simulación del comportamiento térmico del ser humano resumen

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SIMULACIÓN DEL COMPORTAMIENTO TÉRMICO DEL SER HUMANO Luis Miguel Romeo *, Miguel Ángel Pastor, * Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos (CIRCE). Universidad de Zaragoza. Centro Politécnico Superior. María de Luna, 3, 50018 Zaragoza RESUMEN e-mail: luismi@unizar.es El comportamiento térmico del ser humano tiene importantes implicaciones sobre la vida cotidiana, pero es en el análisis de las condiciones críticas, por ejemplo en la evaluación de puestos de trabajo, donde resulta fundamental conocer la respuesta y adaptación del cuerpo humano a distintas situaciones. Esta respuesta dependerá tanto del funcionamiento termorregulador de la persona como de las condiciones externas, entendiendo por estas, no solo la temperatura y humedad sino también la influencia de la indumentaria, la radiación solar directa (o de otro foco) o el trabajo realizado entre otras variables. El presente trabajo tiene como finalidad básica el conocimiento del estado térmico del individuo cuando se le somete a condiciones térmicas adversas. Para ello, se ha elaborado un simulador de la transferencia de calor en seres humanos que integra por un lado los factores ambientales (temperatura, humedad relativa y viento), y el trabajo realizado, por otro lado los aspectos morfológicos y finalmente la influencia de la indumentaria para obtener como resultado el estado térmico del individuo (temperaturas media y de distintas zonas, sudoración, etc...). 1

SIMULACIÓN DEL COMPORTAMIENTO TÉRMICO DEL SER HUMANO<br />

Luis Miguel Romeo *, Miguel Ángel Pastor,<br />

* Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos (CIRCE).<br />

Universidad de Zaragoza. Centro Politécnico Superior. María de Luna, 3, 50018 Zaragoza<br />

RESUMEN<br />

e-mail: luismi@unizar.es<br />

El <strong>comportamiento</strong> <strong>térmico</strong> <strong>del</strong> <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> tiene importantes implicaciones sobre la vida<br />

cotidiana, pero es en el análisis de las condiciones críticas, por ejemplo en la evaluación de puestos de<br />

trabajo, donde resulta fundamental conocer la respuesta y adaptación <strong>del</strong> cuerpo <strong>humano</strong> a distintas<br />

situaciones. Esta respuesta dependerá tanto <strong>del</strong> funcionamiento termorregulador de la persona como de<br />

las condiciones externas, entendiendo por estas, no solo la temperatura y humedad sino también la<br />

influencia de la indumentaria, la radiación solar directa (o de otro foco) o el trabajo realizado entre otras<br />

variables. El presente trabajo tiene como finalidad básica el conocimiento <strong>del</strong> estado <strong>térmico</strong> <strong>del</strong><br />

individuo cuando se le somete a condiciones térmicas adversas. Para ello, se ha elaborado un simulador<br />

de la transferencia de calor en <strong>ser</strong>es <strong>humano</strong>s que integra por un lado los factores ambientales<br />

(temperatura, humedad relativa y viento), y el trabajo realizado, por otro lado los aspectos morfológicos y<br />

finalmente la influencia de la indumentaria para obtener como resultado el estado <strong>térmico</strong> <strong>del</strong> individuo<br />

(temperaturas media y de distintas zonas, sudoración, etc...).<br />

1


ABSTRACT<br />

The knowledge of the human responses to thermal environments are essential to analyze critical<br />

conditions, for example the study of work places. In these cases it is important to evaluate body<br />

temperatures and the definition of healthy limits. Body responses are influenced not only by internal<br />

thermoregulation but also by external conditions (ambient temperature and relative humidity, clothes,<br />

solar radiation, work, …). The main aim of this work is the knowledge of the human thermal behavior in<br />

adverse conditions. This objective is achieved with a body thermal simulation which includes heat transfer<br />

and body regulation. Input for the simulations are: environmental variables (temperature, humidity, wind<br />

speed), heat produced by the body, morphological aspects and clothing insulation; simulation outputs are<br />

body average temperature, temperature in different parts of the body, sweating, skin wettedness…<br />

2


INTRODUCCIÓN<br />

La necesidad de realizar una <strong>simulación</strong> <strong>del</strong> <strong>comportamiento</strong> <strong>térmico</strong> <strong>del</strong> <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> y de la ropa<br />

que utiliza es obvia, cuanto mejor se conozcan las variables de las que depende, cómo y cuánto afectan<br />

a la respuesta térmica obtenida, mejor se podrá hacer frente a situaciones extremas, se podrán<br />

establecer una <strong>ser</strong>ie de límites saludables y de confort en diferentes situaciones cotidianas o e incluso<br />

diseñar tejidos especiales para resistir las condiciones atmosféricas más adversas.<br />

