Cuaderno Derecho Penitenciario N 15 - Ilustre Colegio de ...

[120] Cambio sustancial de las circunstancias.
El penado quebrantó un anterior permiso de salida.
De ello hace años como lo demuestra que entre
el cumplimiento del primer cuarto de la condena y
la mitad, no transcurrieron 2 años y tres meses
(cuarta parte de nueve años) sino más de seis
años. Ese quebrantamiento, lejano en el tiempo,
debe inspirar desconfianza y sería imprudente que
no lo hiciera, pero no puede considerarse una
razón definitiva en contra de la concesión de permisos,
si las circunstancias han cambiado. El penado
ha cumplido bastante más de la mitad de la condena
y cumplirá en este año dos tercios de la
misma. Cuenta con apoyo sentimental importante,
es consciente y así lo manifiesta de que la huida fue
un tremendo error y de que el camino correcto es el
buen uso de los permisos y la lucha por la progresión
de grado, se esfuerza por mejorar su cultura y
formación dentro del Centro: No son las mismas circunstancias
y por ello debe concederse permiso.
Con cargo al trimestre estudiado se concederán
ocho días de permiso en estas condiciones:
– Divididos en dos permisos de cuatro días.-
Recogida por algún allegado o familiar a la salida
del Centro.
– Presentación ante el Tribunal, sito en la calle
Santiago de Compostela n° 96, Metro Línea 7, estación
de Peñagrande, durante el primer permiso. -
Presentación ante la policía si así lo acuerda la
Junta de Tratamiento.
Auto 107/07, de 15 de enero de 2007, JVP nº 3
Madrid. Exp. 406/06.
[121] Existen bastantes elementos
positivos para reanudar los permisos.
El interno recurrente, que está cumpliendo una
condena de nueve años y un día de privación de
libertad por un delito contra la salud pública, quebrantó
un permiso de salida en el mes de julio de
2002 y el régimen de salidas hubo de suspenderse.
Es criterio de esta Sala, sin embargo, el de
que procede reemprender otra vez las salidas de
permiso. El interno alcanzará el año próximo la
fecha definitiva de cumplimiento. Alega haber rectificado
su comportamiento. Estar adscrito al programa
de tratamiento Punto Omega con buenos
resultados para la superación de la drogodependencia,
hasta el extremo de haber accedido al
módulo terapéutico; tener un destino de trabajo;
estar inscrito en la escuela y en actividades deportivas
y contar con un fuerte apoyo familiar. Todas
estas circunstancias deben representar garantías
suficientes de buen uso de la salida de permiso.
Es decir que concurren en este caso bastantes
elementos positivos a partir de los que iniciar la
preparación de la libertad definitiva, unidos a la
importancia que ésta ha adquirido por la proximidad
de la excarcelación definitiva. Pero dependerá
sobre todo de la decisión del propio recurrente,
que el permiso de salida represente sólo unos
días de libertad o el primer paso, ya sin retrocesos,
hacia la obtención de otros, como comienzo
de un nuevo proyecto de vida del que no vuelvan
a formar parte ni el delito ni la prisión. Se autorizará
por lo tanto el permiso solicitado, que tendrá,
con cargo al cuatrimestre estudiado, una extensión
de doce días y que se disfrutará dividido en
tres permisos de cuatro días cada uno, con la condición
de que un familiar acompañe al interno a la
salida y al reingreso al Centro penitenciario y con
las que considere oportuno añadir a ésta la Junta
de Tratamiento.
Auto 4932/06, de 15 de diciembre de 2006, JVP
nº 4 de Madrid. Exp. 371/06.
XVI-14
Buen uso de la libertad provisional
[122] Hizo buen uso de la libertad
provisional.
El penado cumple los requisitos legales para la
concesión de permisos. Además de ello, ha estado
en libertad provisional sin hacer mal uso de la
misma y cuenta con apoyo familiar.
Auto 1289/07, de 15 marzo. Exp. 18/07 del JVP
nº 1 de Madrid.
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