informe sobre las migraciones en el mundo 2008 - IOM Publications

del mercado laboral. Esto es de gran importancia
para muchos países, dado el envejecimiento de
sus fuerzas de trabajo, las demandas de nuevas
aptitudes en la industria, y la tendencia de las
personas a ser cada vez menos móviles a medida
que las sociedades se vuelven más prósperas. En
segundo lugar, en comparación con la inmigración
permanente, es políticamente más fácil demostrar
las ventajas de la liberalización de la admisión
temporal a poblaciones que han llegado a sentirse
amenazadas por un mayor volumen de inmigración.
Y, en tercer lugar, algunas sociedades han
experimentado dificultades cada vez mayores con
la integración de las comunidades de inmigrantes
establecidas durante largo tiempo, por lo que
han optado por soluciones que no agraven sus
problemas (Abella, 2006: 1). 26
En el caso de los trabajadores migrantes, esos
programas proporcionan acceso a trabajo autorizado
en el extranjero, aunque de carácter temporal, así
como la oportunidad de percibir mayores salarios
(Ruhs, 2005). 27
b) Retos en materia de política
A pesar de las oportunidades que ofrece la migración
laboral temporal, hay una serie de complicados retos
en materia de política para los países de destino en
relación con la formulación de programas específicos
(Martin, 2003; Ruhs, 2005). La principal dificultad
26 Con respecto a la primera razón, se ha observado que esas personas
se sentirán menos inclinadas a emigrar para realizar trabajos poco
calificados en el extranjero, debido a que probablemente tendrán mayor
interés en las mejores oportunidades en sus propios países. Véase
también Nonnenmacher (2007a): “la migración laboral temporal se
considera como un medio de hacer frente a las demandas de mano de
obra sectoriales, de temporada y de períodos pico de manera flexible.
Su carácter temporal asegura que la opinión pública sea menos negativa
hacia ella que hacia la migración permanente. Alivia las inquietudes
relativas a la integración social de los migrantes y su dependencia en los
servicios públicos y las prestaciones de bienestar social” (en negrilla en
el original).
27 Pero también a riesgo de limitar algunos de sus derechos, una
“compensación recíproca” que los trabajadores migrantes temporales
podrían estar dispuestos a aceptar para mejorar su situación económica
(Ruhs, 2005). Para conocer los argumentos relativos al efecto de
compensación entre el número de migrantes y los derechos, véase la
exposición que figura a continuación y el Capítulo 3.
INFORME SOBRE LAS MIGRACIONES EN EL MUNDO 2008
consiste en asegurar la viabilidad, equidad y
eficiencia de esos programas a escala razonablemente
grande, dados los fracasos experimentados en materia
de política, 28 que se pueden resumir como sigue: 1)
segmentación y distorsiones de los mercados laborales
nacionales que dan lugar a que ciertos sectores,
como la agricultura, la producción de alimentos, la
hostelería y los servicios domésticos, que requieren
un bajo nivel de competencias, dependan de la
mano de obra extranjera; 2) el hecho de que los
migrantes temporales no retornen a sus países de
origen una vez vencidos sus contratos de trabajo, lo
que también se considera un elemento de disuasión
en países de destino que podrían estar dispuestos
a elaborar nuevos programas; y 3) la explotación
a que están expuestos los migrantes temporales,
especialmente los menos calificados, durante el
proceso de contratación y en el lugar de trabajo, así
como los riesgos de exclusión social, discriminación
y xenofobia en los países de destino.
Los retos en materia de política que crean las
distorsiones del mercado laboral en ciertos sectores
y la dependencia en los trabajadores extranjeros
que ello puede generar se han examinado en el
Capítulo 3. El cobro de tarifas realistas (mensuales)
a los empleadores por concepto de contratación de
trabajadores extranjeros en los sectores concernidos,
como se señala en la Sección 4.3 d) , para asegurar
que procuren encontrar trabajadores locales o
consideren otras opciones, como la mecanización
de los procesos de producción o la contratación
externa (Ruhs, 2005), se ha propuesto como una
posible solución para la segmentación del mercado
laboral. Sin embargo, el problema es más profundo y
se relaciona también con cuestiones sistémicas tales
como una remuneración baja o la falta de trabajo
decente (exacerbadas por una intensa competencia a
escala mundial) en esos sectores.
28 Dos anteriores programas temporales que frecuentemente se describen
en términos de fracaso son el programa Bracero relativo a los migrantes
mexicanos hacia los Estados Unidos (1942-1964), y el programa
Gastarbeiter (“trabajador invitado”) en Alemania (1955-1973). Véase
también el Capítulo 3 y Ruhs (2006).
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