En cualquier caso la disponibilidad de una herramienta informática que sirva para simular el<br />

<strong>comportamiento</strong> <strong>térmico</strong> <strong>del</strong> <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> permitirá ahorrar mucho tiempo y coste en experimentación.<br />

Hasta ahora el método disponible (1-2), consiste en consultar en unas tablas el aislamiento que<br />

proporciona una determinada prenda, para luego obtener mediante suma el aislamiento total<br />

proporcionado por la vestimenta completa de un <strong>ser</strong> <strong>humano</strong>. Este método sólo permite conocer el calor<br />

total que va a perder el <strong>ser</strong> <strong>humano</strong>, sin embargo no permite calcular el calor perdido y el grado de<br />

sudoración, las temperaturas internas <strong>del</strong> cuerpo cuando resulta, por ejemplo, que la temperatura interna<br />

<strong>del</strong> tronco suele diferir bastante de la de las manos.<br />

Con el nuevo mo<strong>del</strong>o desarrollado se pretende calcular, para cada parte <strong>del</strong> cuerpo, todas las<br />

variables que intervienen en la transferencia de calor en el <strong>ser</strong> <strong>humano</strong>, teniendo en cuenta la ropa que<br />

lleva el individuo en cada zona y las características de ésta (aislamiento <strong>térmico</strong>, espesor y<br />

permeabilidad al vapor de agua). El objetivo es realizar un mo<strong>del</strong>o útil para realizar comparaciones y<br />

obtener, para un determinado puesto de trabajo y unas condiciones ambientales dadas, tendencias de la<br />

evolución de las temperaturas de distintas partes <strong>del</strong> cuerpo, y otras variables de interés como<br />

sudoración, vasodilatación o vasoconstricción.<br />

MATERIAL Y MÉTODOS<br />

La creación de un simulador <strong>térmico</strong> <strong>del</strong> <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> requiere integrar en un único mo<strong>del</strong>o, el<br />

organismo, tanto en sus aspectos antropomórficos como en los mecanismos que regulan su estado<br />

<strong>térmico</strong> en cualquier circunstancia, con el intercambio de calor que tienen lugar en el interior <strong>del</strong> cuerpo y<br />

entre éste y el entorno que lo rodea. El objetivo de este trabajo representa una síntesis entre medicina y<br />

física. En la primera parte se incluyen los mecanismos que tienen los <strong>ser</strong>es <strong>humano</strong>s para controlar,<br />

3


aumentar o disminuir su temperatura, y la segunda tiene en cuenta las variables influyentes en la<br />

transferencia de calor entre el <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> y el ambiente. Para lograr dicho objetivo es imprescindible<br />

identificar todos mecanismos de intercambio de energía que se pueden realizar, definir cuáles de ellos se<br />

llevan a cabo realmente y desde donde se producen y, finalmente, conocer fisiológicamente la respuesta<br />

<strong>del</strong> organismo a estos intercambios energéticos.<br />

Calor metabólico.<br />

Es una generación de calor que es evacuada al exterior y está asociada a la actividad realizada<br />

por las células, que transforman la energía química de los alimentos en energía mecánica y térmica. Se<br />

relaciona directamente con la intensidad <strong>del</strong> trabajo, a mayor intensidad, mayor producción de calor<br />

metabólico. También influyen otras variables como la edad, el sexo y el entrenamiento (3), por estas<br />

razones su valor global es una variable de entrada al mo<strong>del</strong>o. Este valor se distribuye para las diferentes<br />

zonas y tejidos <strong>del</strong> cuerpo, siendo el tronco y los músculos los que se llevan la mayor aportación (4).<br />

Flujo sanguíneo.<br />

Da lugar a un intercambio de calor entre diferentes zonas <strong>del</strong> cuerpo <strong>humano</strong>. Se representa en<br />

el mo<strong>del</strong>o como un departamento que tiene una temperatura que es hallada mediante un balance de<br />

energía. Se supone que las venas y arterias se encuentran en contacto con todas las partes <strong>del</strong> cuerpo y<br />

con todos los tejidos de cada una de ellos. Si la temperatura de la sangre es distinta de la de cada zona<br />

se produce un intercambio de calor cuya dirección depende <strong>del</strong> valor de las temperaturas, si es mayor la<br />

primera es una entrada de calor al sistema, si ocurre lo contrario se considera una pérdida de calor.<br />

