Episodios Nacionales - Mendizábal.pdf - Ataun
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-No... lo que me consta es que algunos cándidos han echado a volar ese nombre, denigrándolo con la suposición de que teníamos en la persona que lo lleva un nuevo Pretendiente. Y esto es absurdo; esto no cabe en cabeza humana, ni aun en la de un español de 1835, que es la cabeza que nos ofrece la historia como más destornillada. -Y, sin embargo, hay quien lo dice. -Y quien lo cree, y lo sostiene como cosa muy práctica. -Y no falta quien asegure que es la única salvación del país. -Señores, son muchas salvaciones para un solo país... Salvadora la Reina Cristina, salvador D. Carlos, salvador Mendizábal, y ahora también D. Francisco nos quiere salvar... Vamos, con tantas salvaciones, España va al abismo.
-Señores, no desvariemos -indicó Hillo-. El señor infante D. Francisco, que es persona discreta, no ha puesto sus ojos en el Trono... Se contentará por hoy con sentarse en el Estamento de Próceres. -Pretensión contraria a las leyes, tras de la cual hemos de ver y vemos una ambición política muy sospechosa, señores, muy sospechosa. -No exageremos... Cuando más, cuando más, Dracón aspira a la Regencia... -¡Otra te pego!... -Señores conferenciantes -dijo Hillo con festiva severidad-, que no permito, que no puedo consentir afirmaciones tan contrarias al decoro de la Real Familia... Si siguen sus señorías por ese camino, mandaré que les lleven al corral. -¿Somos gallinas?
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cándidos han echado a volar ese nombre, denigrándolo<br />
con la suposición de que teníamos<br />
en la persona que lo lleva un nuevo Pretendiente.<br />
Y esto es absurdo; esto no cabe en cabeza<br />
humana, ni aun en la de un español de 1835,<br />
que es la cabeza que nos ofrece la historia como<br />
más destornillada.<br />
-Y, sin embargo, hay quien lo dice.<br />
-Y quien lo cree, y lo sostiene como cosa<br />
muy práctica.<br />
-Y no falta quien asegure que es la única salvación<br />
del país.<br />
-Señores, son muchas salvaciones para un<br />
solo país... Salvadora la Reina Cristina, salvador<br />
D. Carlos, salvador <strong>Mendizábal</strong>, y ahora<br />
también D. Francisco nos quiere salvar... Vamos,<br />
con tantas salvaciones, España va al abismo.