México Bárbaro! - Webgarden

More documents

Recommendations

Info

La ley mexicana establece la pena de 5 años de prisión por delitos de este carácter contra menores, y expresamente prohibe la contratación de menores de edad y que éstos se comprometan a trabajar. Como no hay detención sin el debido proceso, parece segura la perspectiva de un fuerte castigo para Hernández, si las afirmaciones del muchacho son correctas, pues probablemente servirá de ejemplo para escarmiento de otros contratistas dispuestos a no tener cuidado en sus métodos. Dudo de poder encontrar mejor modo de terminar este capítulo que el de citar informes oficiales del gobierno de los Estados Unidos. Aunque los siguientes párrafos se hayan escrito a sangre fría, las afirmaciones que contienen son, no obstante, confirmatorias en exceso. Están tomados del Boletín Núm. 38 del Departamento del Trabajo de los Estados Unidos, publicado en enero de 1902. Me hubiera gustado hacer una cita más extensa; pero sólo tomo los siguientes párrafos de las páginas 42, 43 Y 44: En muchos Estados (mexicanos) donde se cultivan productos tropicales, los indígenas residentes trabajan bajo un contrato que es obligatorio para ellos, debido a que se hallan en deuda con el hacendado ... El sistema de trabajo forzado se lleva hasta sus lógicas consecuencias en las haciendas henequeneras de Yucatán. Allí, en todas las grandes haciendas, se encuentra un grupo de peones, llamados criados o sirvientes, que viven en ellas con sus familias; en muchos casos han nacido allí. Estos criados están ligados a la tierra por deudas, pues aunque un mero contrato para prestar ciertos servicios no impone una ocupación específica, en Yucatán se sostiene que si se ha hecho un pago anticipado, se puede exigir el reembolso del dinero, o en su defecto, la realización de un trabajo específico. El sistema de trabajo forzado por deudas parece funcionar en Yucatán a satisfacción del hacendado. El peón está obligado a trabajar a menos que pueda liquidar su deuda, la cual se halla en aumento constante; cualquier intento de huida o evasión es castigado penalmente. El peón rara vez o nunca consigue su independencia; el traspaso de un trabajador de un patrón a otro se efectúa sólo mediante el pago del importe de la deuda contraída que el nuevo patrón hace al anterior. Así, el sistema parece esclavitud, no sólo por la obligación bajo la cual trabaja el peón, sino por el gran gasto inicial del hacendado como primera inversión en mano de obra. En el Estado de Tabasco, las condiciones del trabajo forzado son algo diferentes y se agrava demasiado la dificultad del problema de mano de obra, especialmente desde el punto de vista del hacendado. En Tabasco, la ley no permite aplicar el mismo remedio que en Yucatán; es decir, la exigencia del cumplimiento específico de un contrato por cuenta del cual se ha hecho un pago anticipado; pero este inconveniente es más aparente que real, pues la autoridad gubernativa está en manos de la clase propietaria de las tierras, y la obligación de los peones contratados de trabajar para los hacendados se hace cumplir en la realidad.
Es necesario preguntar de nuevo, ¿quién ha distorsionado la verdad? ¿Yo o los otros? ¿Hay esclavitud en <strong>México</strong> y está extendida? ¿Se compran y se venden los hombres como si fueran mulas? ¿Son encerrados por las noches y cazados cuando tratan de escapar? ¿Se les deja morir de hambre, se les azota y se les mata? Con toda seguridad que estas preguntas han sido contestadas a entera satisfacción de cualquier lector honrado. Pero todavía no he respondido a esta otra pregunta: ¿por qué hay tantos norteamericanos tan interesados en desfigurar la verdad acerca de <strong>México</strong>? Capítulo XIII LM El contubernio de Díaz con la prensa norteamericana Si existe alguna combinación de intereses en los Estados Unidos que ejerza una influencia tan poderosa como la del presidente Díaz sobre la prensa norteamericana, me gustaría saber su nombre. En el capítulo anterior he afirmado que ninguna publicación mexicana se atreve -sin que importen las circunstancias- a criticar de modo directo al presidente Díaz. Aunque no se puede decir lo mismo, desde luego, de los Estados Unidos, es posible afirmar lo siguiente: existe una extraña, hasta misteriosa resistencia en los poderosos periodistas norteamericanos para publicar cualquier cosa que perjudique al gobemante mexicano y también se manifiesta en ellos un notable deseo de publicar lo que halague a ese dictador. Hasta ahora no conozco un solo libro, publicado y distribuido con regularidad en los Estados Unidos, que censure seriamente al presidente Díaz de modo personal o a su gobierno; pero podría mencionar por lo menos 10 que lo ensalzan de la manera más extravagante. En realidad, no sé de algún libro que haya circulado en los Estados Unidos, es decir, distribuido por alguna de las casas editoras conocidas, donde se hubiera intentado hacer críticas al presidente Díaz. La situación en el caso de las revistas es exactamente la misma. Aunque éstas han publicado centenares de artículos que ensalzan a Díaz -sin contar los de los diarios-, durante los últimos años no conozco una sola revista importante que haya censurado al dictador mexicano.
Page 1 and 2:
Presentación México Bárbaro! Joh
Page 3 and 4:
