PORTADA

CORTESÍA
realizado el mejor score de tu vida, pero
sí porque disfrutaste tanto esas cuatro
horas en el campo de golf que saldrás
aliviado a pensar cómo regresarás mañana
con más fuerza y con más estrategia
para vencerte a ti mismo y al campo de
golf. La analogía con la vida está en esos
detalles, disfrutar el trayecto y el viaje, no
sólo la desesperación por llegar al final.
Se habla de muchos aspectos que como
golfistas debemos controlar para lograr
una mayor precisión en el juego. Creo
que muchos estamos en el proceso
constante de mejorarlos en la práctica
diaria. Explicarlos de forma técnica sería
labor de un profesional en la materia,
como presidente de la Federación Ecuatoriana
de Golf y jugador apasionado,
sólo podría usar este espacio para delinear
brevemente lo que el golf significa
para mí y confirmar que es cuestión de
esfuerzo constante, de arduo trabajo y
de decisiones precisas en el campo de
golf y en la vida para que cada paso dado
te lleve al objetivo planteado.
Para un golfista el lograr embocar la bola
en el menor número de golpes posibles
equivale al gol perfecto para un futbolista,
a la carrera que como atleta siempre soñaste
ganar o a la cima que siempre has
querido coronar como andinista. Por ello
siempre un sólido inicio nos asegurará el
camino. El llegar a vencer en el juego no
es una cuestión de suerte, sino más bien
de empeño, de tenacidad, pero sobre
todo de pasión y entrega. Ese segundo
único en el que no pensabas que podrías
lograrlo, todo estuvo de tu lado y el sueño
de salir exitoso se hizo realidad.
Mañana cuando algún golfista se encuentre
en la cancha, iniciará su rutina y,
si lo hace con ese sólido primer golpe, el
grito de victoria se sentirá en todos los
rincones de su organismo y será el principio
de una gran jornada.
Micro perfil / Enrique Peñaredonda Hidalgo
Desde corta edad destacó por tener un
juego sólido. Actualmente juega en Lacosta
Country Club, sigue siendo uno de los
candidatos a ganar los torneos nacionales
en los que interviene. Varios títulos prejuveniles,
juveniles y abiertos de mayores.
Obtuvo el segundo lugar en el Augusta
Amateur de 1998, en EEUU, y en el abierto
de Los Lagartos en Bogotá, en 1994.
Puesto 11 en el Orange Bowl de 1993.
Cuatro Sudamericanos pre-juveniles, cinco
Juveniles y bastantes Copa Los Andes.
Un Mundial, dos veces el Orange Bowl
Invitational, el Campeonato Argentino de
Aficionados, Abierto de Guatemala, Colombia,
Perú, Copa Hyatt de Puerto Rico,
Torneo de las Américas en Miami y varios
torneos universitarios, primero en Columbus
State University y luego en Augusta
State University. Rankeado top 10 en División
I en el Golf Universitario. Actualmente
se desempeña como presidente de la Federación
Ecuatoriana de Golf.
11