El aporte de calor por flujo sanguíneo depende de la cantidad de sangre que llega a cada zona,<br />

de su capacidad calorífica y de la diferencia de temperaturas entre el flujo sanguíneo y el tejido. La<br />

cantidad de sangre que llega a cada zona <strong>del</strong> cuerpo se calcula mediante valores de bibliografía (4) y<br />

está relacionada con el oxígeno presente en la misma y por lo tanto con la actividad física realizada. Se<br />

tiene en cuenta que algunas zonas se caracterizan por necesitar un flujo sanguíneo constante por<br />

ejemplo el cerebro y la zona interna <strong>del</strong> tronco donde están las grandes vísceras.<br />

Evaporación y enfriamiento evaporativo.<br />

Representa la principal fuente de protección <strong>del</strong> <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> frente al calor y se debe a la<br />

evacuación de calor <strong>del</strong> cuerpo por sudoración y por la respiración. La primera se produce cuando se<br />

evapora el sudor depositado sobre el cuerpo, se toma energía de la piel descendiendo su temperatura y<br />

4


cediendo calor al exterior. Su valor depende de la diferencia entre las presiones de vapor de la piel y <strong>del</strong><br />

ambiente, <strong>del</strong> coeficiente de transferencia de calor por evaporación (que está relacionado con el<br />

coeficiente de transferencia de calor por convección), y de la humedad de la piel. Las pérdidas asociadas<br />

a la respiración están relacionadas con las diferentes propiedades <strong>del</strong> aire expirado y <strong>del</strong> entorno.<br />

Aunque importante, su cuantía es inferior a la primera, depende de la ventilación pulmonar, asociada a la<br />

producción metabólica, y de las diferencias de temperatura y humedad <strong>del</strong> aire ambiente y el expulsado.<br />

Conducción.<br />

Se produce dentro <strong>del</strong> cuerpo desde el interior (tejido interno) hacia el exterior (piel). Su valor<br />

está determinado por la Ley de Fourier y depende de la conductividad térmica de los tejidos (4), de la<br />

diferencia de temperaturas entre ellos y de la distancia a la cual se da esta diferencia. Para calcular su<br />

valor, el aspecto morfológico de las personas se simplifica mediante formas geométricas sencillas, es<br />

decir, cilindros y esferas. El cuerpo queda formado de esta manera por cinco cilindros que representan<br />

tronco, brazos, manos, piernas y pies, y una esfera representando la cabeza, dividiéndose a su vez,<br />

cada una de estas partes, en tejido interno, músculo, tejido adiposo y piel (4, 5).<br />

Convección.<br />

Representa la evacuación <strong>del</strong> calor de la piel al aire circundante. Al <strong>ser</strong> el organismo un cuerpo<br />

sólido que se encuentra en el seno de un fluido (aire) y en movimiento relativo, tiene lugar entre ellos una<br />

transferencia de calor por convección que, según la Ley de Newton, depende de la diferencia de<br />

temperaturas entre la piel y el fluido y <strong>del</strong> coeficiente de convección. Este coeficiente de determina<br />

mediante correlaciones empíricas o semiempíricas de la bibliografía de transferencia de calor y está<br />

influido por parámetros geométricos <strong>del</strong> cuerpo, por las características <strong>del</strong> fluido y, principalmente, por la<br />

velocidad relativa entre el cuerpo y el fluido.<br />

En la figura 1 se muestra un esquema de las resistencias térmicas y de los flujos de calor que se<br />

encuentran en el tronco, donde se incluyen los intercambios energéticos debidos al flujo sanguíneo y<br />

calor metabólico en el tejido interno, músculo, tejido adiposo y piel (FS_i, M_i), además de la resistencia<br />

al paso de calor de cada uno de ellos, la respiración (Evp), la evaporación de sudor (Esk) y la pérdidas<br />

por convección al exterior.<br />

Radiación.<br />

5


Es un intercambio energético por medio de ondas electromagnéticas y se produce siempre que<br />

cuerpo y ambiente están a temperaturas diferentes; puede <strong>ser</strong> tanto un aporte positivo como negativo.<br />

Tiene dos formas, la radiación solar directa y la radiación infrarroja. La cantidad de calor procedente de<br />

la radiación solar directa es elevada y proporciona un calor positivo, sin embargo no está siempre<br />

presente. La radiación infrarroja está siempre presente aportando o quitando calor <strong>del</strong> cuerpo <strong>humano</strong>.<br />

