hacia un programa a largo plazo para la conservación del ... - Iccrom

Informe de la reunión, abril 2007
El trabajo en grupos permitió identificar con claridad cuáles eran las oportunidades y los
desafíos que limitan la obtención de condiciones óptimas y que impiden alcanzar la visión
planteada.
En términos generales, se considera que el estado actual del patrimonio cultural en América
Latina está relacionado con una serie de factores derivados tanto del contexto físico como
social. A nivel macro, los cambios globales, la gobernabilidad, los recursos, el turismo de
masa, la capacidad, la educación y la sensibilización, entre otros, son algunas de las
cuestiones que influyen en las condiciones evidenciadas hoy día en la región. Con relación a
los factores naturales, hay una diversidad de elementos ambientales, que varían en cada
lugar y entorno, que al interactuar promueven mecanismos físicos y químicos que alteran los
materiales de los bienes culturales. La escala en que estos factores inciden en la situación
patrimonial está relacionada con cada contexto, variando incluso dentro de las distintas
localidades de cada país. Para los fines de este informe, se ha decidido agrupar las
condiciones actuales en rubros temáticos, partiendo de aquellos asuntos transversales que
se vinculan con el cambio global, entendido como un fenómeno que abarca tanto procesos
naturales, como procesos económicos, sociales y culturales. Aun cuando esto va más allá de
lo que son las competencias de los profesionales del patrimonio, es esencial tener
consciencia de estos factores externos para comprender los desafíos que se presentan,
beneficiarse de las nuevas oportunidades y mitigar los impactos negativos en la medida de lo
posible.
Con respecto al cambio climático, se considera que éste tiene y continuará teniendo
impactos importantes en la conservación de los bienes culturales, ya que exacerbará las
condiciones existentes y, en muchos casos, no será posible atenderles integralmente o de
manera apropiada y a tiempo. El cambio climático no sólo generará un mayor número de
desastres naturales sino también procesos de migración que potencialmente tendrán
impactos en las culturas y en la continuación de tradiciones y formas de vida que promueven
la conservación del patrimonio. Como se mencionó, esto va más allá de las tareas de los
responsables de los bienes culturales o de los responsables de agencias culturales, y en
algunos casos de la esfera de acción de los gobiernos. Sin embargo, es importante entender,
anticipar y prepararse a los cambios como una inversión futura para la conservación.
Desde la perspectiva económica, la globalización representa tanto desafíos como
oportunidades para el patrimonio cultural. Algunos grupos de trabajo destacaron el potencial
de ciertos mecanismos actuales para mejorar la calidad de vida, pero no se puede dejar de
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