muchos, hombres buenos y valientes
Page 5 and 6:
Capítulo I Los esclavos de Yucatá
Page 7 and 8:
Sin embargo, en favor del señor De
Page 9 and 10:
ligeramente aquilino. En Mérida, l
Page 11 and 12:
azón de 500 por mes; pero yo no cr
Page 13 and 14:
Art. 1, Frac. 1. En la República,
Page 15 and 16:
tranquilamente, muy contento, al mi
Page 17 and 18:
grandes, dejando las treinta más p
Page 19 and 20:
- A propósito -dije, volviéndome
Page 21 and 22:
cualquier otra en el mundo. El muni
Page 23 and 24:
El origen de los conflictos yaquis
Page 25 and 26:
escondidos de la montaña en donde
Page 27 and 28:
México, y el coronel Cruz principa
Page 29 and 30:
alrededor de nosotros; algunos de e
Page 31 and 32:
- Los soldados tuvieron que arranca
Page 33 and 34:
- ¡Quítate la camisa! -ordenó á
Page 35 and 36:
El yaqui levantó la cabeza, dejand
Page 37 and 38:
En una de las casas vimos hasta cat
Page 39 and 40:
- ¿Les gustaría regresar conmigo
Page 41 and 42:
entrada está ocho kilómetros agua
Page 43 and 44:
que puede. Esté método es el que
Page 45 and 46:
después me la confirmaron varios h
Page 47 and 48:
mayordomo, varios cabos que combina
Page 49 and 50:
ellos esperaban que llegase por all
Page 51 and 52:
instruyen proceso a los detenidos.
Page 53 and 54:
palabras: Nos mandan a la muerte, a
Page 55 and 56:
hombre agachado, medio oculto tras
Page 57 and 58:
Poco después, por la tarde, nos di
Page 59 and 60:
Nos detuvimos y el capataz principa
Page 61 and 62:
tal, vigila el movimiento de 12 gra
Page 63 and 64:
- Estaban en un baile público -nos
Page 65 and 66:
adopción legal como hijos de la co
Page 67 and 68:
de ellos; 4 eran mexicanos que se s
Page 69 and 70:
no obstante que este artículo es e
Page 71 and 72:
los Estados de tierra caliente, Mé
Page 73 and 74:
Pero el general Porfirio Díaz, a p
Page 75 and 76:
El botín más grande que enriqueci
Page 77 and 78:
Los actuales ocupantes han vivido d
Page 79 and 80:
Los monopolios, llamados concesione
Page 81 and 82:
actualidad, tiene tantos en producc
Page 83 and 84:
hombre único, el deseo de presenta
Page 85 and 86:
Como instrumento de represión, el
Page 87 and 88:
en el año de 1902 a 1903, cuando e
Page 89 and 90:
silenciosamente, sin escándalo. Ha
Page 91 and 92: siempre bien recibidos en la Penite
Page 93 and 94: gobierno sobre la prensa, relativam
Page 95 and 96: Capítulo IX La destrucción de los
Page 97 and 98: persiguiendo a quienes tuvieran con
Page 99 and 100: distribuyeron aquí y allá soldado
Page 101 and 102: asesinados. Como ya se dijo, la aut
Page 103 and 104: Capítulo X La octava elección de
Page 105 and 106: Según el señor Barrón, en una en
Page 107 and 108: En julio, un comité reeleccionista
Page 109 and 110: En enero de 1910, el abogado Franci
Page 111 and 112: fueron acusados de provocación a l
Page 113 and 114: Lo más notable de esa represión f
Page 115 and 116: forzados a admitir que esa manifest
Page 117 and 118: Capítulo XI Cuatro huelgas mexican
Page 119 and 120: pequeños grupos en sus hogares, co
Page 121 and 122: - Yo no sé a cuántos mataron -me
Page 123 and 124: cigarreros, con 1,500; el de carpin
Page 125 and 126: las dificultades que el gobierno im
Page 127 and 128: Confiamos en que nuestros compañer
Page 129 and 130: demostración antiextranjera. Fue u
Page 131 and 132: parte de su capital a México o med
Page 133 and 134: El señor Edward H. Thompson fue c
Page 135 and 136: El señor Dwight E. Woolbridge, hac
Page 137 and 138: El temor de verse enganchado, muy c
Page 139 and 140: escató a la víctima y el agente e
Page 141: para tomarle declaración. Tan pron
Page 145 and 146: artículos; los alegres comentarios
Page 147 and 148: No hay terribles problemas de traba
Page 149 and 150: para advertir que se trataba de un
Page 151 and 152: corrupción política porque dañan
Page 153 and 154: (1) Después de publicada esta obra
Page 155 and 156: ¿Cuál es, pues, la razón de esa
Page 157 and 158: combinaciones que controlan el come
Page 159 and 160: - $7.50 por día, ¿eh? ¡7.50...!
Page 161 and 162: administración de las líneas unid
Page 163 and 164: descaradas. La anexión vendrá só
Page 165 and 166: En junio de 1908, por vez primera,
Page 167 and 168: fue entregado a los funcionarios de
Page 169 and 170: él rechazó el soborno. Es evident
Page 171 and 172: oportunidad de implantar sus reform
Page 173 and 174: En cuanto a la suerte de Ricardo Fl
Page 175 and 176: El comisario: - ¿Se retira la otra
Page 177 and 178: la historia; Modesto Díaz murió a
Page 179 and 180: asesinar al presidente Díaz, aunqu
Page 181 and 182: Toda persona que, dentro del territ
Page 183 and 184: que desprecian tales hechos, pues
Page 185 and 186: con el de otros países latinoameri
Page 187 and 188: fugitivo de la justicia. Se dice qu
Page 189 and 190: muy bien calificarse como criminal,
Page 191 and 192: protestaron contra la deportación
Page 193 and 194:
Una de las más notables posturas h
Page 195 and 196:
ofenderte; al contrario, he deseado
Page 197 and 198:
Capítulo XVII El pueblo mexicano E
Page 199 and 200:
pesos, se convierte en seguida en l
Page 201 and 202:
europeo, es porque en su historia l
Page 203 and 204:
también allí, debido al mayor cal
Page 205 and 206:
por dictadores, debido al apoyo oto
show all

México Bárbaro! - Webgarden

Create successful ePaper yourself

Delete template?

Save as template?