La radiación solar directa que recibe el cuerpo <strong>humano</strong> depende <strong>del</strong> flujo de energía solar, función de la<br />

hora <strong>del</strong> día y la época <strong>del</strong> año y que se toma como entrada al simulador, de la cantidad de cuerpo<br />

cubierta por ropa y de las características de absorción de energía de la piel. La radiación infrarroja tiene<br />

una fuerte dependencia de las temperaturas de las tres superficies implicadas (piel, ropa y entorno) y de<br />

la cantidad de ropa utilizada.<br />

Mecanismos reguladores de la temperatura.<br />

El <strong>comportamiento</strong> <strong>térmico</strong> <strong>del</strong> <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> se simula mediante de dos sistemas<br />

complementarios, el sistema controlado (pasivo) y el sistema controlante (termorregulador) (6). El<br />

sistema controlado está formado por los diferentes tejidos <strong>del</strong> cuerpo <strong>humano</strong> (interno, musculoso,<br />

adiposo y piel), que ofrecen resistencia térmica a la transferencia de calor. El sistema controlante es el<br />

encargado de mantener la temperatura <strong>del</strong> cuerpo en los niveles más cercanos al estado de referencia.<br />

Para desempeñar su función el sistema controlante posee tres subsistemas: el sensitivo, formado por<br />

todas las terminaciones nerviosas encargadas de recoger las temperaturas de diferentes zonas <strong>del</strong><br />

cuerpo; el integrador que se encarga de comparar las temperaturas en cada instante con unas de<br />

referencia, determinando si el individuo siente calor o frío; y el efector, que es el encargado de ejecutar<br />

las acciones ordenadas por el subsistema integrador, siempre dentro de los límites físicos permitidos por<br />

el cuerpo. Dichas acciones correctoras son la vasodilatación y la sudoración cuando es necesario<br />

disminuir la temperatura corporal (ceder calor al ambiente) y la vasoconstricción y el estremecimiento<br />

(relacionado con la actividad física) en el caso de necesidad de aumentar la temperatura. Estas señales<br />

se incorporan al mo<strong>del</strong>o de transferencia de calor en <strong>ser</strong>es <strong>humano</strong>s mediante funciones matemáticas<br />

obtenidas de ensayos de bibliografía (4, 7, 8). Estas funciones relacionan cada una de estas actuaciones<br />

y su magnitud con la diferencia de temperatura <strong>del</strong> cuerpo <strong>humano</strong> respecto a su estado neutro<br />

Influencia de la indumentaria.<br />

6


Es evidente que la <strong>simulación</strong> <strong>del</strong> conjunto <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> – indumentaria necesita de dos partes, la<br />

correspondiente a la transferencia de calor desde el interior <strong>del</strong> cuerpo <strong>humano</strong> hasta la piel y la<br />

correspondiente a la transferencia de calor desde la piel al entorno. En el caso de introducir la<br />

indumentaria esta transferencia de calor se modifica al introducir una capa de aire confinado y la capa de<br />

ropa. La ropa que cubre el cuerpo proporciona un efecto aislante en uno y otro sentido, tanto para el<br />

paso de calor como de vapor de agua. El efecto aislante no se debe únicamente al tejido de la prenda,<br />

sino también a la fina capa de aire creada entre la piel y el tejido (9). El efecto de renovación de este aire<br />

es una variable esencial para considerar el efecto aislante y el cálculo de su temperatura. En la figura 2<br />

se puede ob<strong>ser</strong>var un esquema <strong>del</strong> mo<strong>del</strong>o <strong>térmico</strong> de la ropa empleado en la <strong>simulación</strong>.<br />

Considerando la indumentaria, la convección <strong>del</strong> calor y humedad desde la piel hasta el exterior<br />

de la ropa juega un papel determinante en las temperaturas <strong>del</strong> <strong>ser</strong> <strong>humano</strong>. El primer intercambio<br />

energético se realiza desde la piel a la capa de aire existente entre piel y ropa (C1 y Esk en la figura 2),<br />

este intercambio se produce por convección y por evaporación y es mayor a medida que aumenta la<br />

velocidad <strong>del</strong> viento exterior por la mayor renovación de aire. El segundo intercambio convectivo se<br />

produce entre la capa de aire y la parte interna de la ropa (C2I). Una vez que el calor llega a la ropa se<br />

transmite por conducción (Cond) y el tercer intercambio energético se lleva a cabo mediante convección<br />

con el aire exterior (C2E) y se ve afectado directamente por la velocidad <strong>del</strong> viento. Además de la<br />

transferencia de calor es necesario tener en cuenta el calor disipado por evaporación (Esk), la<br />

indumentaria tiene una influencia fundamental ya que provoca una barrera al paso <strong>del</strong> vapor de agua. Si<br />

la ropa es impermeable, el sudor no puede escapar al exterior, provocando una sensación de malestar al<br />

individuo e impidiendo que la piel se refrigere. Por lo tanto el mo<strong>del</strong>o considera dos tipos de aislamiento<br />

<strong>del</strong> cuerpo frente al exterior, uno es el aislamiento <strong>térmico</strong> y otro es el aislamiento <strong>del</strong> vapor de agua.<br />

