Cuaderno Derecho Penitenciario N 15 - Ilustre Colegio de ...

CUADERNOS DEDERECHOPENITENCIARIO
hasta 36, con independencia de que en la práctica
disfruten menos.
Las solicitudes de permisos no pueden ser estudiadas
a intervalos excesivamente separados (seis
meses, un año, etc.) ya que la evolución en el tratamiento
puede producirse en breve tiempo y, en tal
caso, no tiene sentido una espera prolongada.
Únicamente cuando la evolución del penado sea
claramente positiva y sin perspectivas razonables
de retroceso estaría justificado que los plazos fueran
más largos, en el entendido de que se trate de
conceder permisos, nunca de denegarlos.
El estudio de los permisos cada tres meses,
siempre que el cupo de días a considerar sea de 9
o 12 (según se trate de internos en segundo o tercer
grado), no sólo no es contrario a la regulación
penitenciaria, sino que permite un período de
observación razonable de la evolución del condenado
y un buen estudio de la Junta de Tratamiento,
al tiempo que presenta la ventaja de disminuir el
número de propuestas a emitir.
Auto 4521/06, de 7 de noviembre. Exp. 262/05
del JVP nº 2 de Madrid.
XVI-12
Interno clasificado en artículo 100.2 RP
[118] Carece de sentido denegar los
permisos.
El interno está en segundo grado pero con
variantes propias del tercero cuales las de salir los
fines de semana y tener la posibilidad de disfrutar
de 48 días de permisos al año. Así las cosas no
tiene sentido que el Tribunal deniegue los permisos.
Auto 2274/06, de 23 de mayo. Exp. 57/05 del
JVP nº 3 de Madrid.
XVI-13
Quebrantamiento de condena anterior
[119] Cercanía a las 3/4 partes y experiencia
de las graves consecuencias
negativas del mal uso.
El interno que recurre está cumpliendo una pena
de diez años, tres meses y un día impuesta por la
comisión de un delito de falsedad documental. Está
clasificado en segundo grado, no consta mala conducta
en prisión, ni partes o sanciones y, a pesar de
que no se trata de un ciudadano español de origen,
alega tener en España arraigo y familia y acogida a
efectos de permiso de salida en el domicilio de su
mujer y su hijo en Leganés (Madrid). La cuestión,
en este caso, ha radicado en la irregular trayectoria
penitenciaria del recurrente, del que consta quebrantamiento
de un permiso anterior, habiendo salido
del Centro penitenciario el día 7 de julio de 2004
y volviendo a reingresar el día 11 de mayo de 2005.
El Tribunal considera, no obstante, que procede
ahora reanudar la autorización de salidas de permiso.
La razón se encuentra en el hecho de que el
interno va a alcanzar dentro de unos meses la fecha
de las tres cuartas partes de cumplimiento de la
pena, es decir, el período de la condena que pudiera
haber sido el de la libertad condicional, y que
tiene ya experiencia de las graves consecuencias
negativas que ha acarreado el mal uso de un permiso.
De su decisión dependerá, a partir de ahora,
que la salida pueda ser seguida de otras y, en su
caso, de otros beneficios, o por el contrario que
hayan de interrumpirse de nuevo y prolongarse el
tiempo de privación de libertad.
Por otra parte, los informes actualizados sobre
la conducta del interno son positivos. Todo lo cual,
debe juzgarse garantía razonable de buen uso del
permiso de salida. El que ahora se concede tendrá
una duración de cuatro días, con cargo al trimestre
estudiado y las condiciones de que un familiar
acompañe al interno a la salida del Centro y de
que éste se presente diariamente durante el permiso
en la Comisaría de Policía más próxima a su
domicilio.
Auto 183/07, de 18 de enero de 2007, JVP nº 3
de Madrid. Exp. 350/06.
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