13.07.2013 Views

Documento - GutenScape.com

Documento - GutenScape.com

Documento - GutenScape.com

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Figuraba en su corte ambulante un ciudadano de Florencia<br />

llamado Nicolás Maquiavelo. La República florentina, justamente<br />

alarmada por los progresos de César, había encargado al más sutil<br />

de sus diplomáticos que le siguiese de cerca a fin de adivinar sus!<br />

intenciones. El duque, tan diplomático <strong>com</strong>o él, adivinaba esta<br />

hipócrita vigilancia, <strong>com</strong>unicándole únicamente aquello que le<br />

convenía decir. De todos modos, Maquiavelo se mostraba cada<br />

vez más convencido de que este conquistador de veinticuatro<br />

años acabaría por adueñarse de Florencia y demás estados<br />

inmediatos, creando una Italia única y <strong>com</strong>pacta bajo el<br />

protectorado de los pontífices.<br />

Lucrecia se casaba en Roma por poderes con Alfonso de<br />

Ferrara, emprendiendo una marcha lenta hacia los estados de su<br />

marido, seguida de majestuoso cortejo. Durante el baile con que<br />

celebró su matrimonio en el Vaticano, mostrábase de pronto un<br />

danzarín, vestido elegantemente de negro, con antifaz del mismo<br />

color. Bailaba solo, con una maestría y una gracia que hacían<br />

retirarse a los demás, atrayendo las miradas de todos los presentes<br />

y creando en torno a su persona un silencio admirativo. A los<br />

pocos momentos lo reconocían a causa de su habilidad.<br />

—Es nuestro César..., el único César. Sólo puede ser él.<br />

Había abandonado sus tropas, llegando a Roma en una de<br />

aquellas galopadas que duraban días enteros y eran motivo de que<br />

las gentes lo viesen a un mismo tiempo en diversos lugares, muy<br />

apartados unos de otros. Bailaba algunos minutos nada más en la<br />

boda de su hermana y desaparecía tan misteriosamente <strong>com</strong>o<br />

había llegado.<br />

El papa hacía un viaje por mar a Piombino para ver esta<br />

última conquista de su hijo, cuya puerta y murallas reparaba<br />

Leonardo de Vinci.<br />

Mostrábase triste Alejandro luego de la partida de su hija para<br />

sus nuevos estados, <strong>com</strong>o si presintiese que ya no la vería más.<br />

Después de las fiestas de Piombino y las conversaciones del<br />

Pontífice con Leonardo, maravillosamente experto en toda clase<br />

de materias, una horrible tempestad ponía en peligro las galeras<br />

273

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!