También se tiene en cuenta la renovación de la capa de aire entre la piel y el tejido que actúa como<br />

aislante e incluye los intercambios energéticos entre la piel y el exterior por la zona que no está vestida<br />

(C3E). Finalmente, otro aspecto a tener en cuenta es que la ropa actúa como barrera frente a la<br />

radiación puesto que la energía absorbida y reflejada por ella (Scl) no le llega directamente a la piel<br />

(Ssk). Según las características de la ropa, la energía absorbida o reflejada por ésta <strong>ser</strong>á mayor o<br />

menor, afectando así a la energía recibida por la piel.<br />

Una vez obtenidos los flujos de energía que afectan a todas las partes <strong>del</strong> cuerpo e indumentaria<br />

se debe de cumplir el principio de con<strong>ser</strong>vación de la energía. Para ello se realiza un balance de energía<br />

7


para cada parte <strong>del</strong> cuerpo y otro general al flujo sanguíneo que es el que permite relacionar entre sí<br />

todas las temperaturas.<br />

RESULTADOS<br />

El simulador ha sido validado para el <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> desnudo comparándolo con datos procedentes<br />

de bibliografía, obteniendo como principales conclusiones que en estado estacionario los resultados<br />

obtenidos son correctos, y en estado transitorio el simulador predice correctamente el estado <strong>térmico</strong><br />

cuando el ejercicio realizado es inferior a 550 W (5). Para comprobar la utilidad <strong>del</strong> mo<strong>del</strong>o desarrollado<br />

incluyendo la indumentaria se exponen una <strong>ser</strong>ie de situaciones y ejemplos para ob<strong>ser</strong>var el<br />

<strong>comportamiento</strong> <strong>térmico</strong> <strong>del</strong> <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> y su variación en el tiempo.<br />

Ejemplo 1. Evaluación <strong>del</strong> puesto de trabajo de producción<br />

Se evalúa desde un punto de vista <strong>térmico</strong> el puesto de trabajo de fábrica cuya tarea se realiza<br />

en una línea de montaje y consiste en la colocación de unas piezas de aluminio en el interior de hornos<br />

para que se suelden y ajusten. El individuo se considera que mide 1,72 m. y pesa 74,4 kg., la<br />

temperatura exterior 30ºC, humedad relativa 60%, temperatura radiante media 50 ºC, velocidad <strong>del</strong><br />

viento 0,1 m/s debida básicamente al movimiento realizado por el individuo, trabajo físico realizado de 95<br />

W/m 2 y radiación solar directa nula. Se estudia el <strong>comportamiento</strong> <strong>térmico</strong> <strong>del</strong> individuo durante las ocho<br />

horas de trabajo, contando con un descanso intermedio de veinte minutos en el que la temperatura<br />

exterior baja a 24ºC, la humedad al 50%, la temperatura radiante media baja a 30ºC y el trabajo físico<br />

pasa a <strong>ser</strong> nulo.<br />

Para la definición de la ropa es habitual emplear un índice de aislamiento <strong>térmico</strong> que tiene un<br />

valor de 0.155 m 2 ºC/W y que se denota por “clo” (1-2). La ropa que llevan los empleados es<br />

proporcionada por la empresa y consiste en una camiseta de manga corta (0,09 clo), un pantalón tipo<br />

chándal (0,28 clo), calcetines (0,02 clo) y zapatos de suela gruesa (0,04 clo), hay que añadir la ropa<br />

interior (0,04 clo), de este modo quedan cubiertos pies, piernas, tronco y brazos (35 %), quedando el<br />

resto <strong>del</strong> cuerpo al descubierto. Toda la ropa se supone igual de permeable, con un coeficiente de<br />

permeabilidad (que representa la relación entre el calor evaporativo que puede cederse con una ropa<br />

determinada y el de un termómetro de bulbo húmedo con la misma resistencia térmica al calor sensible)<br />

que es habitual para la ropa de 0,4 (10).<br />

8


La figura 3 muestra la evolución de la temperatura interna de la cabeza. Es necesario tener en<br />

cuenta que las condiciones de trabajo que se estudian son térmicamente exigentes debido a altas<br />

temperaturas exteriores y temperaturas radiante, además de una actividad física apreciable. Se ob<strong>ser</strong>va<br />

un descenso en la temperatura interna de la cabeza debido a razones dinámicas de la regulación, a los<br />

pocos minutos empieza a incrementarse hasta los 37,85ºC en la cuarta hora de trabajo que es cuando<br />

tiene lugar un descanso de veinte minutos, en el que la temperatura desciende hasta 37,75ºC. Se<br />

