo condena
por varios delitos de robo, alcanzará el año próximo
la fecha de tres cuartas partes de cumplimiento.
Alega ser la anterior la única sanción en que ha llegado
a incurrir en todo el tiempo de condena. También
alega haber hecho siempre buen uso de los
permisos disfrutados.
Todas éstas deben representar garantías razonables
de buen uso de la próxima salida.
Auto 4878/06, de 12 de diciembre. Exp. 509/06
del JVP nº 1 de Madrid.
[142] Cometer una falta hace un año
no puede identificarse con mala
conducta.
[144] Levantamiento de suspensión
si las analíticas dan negativo.
El penado está a punto de cumplir las tres cuartas
partes de la condena. Con ello la eficacia preventiva
de la pena, al menos en el orden intimidativo,
debe darse razonablemente por cumplida en
muy buena medida. Ha cometido una falta hace de
ello casi un año, lo que de ninguna manera puede
identificarse con el concepto de mala conducta
pues, por otro lado, trabaja y se esfuerza en controlar
su drogodependencia. No hay razones objetivas
para denegar el permiso
Auto 1110/07, de 7 de marzo. Exp. 278/06 del
JVP nº 3 de Madrid.
El interno ha disfrutado de permisos, pero en el
último concedido se acordó, por el Juzgado de Vigilancia
Penitenciaria suspender su efectividad hasta
cancelar la sanción o se sobresea el expediente
disciplinario abierto, situación que esta sala modificó
en el sentido de mantener el disfrute de dicho
permiso si las pruebas de detección de consumo de
tóxicos posteriores a junio de 2006 han dado resultado
negativo, quedando sin efecto en caso contrario.
En tal situación y teniendo en cuenta sus antecedentes,
hechos constar en anteriores resolucio-
67