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MATHIAS VILLACÍS
Las dos nuevas promesas del Club
Santiago Malo Toral
“Mejorar depende siempre de las
ganas que le pongas”. Santiago Malo.
antiago es el último de tres hermanos varones,
tiene 13 años, asiste al colegio y
empezará pronto a cursar el noveno de
básica.
Inició sus entrenamientos en el tenis desde
una muy corta edad. “Lo que más me
gusta es jugar los partidos, hay mucha
adrenalina. He estado en juegos nacionales
en Guayaquil, no logré clasificar pero
aun así, llegué a las finales obteniendo
muy buenos puntajes”, relata el joven deportista,
quien además nos comenta que
tiene muchas expectativas para este año.
Rafael Nadal, de España, y Novak Djokovic,
de Serbia, son sus tenistas favoritos.
Santiago los admira por la tenacidad que
estos deportistas muestran en cada juego.
Comenzó a jugar siguiendo a uno de sus
hermanos mayores, quien no continuó
entrenando pero influyó fuertemente en
el gusto que adquirió Santiago posteriormente;
ahora sus sueños más inmediatos
son jugar y salir triunfante dentro de algún
torneo importante y, por supuesto, seguir
desarrollándose en su carrera como tenista.
“Para ser mejor se necesita más movimiento
dentro de la cancha, una actitud
más agresiva, estar siempre atento y
firme, así es más fácil moverse en caso
de recibir una bola rápida y también para
acomodarse de mejor manera” infiere el
tenista de 13 años.
Entrena dos horas y media al día, en época
escolar, mientras que en época de vacaciones
le dedica mucho más tiempo a
esta disciplina. Cuenta con todo el apoyo
de su familia, quienes lo incentivan a que
cada día sea mejor.
Santiago, como cualquier otro adolescente,
también trata de organizar su
tiempo para poder cumplir con todas las
tareas a él encomendadas, sin embargo
hay momentos en los que por más
que se esfuerce no alcanza a distribuir
su tiempo entre el colegio, los deberes,
el entrenamiento, la familia, los amigos y
para él mismo. Intenta ser como cualquier
chico de su edad, pero a pesar de tantas
responsabilidades juntas dice estar muy
contento con su participación dentro de
este emocionante deporte.
“Hay que ponerle muchas ganas, es
complicado, pero es un deporte muy
completo. Se necesita buen físico y buena
técnica. Para mejorar hay que hacerle
caso al entrenador; se debe saber obedecer
y también saber pasarla bien”, comenta
con una clara sonrisa.