aprecia la inercia térmica <strong>del</strong> cuerpo y de su regulación ya que en los minutos posteriores al descanso la<br />

temperatura sigue descendiendo ligeramente. En el momento en el que termina la jornada laboral la<br />

temperatura se ha elevado nuevamente hasta 37,87ºC. Se comprueba que el descanso es<br />

imprescindible para el trabajador ya que permite que la temperatura interna de la cabeza se mantenga<br />

en niveles adecuados no superando en ningún momento los 38ºC temperatura a la cual aumentan las<br />

posibilidades de un colapso <strong>del</strong> individuo (11).<br />

Otra variable importante es la temperatura media de la piel, figura 4. Esta variable está más<br />

influenciada por el exterior que la temperatura interna ya que la piel es la que recibe la radiación y la<br />

primera que sufre las consecuencias de las condiciones ambientales externas, por esta razón el aumento<br />

total de esta temperatura llega hasta 2ºC, siendo de 1ºC en el caso de la temperatura interna. Este<br />

aumento da lugar a una mayor transferencia de calor por convección y sudoración. Otra diferencia con el<br />

caso anterior es que al terminar el descanso la temperatura de la piel empieza a subir inmediatamente<br />

en cuanto el operario regresa al puesto, debido a la radiación procedente <strong>del</strong> horno.<br />

La última variable que ofrece unos resultados significativos es la humedad de la piel, es decir, la<br />

fracción <strong>del</strong> cuerpo que se encuentra mojada por el sudor. La figura 5 muestra la humedad de la piel <strong>del</strong><br />

tronco puesto que es donde más se aprecia la molestia <strong>del</strong> sudor. La humedad de la piel se incrementa<br />

rápidamente ya que el calor evacuado por sudoración debe <strong>ser</strong> elevado para que la temperatura interna<br />

de la cabeza se mantenga en valores adecuados. El inconveniente es que casi el 90% de la piel <strong>del</strong><br />

trabajador se ve cubierta de sudor con la molestia que esto conlleva. Al igual que la temperatura de la<br />

piel, cuando llega el descanso el descenso es rápido, pero el incremento posterior también lo es,<br />

alcanzando un valor aproximadamente constante durante el resto de la jornada. Esta sudoración hace<br />

que las pérdidas de agua por sudoración alcancen aproximadamente 3 litros al acabar la jornada laboral,<br />

razón por la cual resulta imprescindible una adecuada hidratación que incluya sales minerales.<br />

9


Con este ejemplo se comprueba la aplicabilidad <strong>del</strong> simulador desarrollado y la forma en que<br />

facilita la obtención de conclusiones para la prevención y posibles modificaciones de condiciones de<br />

trabajo para facilitar riegos innecesarios. En este caso se ob<strong>ser</strong>va como los trabajadores <strong>del</strong> ejemplo<br />

pasan la jornada sin sufrir ningún peligro físico pero estando cerca <strong>del</strong> límite saludable, además hay que<br />

tener en cuenta la incomodidad de que una sudoración elevada no proporciona las condiciones de<br />

trabajo idóneas. El descanso intermedio realizado es imprescindible y evita un estrés <strong>térmico</strong> importante<br />

a los trabajadores. Entre posibles soluciones para paliar estas condiciones se incluirían la realización de<br />

otro pequeño descanso que disminuyera las temperaturas y la sudoración, el empleo de ropa más<br />

traspirable, e incluso la instalación de pequeñas ventilaciones para que el cuerpo evacue más calor por<br />

convección disminuyendo la aportación de la sudoración.<br />

Ejemplo 2. Trabajo en condiciones extremas<br />

En este apartado se va a analizar el <strong>comportamiento</strong> <strong>térmico</strong> de un trabajador a la intemperie<br />

que realice un trabajo físico considerable expuesto a la radiación solar de la mañana de un día de<br />

agosto. El resto de condiciones son las siguientes: individuo de 74,4 kg y 1,72 m, temperatura exterior de<br />

30ºC, humedad relativa <strong>del</strong> 50%, velocidad <strong>del</strong> viento de 0,1 m/s por el movimiento realizado por el<br />

individuo, trabajo físico realizado de 380 W/m 2 y radiación solar directa recibida 200 W/m 2 .<br />

La ropa que lleva el trabajador consiste en una camiseta de manga corta (0,09 clo), un pantalón<br />

ligero (0,20 clo), calcetines (0,02 clo) y zapatos ligeros (0,02 clo), hay que añadir la ropa interior (0,04<br />

clo), de este modo quedan cubiertos pies, piernas, tronco y brazos (35 %), quedando el resto <strong>del</strong> cuerpo<br />

al descubierto. Se realiza también una comparativa entre la opción de trabajar con y sin camiseta.<br />

Debido a que el esfuerzo es elevado cada cierto tiempo hace un descanso y se mete en la<br />

cabina <strong>del</strong> tractor que tiene aire acondicionado que le proporciona una temperatura interior de 18ºC, una<br />

humedad relativa <strong>del</strong> 50% y una velocidad <strong>del</strong> aire de 5 m/s. Hace dos descansos de 13 y 18 minutos, el<br />

primero a los 17 de haber empezado a trabajar y el segundo a los 42 minutos de haber empezado a<br />

trabajar.<br />

En la figura 6 se ob<strong>ser</strong>va como la temperatura interna de la cabeza aumenta rápidamente y el<br />

primer descanso se realiza antes de que se alcance el límite de 38ºC. Hasta la finalización <strong>del</strong> primer<br />

descanso las curvas de temperatura son iguales, pero una vez que finaliza y el hombre empieza a<br />

trabajar de nuevo, la temperatura interna de la cabeza en el caso de utilizar camiseta aumenta más<br />

10


ápidamente y alcanza el límite físico antes de llegar al segundo descanso. Esta situación no sucede en<br />

el caso de trabajar sin camiseta. Una vez concluido el descanso se aprecia que la temperatura en el<br />

caso sin camiseta disminuye bastante más y al trabajar de nuevo se alcanza el límite de los 38ºC unos<br />

minutos más tarde.<br />

La temperatura media de la piel, figura 7, es mucho más sensible a los cambios ambientales que<br />

la temperatura interna de la cabeza, presentando unos valores menos continuos y más extremos, sobre<br />

todo en el caso de trabajar sin camiseta. Esto es más o menos evidente ya que la ropa amortigua las<br />

variaciones de las condiciones atmosféricas. Se aprecia que desde que comienza el primer descanso la<br />

temperatura de la piel sin camiseta es menor que la de la curva con camiseta. Esto influye en la<br />

humedad de la piel puesto que al estar a mayor temperatura permite evaporar más sudor y ceder más<br />

calor por radiación y convección. Una variable que muestra una variación contraria a la temperatura de la<br />

piel es la vasoconstricción, cuya evolución con el tiempo se muestra en la figura 8. La vasoconstricción<br />

sucede cuando el individuo siente frío, es decir, cuando se introduce en la cabina refrigerada para<br />

descansar, de este modo a los 3 minutos de comenzar a trabajar la vasoconstricción desaparece<br />

completamente. Se deduce que cuando lleva camiseta el efecto es menor y más amortiguado que sin<br />

camiseta, al contrario que sucede cuando se somete a las condiciones calurosas exteriores. Se aprecia<br />

un pico de subida al final <strong>del</strong> segundo descanso, probablemente debido a características de la dinámica<br />

reguladora. Finalmente se muestra la humedad de la piel, figura 8, que resulta mayor al trabajar con<br />

camiseta situación lógica ya que cualquier elemento que se interponga entre la piel y el entorno supone<br />

una barrera al paso <strong>del</strong> vapor de la sudoración. Esta humedad se elimina completamente al llegar a los<br />

descansos explicando las variaciones de la temperatura de la piel.<br />

En conclusión, la realización de un trabajo tan fatigoso puede crea una situación de peligro para<br />

el trabajador a no <strong>ser</strong> que se realicen los descansos adecuados y a su debido tiempo. Además la ropa<br />

utilizada influye en el tiempo que el trabajador puede mantener su actividad. De cualquier forma la<br />

recomendación <strong>ser</strong>ía no realizar un trabajo tan duro con los niveles de radiación solar, temperatura<br />

ambiental y actividad física estudiados ya que se llega pronto (70 minutos) a un alto riesgo de colapso.<br />

CONCLUSIONES<br />

El objetivo de este artículo es mostrar el simulador desarrollado para evaluar el <strong>comportamiento</strong><br />

<strong>térmico</strong> <strong>del</strong> <strong>ser</strong> <strong>humano</strong> ante diferentes situaciones y con diferentes tipos de ropa, permitiendo<br />

11


seleccionar aquella indumentaria que permita al individuo realizar un trabajo en unas condiciones<br />

ambientales dadas de manera que no corra peligro su salud y se sienta lo más cómodo posible<br />

Una vez realizada la validación <strong>del</strong> mo<strong>del</strong>o se utiliza para simular, comprobar la influencia de<br />

factores atmosféricos y de indumentaria, facilitar la obtención de conclusiones para la prevención y<br />

obtener posibles modificaciones de condiciones de trabajo para evitar riegos innecesarios. Así se pueden<br />

diseñar descansos en el tiempo adecuado para lograr unas condiciones óptimas de trabajo a lo largo de<br />

jornada laboral completa, el empleo de distintos tipos de indumentaria para disminuir en determinados<br />

casos el estrés <strong>térmico</strong>, la instalación de equipos de calefacción/refrigeración para disminuir la influencia<br />

de las condiciones ambientales o la recomendación de no realizar distintos tipos de trabajo cuando las<br />

condiciones externas lo desaconsejen.<br />

Finalmente, se debe tener presente que la <strong>simulación</strong> realizada y los resultados obtenidos son<br />

válidos para un individuo estándar ya que es prácticamente imposible cuantificar los aspectos<br />

psicológicos y subjetivos que son propios de cada persona y, evidentemente, los resultados de la<br />

<strong>simulación</strong> tendrán ligeras desviaciones respecto a resultados experimentales particulares.<br />

Como trabajo futuro resulta necesario seguir investigando el modo de definir completamente las<br />

características de un tejido, en lo que respecta al aspecto <strong>térmico</strong> como al aspecto de transferencia de<br />

vapor. Resulta de interés obtener un mo<strong>del</strong>o que pueda incluir distintas capas de ropa, cada una de ellas<br />

con unas características diferentes, así se podría simular el <strong>comportamiento</strong> de los actuales diseños de<br />

prendas formadas por varias capas y cada una con un propósito diferente (evitar el paso de agua pero<br />

no el de vapor, evitar el efecto <strong>del</strong> viento, proporcionar una baja conductividad térmica al conjunto,...),<br />

para de esta forma extraer conclusiones para la prevención de riesgos por estrés <strong>térmico</strong>.<br />

12


BIBLIOGRAFÍA<br />

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13


Figura 1. Mo<strong>del</strong>o de resistencias con flujos de calor <strong>del</strong> cuerpo desnudo.<br />

14


Figura 2. Intercambios de energía entre piel y exterior a través de la ropa.<br />

15


Tcab (ºC)<br />

38,2<br />

38<br />

37,8<br />

37,6<br />

37,4<br />

37,2<br />

37<br />

36,8<br />

36,6<br />

36,4<br />

Temperatura interna de la cabeza<br />

0 50 100 150 200 250 300 350 400 450 500<br />

Tiempo (min)<br />

Figura 3. Evolución de la temperatura interna de la cabeza en el ejemplo 1.<br />

16


Tpiel (ºC)<br />

38,0<br />

37,5<br />

37,0<br />

36,5<br />

36,0<br />

35,5<br />

35,0<br />

34,5<br />

34,0<br />

Temperatura media de la piel<br />

0 50 100 150 200 250 300 350 400 450 500<br />

Tiempo (min)<br />

Figura 4. Evolución de la temperatura media de la piel en el ejemplo 1.<br />

17


wpiel<br />

1,2<br />

1<br />

0,8<br />

0,6<br />

0,4<br />

0,2<br />

0<br />

Humedad de la piel<br />

0 50 100 150 200 250 300 350 400 450 500<br />

Tiempo (min)<br />

Figura 5. Evolución de la humedad de la piel <strong>del</strong> tronco en el ejemplo 1.<br />

18


Tcab (ºC)<br />

39<br />

38,5<br />

38<br />

37,5<br />

37<br />

36,5<br />

Temperatura interna de la cabeza<br />

0 10 20 30 40 50 60 70 80 90<br />

Tiempo (min)<br />

Sin Camiseta Con Camiseta<br />

Figura 6. Evolución de la temperatura interna de la cabeza en el ejemplo 2.<br />

19


Tpiel (ºC)<br />

40<br />

38<br />

36<br />

34<br />

32<br />

30<br />

28<br />

Temperatura media de la piel<br />

0 10 20 30 40 50 60 70 80 90<br />

Tiempo (min)<br />

Sin Camiseta Con Camiseta<br />

Figura 7. Evolución de la temperatura media de la piel en el ejemplo 2.<br />

20


Vasoconstricción (-)<br />

200<br />

175<br />

150<br />

125<br />

100<br />

75<br />

50<br />

25<br />

0<br />

Vasoconstricción<br />

0 10 20 30 40 50 60 70 80 90<br />

Tiempo (min)<br />

Sin Camiseta Con Camiseta<br />

Figura 8. Evolución de la vasoconstricción en el ejemplo 2.<br />

21


wpiel<br />

1,2<br />

1<br />

0,8<br />

0,6<br />

0,4<br />

0,2<br />

0<br />

Humedad de la piel<br />

0 10 20 30 40 50 60 70 80 90<br />

Tiempo (min)<br />

Sin Camiseta Con Camiseta<br />

Figura 9. Evolución de la humedad media de la piel en el ejemplo 2.<br />

22

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